El responsable de la sucursal de
Bancomer, del coloso financiero español BBVA, al sur de la capital,
Víctor Bautista, ni siquiera ordenó el cierre del establecimiento.
Según reportaron algunos portales
mexicanos de noticias, el hombre, identificado como Julián Tives,
comenzó a sentir un dolor agudo en el pecho y se desplomó en el piso, en
medio de algunos espasmos.
Sólo el vigilante de la sucursal se dirigió hacia el hombre pero se limitó a mirarlo y a constatar que había muerto.
Finalmente, una ambulancia de la
oficina de Protección Civil de la delegación (municipalidad) Benito
Juárez, llegó al lugar media hora después, cuando ya había fallecido.
“Julián no recibió la ayuda que en ese momento reclamaba su cuerpo. Su corazón se detuvo. Ahí murió ante la indiferencia de quienes hacían fila para cumplir con su trámite bancario”, escribió la edición digital del diario “El Universal”.