Proyectar fantasías, frustración, desasosiego, tensión, inseguridad, incertidumbre, miedo, pánico no es mi fuerte; mi autoestima lo impide. No soy erotomaníaco, para pensar o inferir que estén enamorado/as, de mí, los hampones hombres y mujeres - éstas con moderna práctica en Venezuela – dadas las situaciones que he padecido y no he “enfrentado”, salvo sumisión pasiva; ante las demandas de los susodicho/as hampones y hamponas que me la tienen velada- tanto, que un paseo diario que efectuaba por el bello paraje del paso de Cruz Verde al casco central de la ciudad de Mérida - antes de Los Caballeros ; he tenido que eliminar de mis correrías , dado que por allí he sido presa fácil de, las , los delincuentes que se refugian en las riberas del río Albarregas y cometen por los alrededores tropelías a sus anchas sin que autoridad alguna: Alcalde, Gobernador, Concejales, Diputados, Prefectos …, tomen cartas en el fenómeno. La autoridad con uniforme o sin uniforme no se ve, no se hace sentir, por Mérida hace muchas lunas, desde las guarimbas!!
Así las cosas, entonces, no es un impulso mi sensación de perseguido por “todos” en esta otrora apacible y bucólica ciudad, no!- cuando camino o ruedo en mi vehículo estoy viendo delincuentes por doquier- a pie , en moto, en las busetas- Mérida se convirtió en un santuario para los hampones paramilitares desplazados por los organismos u la Organización para la Liberación del Pueblo?? ¡¡ OLP ¡!, desde Táchira- especialmente desde San Cristóbal, Ureña, Aguas Calientes , La Invasión, Guasdualito y zonas aledañas, así como desde La Fría o El Vigía, el Zulia.
Con la invasión a nuestra otrora paradisíaca Mérida descubro que cogieron “enchinchorrao” al gobernador - aunque en el fondo pienso que Alexis Ramírez no es de enchinchorrarse- , pero, podría, dada la proximidad de las elecciones, estar lelo. ¡¿ mirándose el ombligo!?
Segundo capítulo de la obra. Escenario: buseta en cualquier ruta de la otrora bucólica ciudad. Actores: 30 pasajeros niños, niñas, jóvenes, adultos mayores y menores, tres delincuentes impunes y plácidos en sus asientos, el chofer y el ayudante. Hora doce meridiem, el sol en su esplendidez y el ballenato full chola! “Esto es un atraco” gritó el del fondo del bus; cuchillo de carnicero 12 pulgadas en el cuello del conductor acciona el segundo hombre - 23 años - ; navaja por el tercero al colector y otro cuchillo acerado doce centímetros en contra de los pasajeros. Organización militar y perfecta sobre todo a personas, indefensas éstas, ya preocupados desde que abordan el colectivo- saben de la práctica consuetudinaria de los oficiantes criminales- y Alexis, el gobernador, y el dire policial, y los estrategas, y los teóricos, y los románticos, y los revolucionarios, y los alcaldes, y los prefectos, y la policía, y la guardia nacional, y la guardia del pueblo y las OLP, y, ..? Solos andamos en las manos tenebrosas, del crimen organizado, y otras veces improvisado, gracias a la impunidad. Los indefensos pasajeros fueron despojados de sus pertenencias- arrastraron cerca de 13 celulares y una tabla- regalo recién comprado por la abuela a su nieto; la pobre cuando despertó de la pesadilla lloró, además de todo lo supuesto valioso : bolsos, carteras, comestible, compras varias, lentes- se cotizan las monturas; es parte de la aplicación del terror a la población indefensa… y las autoridades? Y la ley; y el ministerio público?!Oh my god¡, mi dios. Así no hay ninguna posibilidad de organismos por la paz, la única vía para la paz es prepararse para la guerra y ganarla, lo demás son complicidades manifiestas o encubiertas, o participar en la escrutaciòn de ombligos
Tercer capítulo. Las mujeres delincuentes, criminales están operando impunemente en Mérida- al menos. Secuestran taxistas, acompañan a los criminales hombres en sus fechorías y ejecutan a sangre fría! Atracan a la luz del día … y las autoridades ?.
Cuarto capítulo: El sol nace para todos. Se despliega operativo OLP, patria o muerte, contra la delincuencia en Mérida, lo comanda el gobernador Alexis Ramírez, me recuerdo de las películas de vaqueros – allí vienen n los azueles, los delincuentes se enconchan, se mimetizan , el brazo esperanza de la ley los busca, están en posadas, han alquilado recientemente, son extraños, es fácil conseguirlos, allí están a la vista de todos- incluso de la mía- tocan tu puerta, se introducen, te maniatan, te vilipendian, te perdonan- por ahora- la vida,: buscan valores, joyas, eléctricos, dólares- se aceptan euros , cargan tu propio vehículo y se esfuman! No hay control, no hay alcabalas, algún funcionario se involucra.
Como plaga desatada y organizada atacan hospitales, comercios, habitaciones, fincas… y la autoridad ¿Se mira el ombligo y promete?. El gobernador de Mérida- la máxima autoridad- produce paranoia con su ausencia. “Desvelado tu ausencia me tiene” como canta el tango, “persiguiendo tu acción sin cesar”. No queda otra que hacer y a la muerte por la guerra atroz enfrentarla con la vida… pero enfrentarla. Basta de escurrir el bulto.
La revolución se salva con accionar efectivo! No más contemplaciones y vacilaciones, el enemigo no tiene escrúpulos, los escrúpulos en guerra, contra el enemigo, son contra revolución y reaccionarios; además de ingenuos! Una ley habilitante contra todas las modalidades delincuenciales criminales contrarrevolución y contra la vida y la paz, activas y por activar, de la contra organizada! Y que hemos de manera cómplice ayudado a incubar con puro amor!
Se cansa uno!, parafraseando a un ocurrente y admirado escribidor, de Aporrea, huésped de la Isla del Burro! Honor al camarada Teófilo Santaella.
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