26 de sept. 2009. - El presidente golpista de Honduras, Roberto Micheletti, aseguró hoy que el cerco alrededor de la Embajada de Brasil está establecido en respuesta a la petición del Gobierno de Luiz Inácio Lula Da Silva de garantizar la seguridad en su interior.
“Nosotros solo estamos respondiendo a la petición que hizo el Gobierno del señor Lula da Silva al Gobierno de Honduras que quería garantizar la Embajada, el edificio y también la vida del que estaba dentro”, dijo Micheletti en declaraciones a periodistas.
“Estamos comprometidos a garantizarle la parte de afuera al Gobierno de Brasil”, insistió el presidente de facto, después de que el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas condenara los “actos de intimidación” contra la Embajada de Brasil, donde se encuentra el presidente depuesto, Manuel Zelaya, desde el lunes.
Al ser preguntado sobre si iba a acatar la resolución de las Naciones Unidas, Micheletti insistió en esa respuesta y negó que se estén interfiriendo teléfonos o lanzando gases en ese edificio, y acusó de los cortes de luz y agua a los seguidores de Zelaya que acamparon en el lugar el lunes, antes de ser sacados por la fuerza.