La seguridad social tiene que ver fundamentalmente con la satisfacción de necesidades básicas de la población en general, es decir: con la garantía que puedan tener los ciudadanos en cuanto al derecho al acceso a la salud en caso de enfermedad, en caso de invalidez total o parcial, en los casos de viudez, de ancianidad y disminución de la capacidad de trabajar, en caso de desempleo. En general se trata de lo que tiene que ver con las situaciones que puedan atender a las personas en caso de mayor miseria ante las situaciones más penosas y los riesgos que generalmente sufren los trabajadores, pero también, debería tener que ver con la garantía del acceso a la vivienda, a la educación y a la alimentación, ya que esas también son necesidades básicas de las poblaciones de los países del mundo entero.
Ante estas realidades y dado el hecho que el trabajo (de los más desfavorecidos) es el productor de la riqueza social, la sociedad y los gobiernos deberían garantizar la satisfacción de esas necesidades como parte de la seguridad social que requieren los seres humanos para ser más útiles a la sociedad y poder aportar lo mejor de sí mismos al desarrollo de ella y a la satisfacción de las necesidades colectivas.
Para que esto sea posible es imperante que existan unas nuevas relaciones sociales, ya que las que hasta el momento han existido no han garantizado “voluntariamente “la satisfacción de esas necesidades colectivas de los pueblos del mundo, salvo contadas excepciones.
En algunos pequeños gremios se ha intentado en colectivo desarrollar un sistema para resolver el problema (artesanos,) que han creado pequeñas cajas de ahorro, pero que a la larga por su poca capacidad económica no han resuelto el problema.
Las conquistas en este sentido de la seguridad social son el resultado de una lucha de clases, porque la naturaleza del sistema y del modo de producción que ha imperado en el mundo no ha permitido garantizar la seguridad social de los trabajadores y menos de sus grupos familiares.
De esa lucha y de las conquistas logradas muchas veces incluso a costa de la sangre de muchos, se origina el gran negocio de la seguridad social desde las compañías aseguradoras, cuyo único fin no es precisamente garantizar la satisfacción de las necesidades de seguridad social y con la excusa de reducir la incertidumbre de las y los trabajadores hacen de este problema el gran negocio captando los aportes de miles de trabajadores y los aportes que tampoco por buena voluntad tienen que hacer los empleadores incluyendo al estado. y los trabajadores alentados por las duras condiciones en que Vivian, se ven obligados a aceptar gustosamente la oferta de las empresas de seguros ,que muchas veces negociaron con los gobiernos la privatización del sistema se seguridad social de millones de seres humanos convirtiendo este derecho conquistado el la gran mercancía que ha desarrollado inmensos monopolios de salud y seguridad social.
En esta relación que existe :trabajadores ,estado y seguridad social casi siempre es el trabajador quien lleva la peor parte ,primero porque es Él quien realiza los primeros aportes de su salario, segundo: porque la parte que supuestamente colocan los empleadores también sale del valor de su trabajo desde lo que les ha sido expropiado con la plusvalía, como si fuera poco ante las incipientes coberturas de los seguros, estos se ven obligados a ser víctimas de una segunda expropiación del salario a través del mercado especulativo de la salud y la medicina.
Entonces valdría la pena preguntarnos como trabajadores o como productores de la riqueza social ¿es o ha sido la seguridad social un derecho como aparentan hacernos creer ,o es el gran negocio de los mercaderes de la vida y la salud?
A quienes ha beneficiado el hecho de crear los fondos globales de seguro social?, realmente aportan los empleadores de sus ganancias lo que les corresponde ¿han diseñado convenientemente (para quién?) diferentes formas de financiamiento, de operación y funcionamiento de tales sistemas.se producen entonces y se plantean amenazas para la seguridad social como la privatización , la tercerización y múltiples formas de evasión de las obligaciones con los trabajadores .
