El vocero del Pentágono, Geoff Morrell, dijo que el Departamento de Defensa "exige que Wikileaks retorne inmediatamente al gobierno de EEUU todas las versiones de documentos obtenidos directa o indirectamente “ de la base de datos del Pentágono o registros.
La revelación del sitio web “de un gran número de nuestros documentos ya ha amenazado la seguridad de nuestras tropas, nuestros aliados y ciudadanos afganos, quienes están trabajando con nosotros para ayudar a traer la paz y estabilidad en esa parte del mundo”, dijo Morrell.
“El único curso aceptable para Wikileaks es tomar iniciativas inmediatamente para devolver todas las versiones de todos esos documentos al gobierno de EEUU y borrarlos permanentemente de su sitio web, computadoras y registros”, añadió.
Se estima que Wikileaks publicó unos 92.000 documentos clasificados sobre Afganistán.
Morrell afirmó que cualquier revelación pública adicional de información clasificada “solo puede empeorar el daño”.
Un lote de documentos que Wikileaks publicó el 25 de julio contienen una serie de dañinas afirmaciones, incluyendo acusaciones de que espías paquistaníes se reunieron directamente con el grupo Talibán, y que las muertes de civiles inocentes a manos de fuerzas internacionales han sido ocultadas.
Los documentos también incluyen algunos nombres de informantes afganos.
El fundador de Wikileaks, Julian Assange, de 39 años, un ex
hacker australiano y programador de computación, dijo que cree que la publicación
ayudará a enfocar el debate público sobre la invasión a Afganistán y sobre
posibles atrocidades de las fuerzas militares conducidas por EEUU.
(*) Traducido del inglés por Ivana Cardinale