Según Luis Vicente León, presidente de la empresa de investigación de mercado, Datanálisis, más del 69 % de los venezolanos desaprueba la reimposición de medidas coercitivas y unilaterales (mal llamadas sanciones) que proponen algunos dirigentes de la oposición.
Indicó que los ciudadanos se oponen a las mal llamadas sanciones como una forma de ejercer presión al Gobierno del presidente Nicolás Maduro. A través de su cuenta en la red social X destacó las consecuencias que deja ese tipo de mecanismos en la población.
"Pensar que la reimposición de sanciones petroleras es un mecanismo de presión para obligar a Maduro a negociar o entregar el poder es olvidar que hace escasos meses, esas sanciones estaban ahí y su impacto para lograr ese objetivo fue absolutamente nulo", escribió.
A su juicio, una reimposición de medidas coercitivas y unilaterales (mal llamadas sanciones) ocasionará que se repita la misma situación en la que vivieron los venezolanos durante los últimos años. Detalló que en ese período de tiempo solo se agudizaron los problemas del pueblo, mientras la economía cayó aún más.
"La agudización de sanciones, lo máximo que puede generar, es lo mismo que ya pasó durante los más de seis años de sanciones secundarias: Maduro fortaleció su control político interno, la economía se deterioró aún más y la población amplificó sus problemas críticos de vida cotidiana", explicó.
Por último, el economista afirmó que quienes insisten en imponer más sanciones al país son los mismos que no han podido diseñar una estrategia que permita resolver la situación política de Venezuela. "Prefieren el simplismo de vender la idea de que están "castigando" a Maduro con sanciones que al final han demostrado que castigan infinitamente más a la población, a la infraestructura, a los sectores productivos y al país en general", concluyó.