Caracas 4 agosto 2007.- Una "modesta" manifestación de opositores, según la calificaron sus organizadores, recorrió hoy un sector del este de Caracas para entregar un documento a favor del canal RCTV Internacional en la Comisión Nacional de Comunicaciones (Conatel).
La marcha fue convocada por el Comando Nacional de la Resistencia (CNR), grupúsculo radicalizado de la oposición de la extrema derecha.
"Vamos a seguir en las calles, no importa cuántos seamos, no importa cuántos se hayan ido a la playa, aquí estamos nosotros para alzar nuestra voz en contra del (presidente Hugo) Chávez", dijo Oscar Pérez, alias cabeza de motor , dirigente de CNR.
El grupito que realizó la protesta, en el que no había ningún dirigente opositor al margen de Pérez, coloreó su acción con caras y manos pintadas, cadenas y pancartas alusivas a Radio Caracas Televisión (RVTV) Internacional.
Pérez podría ser citado en los próximos días por la Fiscalía, para verificar por unas declaraciones suyas publicadas por el diario un diario regional el pasado 2 de agosto en favor de un nuevo golpe de Estado.
Pérez habría dicho, según publicó ese diario, que no tenía "empacho" en decir que estaba "buscando un nuevo 11 de abril, porque lo que ocurrió ese día fue una rebelión popular; pueblo en la calle con la Constitución en la mano, exigiendo respeto para sus derechos ciudadanos y civiles".
El 11 de abril de 2002 se inició el golpe de Estado contra Chávez que encabezó el empresario Pedro Carmona, refugiado en Colombia, y que culminó 47 horas después cuando sectores populares y fuerzas leales forzaron el retorno del presidente constitucional.
La marchita de hoy fue convocada a pesar de que el Tribunal Supremo aceptó el pasado miércoles un amparo de la Cámara Venezolana de Televisión por Suscripción (Cavetesu) que permitió a RCTV Internacional mantener su señal para los suscriptores por cable.
La decisión del Supremo, que fue celebrada por los trabajadores de RCTV, según imágenes transmitidas por ese canal, disgustó a sus directivos que la calificaron de "un nuevo atropello".
A falta de otras explicaciones para esta aparente contradicción, analistas políticos señalaron que la directiva del canal esperaba del Tribunal Supremo una decisión adversa para que RCTV Internacional tuviese que salir del aire y así hacerse víctimas nuevamente de una supuesta falta de libertad de expresión en Venezuela.