Luego de una gran asamblea realizada día de ayer 15/03, en la sede del Sindicato de SUTISS, ubicado en Manoa, San Felix, donde asistió un gran multitud entre trabajadores sidoristas, concejos comunales, sindicatos y familiares de los trabajadores detenidos, los trabajadores decidieron ir hasta la Comandancia policial, donde estaban los detenidos y luego nos trasladamos hasta el Palacio de Justicia en donde con pancartas y consignas exigimos la liberación de los compañeros detenidos.
Estando en la entrada del Palacio de “Justicia”, pudimos mirar con rabia e impotencia como los trabajadores detenidos fueron trasladados esposados, tratados como si fueran sujetos de antisociales de alta peligrosidad. Mientras los detenidos hacían sus declaraciones en los tribunales para ser procesados, los trabajadores comenzaron a convocar a vecinos y sindicatos para que se concentrasen y exigiéramos la liberación de los detenidos. Es necesario informar que junto a sidoristas detenidos, había también ciudadanos que nada tenían que ver con la protesta, que fueron sacados de sus automóviles a la fuerza a pesar de que andaba con su familia.
A eso de las 11 de la noche saldrían los detenidos acompañados los abogados defensores quienes nos informaron que el Juez ordenó LIBERTAD PLENA PARA TODOS LOS TRABAJADORES SIDORISTAS. Las declaraciones de los compañeros detenidos no fueron contradictorias y narraron exactamente, la manera de como fueron brutalmente agredidos por la GN y los policías. El Tribunal ordenó remitir todas las actuaciones al Fiscal de Derechos Fundamentales del Estado Bolívar, a los fines que se inicie una investigación en contra de los funcionarios involucrados en los hechos. La metida de pata por parte del gobierno, con la criminal represión que desarrolló la GN y policía estadal, tenía que ser subsanada de alguna manera, de allí los resultados de la decisión del Juez. Solo el pueblo salva al pueblo. Ahora, tendría que el gobierno ponerse del lado de los trabajadores en la discusión de la convención Colectiva y no seguir, como hasta ahora está, del lado de la transnacional Ternium Sidor