07-04-14.-El Ministerio del Poder Popular para Relaciones Exteriores, informó mediante una nota verbal dirigida a la Embajada de Panamá en Caracas, que decidió declarar como personas non gratas a funcionarios de esa Misión Diplomática, luego que el Gobierno de esa nación haya hecho declaraciones injerencistas contra Venezuela.
El embajador, Pedro Roberto Pereira Arosemena; el ministro consejero, Jaime Serrano; el agregado diplomático, María Salazar de Serrano y el agregado Raúl Fernando Rolla Font, disponen de 48 horas para salir del territorio de la República Bolivariana de Venezuela, debido al discurso y acciones injerencistas de su gobierno.
En una segunda nota verbal, el Ministerio para Relaciones Exteriores manifestó a la Misión Diplomática del país centroamericano, su rechazo a las acciones emprendidas por las autoridades panameñas, "consideradas como inamistosas hacia Venezuela, así como una intromisión en los asuntos políticos internos".
El documento indica, que el Gobierno Bolivariano ha realizado esfuerzos para informar a la comunidad internacional, incluyendo a Panamá, de los últimos sucesos que se han registrado en el país y pese a estos hechos, las autoridades de esa nación han insistido en llevar a cabo acciones que conspiran contra la unidad Latinocaribeña.
Venezuela reiteró su convicción en que el destino de la Patria lo definen los venezolanos, "quienes hemos optado por continuar el legado y obra de nuestro Comandante Supremo Hugo Chávez Frías, proseguidas por el Presidente Nicolás Maduro".
En la nota verbal, la Patria de Bolívar reiteró su compromiso en seguir promoviendo las buenas relaciones entre los países de América Latina y El Caribe, a través de mecanismos como el Alba, Unasur y la Celac.
Además, se reafirmó la voluntad del Gobierno Bolivariano por mantener "cordiales y constructivas relaciones con todos los países basadas en el respeto a la soberanía y la no injerencia en los asuntos internos de cada Estado".
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, informó este miércoles que tomó la decisión de suspender relaciones con el Gobierno de Panamá y congelar desde este momento las relaciones comerciales con esa nación, incluyendo la suspensión del proceso de revisión de una presunta deuda en dólares de Empresas Privadas venezolanas con exportadores de la zona libre de Colón, donde por lo demás se han detectado graves irregularidades que se seguirán investigando a nivel penal.
