Maracaibo, abril 9 - Casi en su totalidad ha sido desalojado el Centro de Arrestos y Detenciones Preventivas de El Marite, en el oeste de Maracaibo, luego de que el recinto pasara a manos administrativas del Ministerio de Servicio Penitenciario (MSP).
La propia Iris Varela recorrió la noche de este viernes varias de las áreas desocupadas del retén marabino, en compañía del gobernador Francisco Arias Cárdenas, quien cedió en comodato el recinto al MSP.
“Mañana (sábado) serán evacuados los últimos 127 internos, entre ellos 99 exfuncionarios policiales y 28 enfermos, así daremos por concluida la fase de desalojo e iniciaremos inmediatamente la fase de requisa”, precisó.
Los primeros serán transferidos a la Penitenciaría 26 de Julio, en Guárico; mientras que los otros, quienes padecen enfermedades como VIH, hepatitis y tuberculosis serán recluidos en el centro penitenciario David Viloria, en Lara.
En definitiva 2.071 reclusos, de los 2.198 contabilizados dentro de “El Marite”, fueron trasladados a diferentes centros penitenciarios del occidente, centro y región andina del país.
Durante el recorrido, cuatro vehículos que eran “enfriados” dentro del retén fueron recuperados por las autoridades. Se tratan de tres Toyotas: dos Corollas y una camioneta Fourtune, así como un Chery Arauca.
La fase de requisa estará a cargo del Grupo de Respuesta Inmediata de Seguridad y Custodia (Gric), adscrito al Ministerio de Servicio Penitenciario; mientras que por disposición del jefe del Comando de Zona 11 en Zulia, general de brigada Alejandro Pérez Gámez, 1.200 efectivos de la GNB resguardarán el área externa del recinto.
La intervención del Centro de Arrestos y Detenciones Preventivas de El Marite se inició el pasado miércoles, luego de la solicitud hecha por el gobernador Francisco Arias Cárdenas a la ministra Varela, puesto que el retén se había convertido en un lugar protegido para la extorsión, amenaza y orientación de bandas delictivas.
El retén marabino, posteriormente de la requisa, será rehabilitado en un lapso entre uno y dos meses para albergar nuevamente a quienes se transfirieron a otros centros nacionales.
