29 de noviembre 2008. - La cifra de muertos por las inundaciones que comenzaron hace una semana en el estado brasileño de Santa Catarina (sur) llegó a 109 este sábado, mientras 79.000 son los evacuados por causa del desastre, informó la Secretaría de Defensa Civil.
Esta cifra implica 10 fallecidos más respecto al último balance del viernes, y podría incluso incrementarse dado que hay 19 desaparecidos, en medio del aumento del nivel de aguas y los deslizamientos de lodo que han dejado a más de un millón y medio de afectados, reseñó AFP.
Las autoridades decretaron un toque de queda en algunas regiones afectadas para evitar los saqueos de pobladores en busca de alimento.
Las portadas de los diarios brasileños durante la semana mostraron decenas de fotografías de catarinenses con el agua hasta la cintura caminando por supermercados anegados en busca de comida y agua potable.
Defensa civil informó este sábado que liberó 515 toneladas de alimentos desde el pasado domingo.
Sin embargo, aún persisten zonas inaccesibles para los equipos de ayuda, que sólo pueden alcanzarlas vía helicóptero.
Otro objetivo del toque de queda es impedir que los habitantes retornen a zonas de riesgo, amenazadas por nuevos movimientos de terrenos.
El número de evacuados alcanza los 79.000.
El Ministerio de Salud y la Defensa Civil montarán este fin de semana un hospital de campaña cerca de Itajaí, uno de los municipios más afectados, que podrá recibir hasta 400 personas por día. Las autoridades temen epidemias por enfermedades como la leptospirosis, transmitida vía orina y excremento de ratas.
Ya fueron enviadas 10 toneladas de medicamentos y vacunas desde Brasilia a Santa Catarina.
Las donaciones en efectivo ya ascienden a 600 millones de dólares, y 12.000 mantas e igual número de cobertores ya fueron entregados a los afectados, según el parte oficial.
En Ilhota, uno de los municipios más afectados, la prefectura local decidió autorizar a la Policía Militar a impedir -por la fuerza- el retorno de pobladores, por temor a nuevos deslizamientos de tierras, indicó en la tarde del sábado la estatal Agencia Brasil.