A propósito del "Golpe de Timón"

Parecía que después de las elecciones presidenciales del 07 de Octubre de 2012, el país navegaría por un rumbo distinto, donde lo que le tocaba a cada venezolano era trabajar por un país mejor, por un Proyecto de País a favor de todos; pero que beneficiara principalmente al venezolano de a pie. Sin embargo; desde entonces y con mayor velocidad luego de la muerte del Presidente Chávez en marzo de 2013, el timón ha virado en dirección opuesta a lo que él mismo planteó en el “I Consejo de Ministros del nuevo ciclo de la Revolución Bolivariana”.

¿Qué está pasando en Venezuela? Nos encontramos cada día hablando de Socialismo, pero con una velocidad incalculable nos estamos hundiendo en el capitalismo que tanto se critica. La sociedad venezolana se ha organizado en Consejos Comunales y se está organizando en Comunas adquiriendo gran protagonismo en el país, pero lo importante es que a través de estas figuras legalmente establecidas, con una arquitectura legal que los ampara, protege y les da potestades, son capaces de ejecutar proyectos planteados por ellos mismos. Entonces, me pregunto: ¿Por qué las Empresas de Producción Social establecidas en el país no han logrado dinamizar el aparato productivo del país, al punto de poder minimizar las importaciones y autoabastecernos, al menos en lo que alimentación concierne? Se están construyendo viviendas y más viviendas a lo largo y ancho de todo el territorio nacional, eso no está para nada mal, es algo que debemos celebrar con especial alegría; sin embargo, la crítica va en la misma dirección que cuando Chávez hacía mención a Ciudad Caribia: ¿Dónde están las zonas productivas de Ciudad Caribia? Ya hemos entregado bastantes viviendas ahí, pero la zona industrial no la veo… Terminamos la carretera y no hay una sola unidad productiva que hayamos creado nosotros.

Así que, mi intención es recordar algunas de las palabras del Presidente Chávez, en este I Consejo de Ministros del 20 de octubre de 2012, cuando hacía referencia a varias cuestiones interesantes y que resaltaré con la “ilusión” de que nuestros Ministros (los que estuvieron ese día presente y los que no, se tomen un ratico de sus tiempos para buscar este encuentro y reflexionar un poco), así como todos los que ocupamos un cargo en las instituciones del Estado (independientemente de la jerarquía), incluso usted Sr. Presidente Nicolás Maduro, quien para ese entonces recién era nombrado Vicepresidente de la República: el Presidente Chávez hablaba del Nuevo Ciclo de la Transición; pues bien, es fundamental que, en la Venezuela actual, se evalúe -como dice Mészáros[1]- “hasta qué grado las medidas y políticas adoptadas contribuyen activamente a la constitución y consolidación bien arraigada de un modo sustancialmente democrático, de control social y autogestión general”. Es urgente la transformación de la base económica del país, que cada vez se arraiga más en el capitalismo.

Así mismo, el Presidente Chávez decía: “Revolución Política es previa a la económica. Siempre tiene que ser así: primero revolución política, liberación política y luego viene la revolución económica”. Pero, ¿qué hace falta para una real revolución política? Siendo atrevida y opinando en este campo, a nosotros en Venezuela nos falta Planificar las acciones que queremos emprender, mirar un poco al futuro para evaluar si las medidas que se pretenden tomar afectarán positiva o negativamente en lo social, político o económico. No pueden aplicarse medidas desesperadas, pero sobretodo basadas en la improvisación; por lo aquí me remito a las palabras de Carlos Matus[2], cuando decía que la planificación “es una herramienta de gobierno valiosa para el político inteligente… La política es noble y compleja… Rechaza por igual la política tradicional y el tecnocratismo. La planificación moderna, es o debiera ser la principal herramienta de trabajo del político. Pero, éste no sabe que no sabe. Por tanto, no puede aprender… La salida es obvia: cambiar el estilo de hacer política, cambiar nuestros sistemas de alta dirección y reformar radicalmente nuestros sistemas de planificación.

Así que volviendo a las palabras del mismo Chávez dirigiéndose a los Ministros, decía: no debemos seguir inaugurando fábricas que sean como una isla, rodeadas del mar del capitalismo, porque se lo traga el mar… Cuidado; si no nos damos cuenta de esto, estamos liquidados y no solo estamos liquidados, seríamos nosotros los liquidadores de este proyecto”.

ghabriella.yrp@gmail.com

@ghabo_08


[1] István Mészáros. Más allá del Capital. Caracas, Hermanos Vadell, 2001.

[2] Franco Huertas. El Método PES. Planificación Estratégica Situacional. Entrevista a Carlos Matus, 1993.


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