Caracas, 10 Ene. AVN.- "Somos revoluciones gemelas, Irán y Nicaragua, ambas triunfamos en 1979", subrayó este martes el reelecto presidente del país centroamericano, Daniel Ortega, durante el discurso que ofreció en la ceremonia de toma de posesión, luego de lograr 62,46% de los votos el 6 de noviembre de 2011.
Con esas palabras dio la bienvenida a Nicaragua al presidente iraní, Mahmoud Ahmadinejad, quien arribó también para fortalecer relaciones bilaterales.
"Han tratado de darle muchas interpretaciones a la visita del Presidente (Ahmadinejad), que todavía no entienden que es necesario buscar un camino auténtico hacia la paz", dijo el Mandatario nicaragüense, desde la Plaza de la Revolución, situada a las afuera de la Casa de los Pueblos.
El 19 de julio de 1979, los guerrilleros sandinistas ingresaron a la capital del país, Managua, terminando con cuatro décadas de dictadura encabezada por la familia Somoza.
Por su parte, con la revolución iraní de 1979 el pueblo derrocó al último monarca (Sha de Persia) e instauró la República Islámica.
En ese sentido, el jefe de Estado nicaragüense refirió que el Gobierno de Irán no tiene bombas atómicas, al tiempo que hizo un llamado a las naciones que, en efecto, las poseen, como Israel a que se deshagan de éstas.
Rememoró que la justificación de las potencias imperialistas para invadir Irak era que tenían la certeza de que poseían armas de destrucción masiva, tras lo cual iniciaron una invasión que comenzó en 2003, dejando miles de civiles muertos.
"Han tenido que admitir, los que lanzaron esta invasión, que no había tal armamento atómico. Derechos sí tienen los pueblos para desarrollar la energía atómica para fines pacíficos, claro que sí. No se le puede negar ese derecho", expresó Ortega.
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