Un documento del gobierno británico, conocido durante las pasadas vacaciones de Pascua, ha permitido saber que el ejecutivo de Londres acepta en privado lo que se niega a reconocer en público: que considera inevitable una gran revuelta popular contra sus planes de obligar a los británicos a disponer de un carné de identidad para el año 2014.
El documento recién publicado estima en unos 15 millones los ciudadanos británicos que se negarán a proporcionar sus datos y a hacer uso del nuevo documento identificativo impulsado por el gobierno laborista de Tony Blair, cuyo partido se ha comprometido a llevar ese plan adelante si vence en las próximas elecciones...
Fuente: ‘Millions to rebel’ over ID cards [The Sunday Times].