3 nov. 2013 - El 91 por ciento de franceses exige al presidente François Hollande realizar cambios en la política y en su equipo de gobierno antes de las elecciones municipales de 2014, reveló hoy una encuesta.
La muestra fue realizada por el Instituto Francés de Opinión Pública (Ifop) y señala que apenas nueve de cada 100 personas juzgan conveniente el accionar del ejecutivo.
De acuerdo con el sondeo, 43 por ciento rechazan el rumbo seguido por el gobierno, 30 desean un cambio en el método y otros 18 piden una reorganización del gabinete.
Sin embargo, entre las personalidades sugeridas en la encuesta para incorporarse al equipo de trabajo, como Martine Aubry, Claude Bartolone y Ségolÿne Royal, ninguna rebasa los 37 puntos de aprobación entre los interrogados.
A pesar de las victorias electorales de 2012 en los comicios presidenciales y los legislativos, Hollande ha sufrido un acelerado desgaste ante la opinión pública y ocupa en la actualidad el sitio más bajo de un presidente en los últimos 55 años.
Entre las principales causas de este fenómeno figuran la crisis económica heredada de su predecesor, Nicolás Sarkozy, la continua alza del desempleo, el acatamiento de las políticas de austeridad impuestas por la Unión Europea, el alza del costo de la vida y la aplicación de nuevos impuestos.
Cuando faltan cinco meses para los comicios locales de marzo del año venidero, la aceptación del gobierno sigue en baja, según todas las empresas dedicadas a realizar sondeos.
Los analistas estiman que un resultado negativo en estas elecciones comprometería la reelección de Hollande en 2017, cuando estará de nuevo en juego el Palacio del Elíseo.
Disturbios tras las multitudinarias manifestaciones en Francia contra la 'ecotasa'
Cientos de manifestantes se enfrentaron a la Policía en la ciudad francesa de Quimper el pasado sábado, después de que miles de personas tomaran las calles para exigir el fin del impuesto ecológico del país.
Las fuerzas de seguridad emplearon mangueras de agua y gases lacrimógenos, para dispersar a la multitud, mientras que los manifestantes lanzaron piedras, botellas y pequeños explosivos de fabricación casera.
