Un poco tarde, pero al final la cruda realidad nos demostró a quienes insurgimos en armas contra los gobiernos que tomaron el poder en Venezuela luego de la caída del general Marcos Pérez Jiménez, que sin la participación de las Fuerzas Armadas, como se llamaban entonces, no era posible hacer una revolución en nuestro país, por muy moderada que fuese.
Había que escuchar las historias narradas por los combatientes que lucharon en los diferentes frentes, sobre los actos de valor en ambos bandos a la hora de un enfrentamiento. Las barbaridades, asesinatos, torturas, fueron cometidos y ordenados por una elite que seguía al pie de la letra las instrucciones del grupo0 gobernante. Muy parecido a lo que ocurre con las cúpulas religiosas que al llegar a arriba tienen intereses que coinciden con los de los gobernantes, que su vez pertenecen a grupos de traidores a sus pueblos y naciones para favorecer el robo y saqueo de los bienes y riquezas que son de toda una sociedad, de todo un pueblo.
Hoy se trata de la minúscula elite que gobierna al mundo a través de las corporaciones convertidas en un monstruoso imperio que lo controla todo y que ya no tiene ni el menor asomo de pudor, de misericordia, de piedad, para hacer los más horrendos crímenes en masa y transmitirlos en vivo por su avasallante red de medios y cambiarles el sentido. Las victimas somos victimarios y ellos están realizando masacres y genocidios para llevar democracia, paz y libertad.
El pueblo de los Estados Unidos vive en una vorágine de drogadicción, distracción, entretenimiento y manipulación, que los hace mantener ese “stablishment”, no obstante tener 50 millones de gente en el limbo económico, una pobreza creciente, una discriminación vulgar, que desdice mucho de formación y humanidad que venden sus medios de propaganda.
Parece imposible, como los han sido todas las grandes y nobles causas, pero el resto de la humanidad, sobre todo los que estamos en los planes del “Complejo industrial-militar”, para ser “democratizados y liberados” planificar con losa millones de aliados que tenemos en el mundo una contraofensiva a fondo para abrirle los ojos a ese pueblo y convencerlo de realizar allá una Asamblea Nacional Constituyente.
De verdad se ve muy difícil, pero no es imposible. Más difícil pareció cuando Hugo Chávez dijo que el ALCA no se implementaría en sur América y que no arrancaría, como ocurrió, el primero de enero de 2005, como aseguró George W. Bush, en la Cumbre de Las Américas, en Quebec, Canadá, aquel abril de 2oo1.
Los mismos medios con que han enloquecido a mucha gente que vota por personajes como Macri en Argentina, para que los hundas en la pobreza y vendas los activos de las Nación, nos tienen que servir, para inundar con verdades palpables, demostrables como tenemos por millones, con sus maldades, sus crueldades, sus inmoralidades ocultadas con una patatería que solo existe en sus medios de propaganda.
Hagámoslo ahora o no tendremos oportunidad para arrepentiremos. Todos los pasos que están dando a nivel geopolítico en el mundo y en el terreno táctico, que representa para ellos nuestra América, empezando por la República Bolivariana de Venezuela, señalan que estiman que se conforman con que unas cientos de miles de familias adineradas sobrevivan a un holocausto nuclear.
Así como parece imposible una Asamblea Nacional Constituyente en Estados Unidos, parece exagerado este análisis, pero si estudiamos la situación veremos que ambos son tan reales como posibles. Empecemos por traducir al inglés y a cualquier idioma este modesto articulo y enviémoslo a los hermanos del pueblo de los Estados Unidos
*Periodista, Especialista de Seguridad y Defensa Integral de la Nación (IAEDEN) Diplomado en Pedagogía Militar (UMBV) Tte. de Milicia Bolivariana.
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