BAGDAD 19fer. - Dos soldados estadounidenses murieron y 17 resultaron heridos el lunes, cuando insurgentes lanzaron un ataque coordinado contra un puesto en el norte de Bagdad en lo que parece ser uno de los mayores asaltos de ese tipo en meses.
El hecho, en el que un atacante suicida detonó un camión cisterna, según señaló el Ejército, se da mientras decenas de miles de soldados de Estados Unidos e Irak se despliegan en la capital en una nueva medida contra la violencia sectaria que amenaza con una guerra civil.
En otros hechos, más de 40 iraquíes murieron, incluyendo 10 en ataques explosivos en Bagdad.
Cerca de Faluya en el oeste, 13 integrantes de una familia fueron muertos a tiros por supuestos militantes de Al Qaeda.
En tanto, en la cercana Ramadi dos atacantes suicidas provocaron la muerte de 11 personas en un ataque contra el hogar de un líder tribal que se había opuesto a Al Qaeda.
La policía iraquí dijo que un atacante suicida al volante de un camión cisterna hizo detonar el vehículo mientras las fuerzas estadounidenses entraban a una estación de policía iraquí en la ciudad de Tarmiya.
Esa ciudad es usada por las tropas estadounidenses como puesto de control.
El autodenominado Estado Islámico en Irak, un grupo ligado a Al Qaeda, reivindicó la responsabilidad por el ataque a través de una declaración difundida en internet.
La ciudad de Tarmiya es un bastión de insurgencia sunita a 40 kilómetros al norte de Bagdad.
Helicópteros militares estadounidenses volaron sobre el área para transportar a los heridos después de la explosión, la que casi demolió la estación de policía.
Un portavoz del Ejército de Estados Unidos en Bagdad declinó ofrecer detalles específicos sobre el ataque, un raro asalto coordinado contra una base estadounidense.
"No fue sólo un ataque espontáneo. No fue sólo gente disparando contra nosotros," dijo a Reuters el mayor Steven Lamb.
Un comunicado del ejército de Estados Unidos dijo que los soldados aseguraron la zona y evacuaron a los heridos. No se sabía si hubo bajas entre los insurgentes.
Más de 3.100 soldados estadounidenses han muerto en Irak desde la invasión del 2003.
MAS VIOLENCIA
Estos episodios de violencia se registran un día después de que dos bombas dejaron 60 muertos en un mercado chiíta en Bagdad, en el ataque más sangriento desde que comenzaron las medidas el miércoles.
Autoridades militares de Estados Unidos han advertido que los militantes pueden atacar en áreas fuera de Bagdad, mientras las fuerzas estadounidenses e iraquíes concentran sus esfuerzos dentro de la capital.
Los atentados explosivos que causaron la muerte a diez personas en Bagdad subrayan el desafío de estabilizar a la ciudad que es el centro de la violencia en Irak.
La violencia se desató el lunes en zonas del oeste y norte de la capital, dejando mas de 20 personas muertas, incluyendo 13 miembros de una familia que cayó víctima de una emboscada cerca de Faluya cuando regresaban de un funeral.
En ese ataque, presuntos militantes de Al Qaeda hicieron bajar a la familia de un minibús a plena luz del día y los mataron a tiros, incluso a dos niños, tras descubrir que eran de una tribu sunita que se opone al grupo, dijo la policía.
La ciudad occidental de Faluya está en la provincia de Anbar, bastión de la insurgencia árabe sunita.
En el centro de Bagdad, cuatro personas murieron cuando una bomba destrozó un minibús en el distrito de Karrada, un área mayoritariamente chiíta en la que también viven cristianos.
Un fotógrafo de Reuters vio cuatro cuerpos carbonizados tendidos en la calle luego de que la explosión voló la parte superior del bus.