29 de Abril.- Nebulización de agua desde los edificios, en las principales avenidas y en el centro de la ciudad, donde circula gran cantidad de gente, propone el presidente Amigos del Bosque de Zulia y miembro de naturazul, Elio Ríos, para aplacar la ola de calor que se experimenta en el país y que en la capital zuliana llegó este miércoles a los 51 grados centígrados de sensación térmica.
Explicó el ambientalista que la técnica consiste en instalar boquillas difusoras de agua, de tal manera que cada fotón de energía solar al tocar cada gota, la evapora y esa energía no llegue abajo.
Esta práctica ha sido experimentada en otros países, inclusive en las ferias del verano realizadas en Europa donde se logra una disminución considerable de la temperatura, destacó Ríos.
Refirió que "estamos ante el fenómeno conocido como inversión térmica, que se refiere al calentamiento de la atmósfera alta y cuando eso sucede se ve una neblina en la ciudad, que unido a la humedad la convierte en smog", explicó.
"Tenemos una ola de calor por el impacto de los rayos solares perpendiculares a Venezuela, además los vientos alisios traen mucha humedad desde el océano Atlántico y el mar Caribe", refirió el ambientalista, quien resaltó que en el caso de Maracaibo, el aire está más caliente hacia la parte de arriba, "eso es a lo que llamamos inversión térmica".
Propone también activar las fuentes que existen en la ciudad, entre ellas la ubicada en el Parque Rafael Urdaneta en la avenida Padilla de Maracaibo, que ayudaría a refrescar el centro de la ciudad. "Sólo le tocaría al Gobierno regional abatizar esas fuentes para que no se conviertan en criaderos de zancudos y mosquitos".
Sembrar
Ríos destaca que la gran solución para el implacable calor que afecta la vida de los zulianos, es la siembra de árboles.
Maracaibo ha sido desforestada, tanto por grupos violentos que derrumbaron más de 700 árboles para cerrar calles en las guarimbas, escenificadas en la ciudad hace un año, y también por la cultura constructora que hace aceras en calles y avenidas sin dejar espacio para la siembra de plantas, expuso.
Por ello propone se reglamente que todo comercio, urbanización, edificios, tengan aceras donde se pueda caminar, pero espacio para la plantación de árboles.
"Los ambientalistas proponemos hacer arcos o túneles vegetales en las carreteras y en las aceras un techo vegetal que alivien el clima y no fuente de calor en la noche", detalló al exponer que la Gran Misión Vivienda Venezuela debe incluir bosques comunitarios en cada urbanismo que levante, de manera éste sea el "aire acondicionado" de la comunidad.
"La solución es ser ambientalistas. La sociedad no puede estar separada del ambiente. Así como sabemos que nuestro país es petrolero y que tenemos que cuidar la industria, así tenemos que reconocer que somos un país tropical, en el que debemos tener una arboleda como parte de nuestra comunidad, de nuestra familia, de nuestro país", puntualizó.
