Honor a quien honor merece
De extraordinario califico el trabajo que hace el periodista Hernán Canoréa, en el madrugador programa Cantar de Gallos, que trasmite de lunes a viernes el canal de todos los venezolanos Venezolana de Televisión. Es una defensa a capa y espada del proceso revolucionario. Aprecio mucho la labor que hace con los titulares de prensa, nacionales y regionales; desmonta a la vista del televidente la manipulación mediática de periódicos como El Nacional y El Universal entre otros, quienes normalmente obvian o manipulan la noticia importante que emana de la acción gubernamental y resaltan todo lo que tiene que ver con la oposición.
Defiende el camarada Canoréa, como deberíamos hacerlo todos, con vehemencia, pasión y entrega, al proceso revolucionario. Es una clase repetitiva, machacona si se quiere, de lo que deben ser nuestros valores. Reitera sin cansarse nunca, una frase que a mi juicio resume su trabajo ideológico-docente: "Chavista no es corrupto, revolucionario no es corrupto" porque es incongruente, contradictorio; "o se es chavista y revolucionario, o se es corrupto" enfatiza.
Concluyo diciendo a lo criollo: No me lo pelo ni con ceniza e invito a todos y todas a verlo y escucharlo con atención, en la seguridad que a la par de mantenernos informados e informadas, fortaleceremos nuestra formación ideológica tan necesaria en los tiempos que transcurren de guerra de todos los matices posibles contra nuestra revolución. A mis casi 70 años y con cierta trayectoria de lucha, me actualiza a diario.
Cantar de Gallos es una excelente trinchera de lucha, de enseñanza, como lo son tantas que a lo largo del día trasmite VTV. Felicitaciones Hernán. Así se hace. Chávez Vive. Hernán es Chávez.
