Sucre, Bolivia, 18 Ago. ABN.- La Asamblea Constituyente de Bolivia cerró esta semana con importantes acuerdos sobre la redacción de la futura carta magna, pese a medidas de protesta de la oposición que hoy todavía intentan obstaculizar sus sesiones.
Sin embargo, la más reciente decisión de descartar el análisis en plenaria del tema de la capital del país y remitirlo a una comisión especial mantiene detenido al foro y enfrentados a delegados, algunos de ellos partidarios de llevar la sede a una región más segura, como Cochabamba, reseñó Prensa Latina.
De acuerdo con autoridades gubernamentales, las nuevas maniobras de grupos adversos al ejecutivo tiene la finalidad de boicotear la Asamblea, cuya vigencia ha sido ampliada hasta el 14 de diciembre próximo.
El vocero presidencial, Alex Contreras, señaló que se pudo comprobar la entrega de beneficios a quienes optaron por asistir a una movilización en una céntrica plaza de Sucre, la capital histórica de la nación andina.
La situación en las provincias del central departamento de Chuquisaca es de normalidad, precisó el portavoz.
Asimismo señaló que algunas organizaciones sociales, como la Federación Sindical Única de Trabajadores Campesinos dio un plazo hasta el lunes próximo para que cesen las medidas hostiles que sólo atentan contra las deliberaciones de los asambleístas.
También el ministro de Gobierno, Alfredo Rada, denunció que miembros de la Unión Juvenil Cruceñista, de carácter extremista en el oriental departamento de Santa Cruz, estaban estimulando la violencia en esos mitines.
Por su parte, el vicepresidente de la República, Alvaro García, instó a las autoridades del central departamento de Chuquisaca a presentar propuestas que ayuden el proceso de cambio y abandonar posturas inflexibles, como el reclamo de concentrar poderes.
