CARACAS 10 de agosto 2009. - - El presidente de Venezuela, Hugo Chávez, denunció este domingo una incursión de soldados de Colombia en territorio venezolano a través del río Orinoco (suroeste), maniobra que calificó "como una provocación del gobierno de su homólogo colombiano Alvaro Uribe".

"No se trata de una patrulla de soldados que por equivocación pasó (a territorio venezolano). No, éstos cruzaron el río Orinoco en una lancha e incursionaron en territorio venezolano. Tenemos los testigos", afirmó Chávez en su programa dominical 'Alo Presidente'.

"Cuando las tropas nuestras llegaron, (los soldados colombianos) ya se habían ido", precisó el mandatario venezolano, que calificó el hecho como "provocaciones" del gobierno de Uribe.

El incidente abre un nuevo frente en las complejas relaciones binacionales, congeladas desde finales de julio debido al acuerdo militar que negocian Colombia y Estados Unidos para que Washington disponga de un uso controlado de siete bases militares en el país sudamericano.

Las declaraciones de Chávez se producen un día antes de participar en la cumbre de presidentes de la Unión de Naciones Suramericanas (Unasur) en Quito, que no contará con la presencia de Uribe, y en la que el mandatario venezolano instará a sus homólogos de la región a "levantar la voz" contra la instalación de las bases.

No obstante, Chávez consideró que en la reunión de Unasur no se podrá aprobar un documento contra esta presencia militar estadounidense ya que las decisiones se aprueban por unanimidad y Colombia se opondrá a ello.

"Lo importante es que está abierto el debate. Es lamentable que el presidente de Colombia no dé la cara. Que dé la cara y explique. Están tratando de ocultar la verdad (...) Ahora los colombianos dicen que no son bases militares. ¿Qué son parques infantiles?", ironizó el mandatario venezolano.

Durante su programa, Chávez recalcó que las relaciones con Colombia "siguen congeladas" y que el comercio binacional, que el año pasado superó los 7.000 millones de dólares, "va para abajo".

El mandatario ordenó en estos días que las importaciones colombianas se sustituyan progresivamente en países como Argentina y Brasil y este domingo ordenó acabar con el suministro de combustible y derivados de petróleo a Colombia a precios preferenciales.

"Que (el suministro) se acabe ya, que lo compren al precio que es, cómo vamos a estar favoreciendo al gobierno de Uribe de esa manera", indicó.

La nueva crisis entre Colombia y Venezuela se avivó con el reciente anuncio del gobierno de Bogotá sobre la aprehensión, en un campamento de la guerrilla de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC), de tres lanzacohetes que habrían sido comprados por Caracas en los años 80.

Chávez, que calificó estas informaciones de "sucia maniobra", señaló que discutirá esa acusación con su homólogo brasileño Luiz Inacio Lula da Silva durante la cumbre de Unasur.

"A Lula le voy a mandar un cohete, a lo mejor se lo llevo mañana (lunes)", dijo.

Según Chávez, existe un escenario para preparar una agresión militar contra Venezuela, impulsado por Colombia, Estados Unidos e Israel. Por ello, amenazó que si ocurre, va a "responder militarmente y sería una respuesta muy contundente".

"Los yanquis empiezan a comandar las fuerzas militares de Colombia, ellos son los que mandan (...) los que comandan las provocaciones, los que fabrican las grandes mentiras", señaló, acusando a Estados Unidos de estar detrás de la maniobra en la frontera.

Chávez comparó la situación actual de Venezuela con la vivida en Panamá en 1989, cuando fue invadida por Estados Unidos.

"Ese plan a mí me lo quieren aplicar. Sólo que aquí la cosa es distinta. La Venezuela de hoy no es el Panamá de 1989 ni la América Latina de hoy es la de 1989, cuando ellos hacían lo que les daba la gana en este continente", aseguró.