Los trabajadores agrupados en la Corriente de Trabajadores de Marcas y Patentes Industriales (COT- MP) denunciaron por medio un comunicado de prensa la existencia de mafias corporativas que controlan el Instituto Nacional de la Propiedad Intelectual (INPI).
“Las corporaciones de abogados agrupados en bufetes, y el sindicato derechista de UPCN controlan el funcionamiento de sectores claves de la oficina” según lo explicado por los voceros de la agrupación.
Sectores completos son manejados por los denominados “agentes de propiedad industrial” que bajo esta denominación albergan a los representantes legales de las grandes corporaciones transnacionales que en connivencia con el sindicato manejan los movimientos de expedientes, la concesión o denegación de títulos de marcas y patentes, el departamento de personal, ingreso de trabajadores, ascensos y cursos de capacitación, como así también la oficina de compras.
“Para mantener este accionar se estableció una verdadera zona liberada dentro del Estado con grupos de vigilancia y hostigamiento hacia los trabajadores en complicidad con las autoridades”, mencionaron. La Oficina Argentina es famosa en la región por tener el record de organización de eventos y concursos auspiciados por empresas y gobiernos de los EE. UU y la Unión Europea.
“Hay una sutil relación entre esta alineación con políticas de las transnacionales y la persecución de trabajadores” afirma el comunicado. Los voceros denunciaron también la “violación de facto” de la ley de patentes dado que no se cumplen los tiempos procesales por una llamativa ‘aceleración de trámites´ de empresas farmacéuticas, biotecnológicas y alimenticias extranjeras”.
La COT-MP afirmó que el presidente del organismo habría realizado un “pacto de gobernabilidad” para dedicarse a gestiones internacionales personales, dejando en manos del mencionado sindicato fascista el control de la Oficina de Propiedad Industrial.