No existe en la mayoría de los casos libertad para la escogencia de los prestadores de servicios de seguridad social, ya que estos son asignados “al mejor postor “.(por no decir a quien de la mejor comisión).y de esta manera nuevamente es el trabajador quien asume todos los riesgos.
El sistema y su clase dominante siempre ha buscado catalogar la seguridad social como un gasto, no como la inversión necesaria para la felicidad y tranquilidad de los trabajadores que llenan sus bolsillos.
En Venezuela es solo a partir del momento en que inicia la revolución bolivariana, que en su carácter humanista, se empieza realmente a pensar en la verdadera seguridad social y no solo de los explotados directamente por los empleadores sino también de todos los seres humanos que de alguna manera hayan realizado algún tipo de trabajo para la sociedad.
el sistema de reparto que se origina a partir de la experiencia alemana en 1883 hacÍa que los trabajadores tuviesen que esperar demasiado tiempo para tener una edad que les permitiese tener acceso a una pensión ,que ni siquiera era el salario completo del trabajador, y que era absorbida por la inflación, y cuando el trabajador no lograba sobrevivir los años exigidos entonces la familia del mismo tenía que realizar engorrosos trámites para poder acceder a el porcentaje de salario que correspondía a su familiar , sin que ese porcentaje se actualizara , sino que siempre era en base al salario nominal que el trabajador devengo hasta el momento de su deceso o hasta cumplir la edad correspondiente , mientras que las aseguradoras si trabajaban el dinero de las cotizaciones produciendo grandes ganancias que hacían que sus capitales cada día fuesen mayores. Todo esto significaba una disminución paulatina de los beneficios conquistados por los trabajadores.
Por estas razones nuevamente es admirable destacar el papel que ha jugado la revolución bolivariana como referente de las luchas populares no solo de Venezuela sino también de los pueblos del mundo entero que ven en el ejemplo venezolano la salud y la seguridad social como derechos humanos garantizados por la revolución con el fin de alcanzar el principio bolivariano de dar a su pueblo la mayor suma de seguridad social y la mayor suma de felicidad posible.
Garantizando incluso el seguro de desempleo, la cobertura a las familias a través de un sistema y un subsistema de salud y seguridad social los derechos de los más desfavorecidos, redistribuyendo la riqueza socialmente producida y la que generan los ingresos fiscales y petroleros y haciendo una inversión social cada día mayor para disminuir así los niveles de pobreza que como herencia histórica dejaron los gobiernos que le antecedieron se ha venido generando toda una política de inversión social con el fin de afrontar los grandes retos que representa para una nación garantizar esa seguridad social, que con la intención de nuestros gobernantes, la buena administración de los recursos , la disminución de los altos niveles especulativos (con un sistema de leyes que regulan las ganancias y el ejercicio de las actividades económicas ),con políticas educativas inclusivas, con políticas de vivienda amplias y populares, con la ampliación de la expansión cultural y el acceso a la recreación para el vivir bien , con la creación de procesos de dirección colectiva del gobierno donde los trabajadores , campesinos , artesanos , pescadores y todos los sectores de la población participan protagónicamente de la creación , aplicación y ejecución de las políticas publicas por estas razones es que debe ser y es motivo de análisis para los pueblos del mundo y para los gobiernos progresistas la experiencia venezolana que contradiciendo las politicas planteadas por el neoliberalismo siempre decían que era una necesidad la reducción del llamado gasto social, mientras que en Venezuela cada día el gobierno revolucionario a demostrado que mientras esos países incrementan cada día mas la pobreza y la pobreza extrema aquí en Venezuela somos reconocidos por la mayoría de los países del mundo como el país donde más avanzamos en la disminución de la pobreza , en la educación para el pueblo y en la seguridad social en generalpor supuesto los desafíos de la práctica permiten que seamos susceptibles de error, pero también perfectibles en la medida que la revisión permanente de nuestra practica nos permita reconocer las debilidades que existen y reorientar el rumbo para hacer cada día mas accesible la seguridad para las grandes mayorías .