31-01-17.-El presidente del Consejo, Donald Tusk, envió hoy una carta demoledora, brutal, calificando a Donald Trump y EEUU como una "amenaza para la UE", al nivel de China, Rusia o el islam radical. Llamando "demagogo" al presidente norteamericano y pidiendo a los europeos que se levanten "para defender su dignidad".
El viernes, los líderes de los 28 Estados Miembros se reúnen en Malta para una Cumbre dedicada a la inmigración y, en menor medida, Brexit. Las capitales están haciendo auténticos escorzos para intentar no enfangar sus relaciones con Washington en los primeros días de la nueva Administración, a pesar de los enormes esfuerzos de Trump y su equipo para provocar una pelea. Con ataques a Alemania, vaticinando el final del euro en 18 meses o alegrándose sin disimilo de la ruptura de la Unión y anticipando más salidas próximamente.
Ni la Comisión ni los Gobiernos parecen dispuestos a una escalada, pero el presidente Tusk dio hoy un paso al frente sin precedentes, pidiendo abiertamente que "tengamos el coraje de oponernos a la retórica de los demagogos", en referencia velada al presidente de EEUU, y apelando a los europeos a que se pongan "de pie por nuestra dignidad, por la dignidad de una Europa unida, sin importar si estamos hablando con Rusia, China, Estados Unidos o Turquía".
El envite es tan claro que ha sorprendido a la mayoría en una Bruselas resignada a que fuera el Parlamento el que llevara la voz cantante en las protestas, cambiando incluso la agenda para discutir esta misma semana "acciones frente a las medidas del Gobierno de Trump".
En una carta remitida a los jefes de Gobierno, Tusk asegura que "los desafíos a los que se enfrenta la UE son los más peligrosos desde la firma del Tratado de Roma", cuyo 60º aniversario se celebrará el próximo 25 de marzo. "Hoy lidiamos con tres amenazas. La primera, una externa, está relacionada con la situación geopolítica del mundo. Una China cada vez más, llamémoslo así, firme, especialmente en los mares.
La agresiva política rusa hacia Ucrania y sus vecinos. Guerra, terror y anarquía en Oriente Próximo y África, con el islam radical jugando un papel principal", escribe Tusk. Y aquí, y de forma muy calculada, sube la retórica y añade "las preocupantes declaraciones de la nueva Administración estadounidense". Factores, todos ellos, que hacen "que nuestro futuro sea altamente impredecible".