28 de Mayo.- "Esta es la primera elección presidencial en que todas las regiones de Ucrania tuvieron el mismo ganador", le dijo el lunes en la noche, Petro Poroshenko a Jackson Diehl, Editor Adjunto del Washington Post, en su primera entrevista desde que ganó las elecciones con una clara mayoría en la primera vuelta. "Se puede considerar un referéndum. Noventa y seis por ciento de los ucranianos votaron a favor de la unidad del país. El ochenta y cinco por ciento apoyó a un candidato para la integración europea. Así que el presidente tiene una oportunidad única para unir al país y tiene un nivel de apoyo que nunca antes tuvo".
El nuevo presidente de Ucrania, Petro Poroshenko, piensa que va a necesitar más ayuda de la que ha estado recibiendo de los Estados Unidos. "Yo no tengo la impresión de que las sanciones sean lo suficientemente fuertes. Creo que es posible que haya más agresión", dice. Y cuando se inicia la agresión, no hay sanciones que ayuden".
Lo que ayudaría, dice Poroshenko, es la ayuda militar directa de EE.UU., y trajo a colación el programa de Préstamo y Arriendo de Franklin D. Roosevelt durante la Segunda Guerra Mundial (la Lend-Lease, de 1941, ley de préstamo por la que se autorizaba la venta de armas a los países aliados), parafraseando el argumento de Roosevelt: "cuando la casa de tu vecino está ardiendo, debes prestarle tu manguera".
"Debemos crear un nuevo tratado de seguridad exactamente como el Lend-Lease", dijo. "Debemos cooperar en la asistencia técnica militar y en el asesoramiento militar. Estamos dispuestos a luchar por la independencia y debemos fortalecer las fuerzas armadas de Ucrania" .
Decenas de combatientes rebeldes han muerto esta semana en la ciudad oriental de Donetsk, y los guardias de fronteras de Ucrania han reportado al menos un tiroteo, diciendo que bloquearon grupos de hombres armados que intentaron cruzar a Ucrania desde Rusia. Ucrania y Occidente han acusado a Moscú de fomentar los disturbios.
No obstante, Poroshenko ha dejado claro que está dispuesto a negociar con Rusia. "Conozco a Putin bastante bien", dijo, y agregó que está dispuesto a transigir en todo, menos en la reclamación de Crimea y en su decisión de continuar la asociación económica con la Unión Europea.
"Pero el punto principal de Putin no es claro. Incluso Stalin tenía un buró político", se quejó en privado el presidente electo, con un asesor. Poroshenko ve al líder ruso como "opaco, improvisador e impredecible".
Poroshenko debe encontrar la manera de gestionar con los infames oligarcas de Ucrania -los billonarios que se alimentan de los contratos estatales y las subvenciones y que fueron el blanco principal de las manifestaciones que llevaron a la caída del gobierno de Yanukovich. Él se ha comprometido a "vender todas sus empresas menos una, una red de televisión".
"¿Cuál es el problema con los oligarcas?", dijo, indicando que él conocía bien a la mayoría de ellos. "El verdadero problema es la corrupción y la monopolización de la economía ucraniana. Si se va a acabar con los monopolios y se va a tener tolerancia cero con la corrupción, ellos solo serán grandes empresarios. Algunos de ellos pueden sobrevivir; estoy contento con eso. En esas condiciones, no veo ningún problema en cooperar con ellos. Si quieren ser alcaldes de una provincia, no hay problema en absoluto".
El último gran desafío de Poroshenko será trabajar con la inestable coalición de gobierno en el parlamento, persuadirlo a implementar dolorosas medidas de austeridad y a una reforma de la Constitución, y disolverse para nuevas elecciones. Sobre este último punto él sonó estridente: "Este Parlamento no representa a nadie. Si los miembros del Parlamento aparecieran en sus distritos electorales, el 100 por ciento de ellos sería derrotado. Eso es en gran parte, nuestro problema en el este. Ellos son las personas más odiadas".
Traducción: Aporrea.org