Nuestro gobierno revolucionario y humanista, presidido por el Comandante Obrero Nicolás Maduro, el pasado 1ro. de mayo decretó un nuevo incremento en el salario mínimo nacional mensual y obligatorio que serán cancelados a todos trabajadores del sector público y privados del país del 30%, fraccionado en dos partes: 20% a partir de Mayo y 10% a partir de Julio del 2015, ubicándose nuestro salario mínimo en Bs. 9.816,oo, el cual representa un incremento acumulado del 52%, toda vez que cuando se hace el ajuste actual del 20% es sobre el incremento del 15% otorgado en febrero 2015 y el que se ajustará el 1ro. de julio del 10% será sobre el salario ya implementado de mayo. A este monto deberá sumársele el bono ajustado a la nueva unidad tributaria que se cancela a los trabajadores por la Ley de alimentación, que usualmente oscila entre Bs. 2.250 y Bs. 3.375 mensuales, para un salario integral legal de Bs. 13.191,oo aproximadamente.

El Presidente Obrero también ordenó que dicho incremento afecte proporcionalmente la escala de sueldos por la que se rigen los empleados de la administración pública y el tabulador salarial de los trabajadores obreros, por lo que dichos incrementos se aplicarán, no al trabajador directamente, sino al salario básico de cada uno de los grados que establece dicha escala (empleados) y/o tabulador (obreros), beneficiando esta medida a los profesionales de la administración pública, pues evitará que los profesionales de carrera que se han esmerado en alcanzar estudios superiores queden a la par de los que no lo son y servirá de estímulo económico para éstos últimos.

El mencionado incremento salarial también beneficia a las pensionados y jubilados de la administración pública nacional, alcaldías y gobernaciones, así como a las pensiones otorgadas por el Instituto Venezolano de los Seguros Sociales que ascienden a 3 millones de pensionados y adultos mayores con asignaciones dignas equivalentes al salario mínimo, en la continuación de una política de nuestro gobierno humanista, revolucionario, socialista y profundamente comprometido con las mayorías, con los trabajadores, que valora y reconocer al ser humano como un todo.

En la continuación de la defensa de los derechos del pueblo trabajador y de su salario, el Presidente Maduro garantizó la inamovilidad laboral y protección del trabajo para el 2015, a través de la firma el miércoles 6 de mayo, del Decreto Presidencial correspondiente. En paralelo, el 7 de Mayo venció el lapso establecido en la LOTTT para la incorporación de todos los tercerizados que se mantenían en las empresas públicas, que se calcula en un 25% de la masa laboral industrial del país. En la actualidad, esa masa laboral se encuentra en proceso de incorporación masiva a las respectivas nóminas institucionales, subsanándose así, y sólo en revolución, otra deuda social y laboral que se tenía con trabajadores tercerizados, muchos de ellos hasta con más de 15 años subcontratados en nuestras industrias.

Todo lo expuesto nos indica que el aumento salarial otorgado el 1ro. De Mayo reivindica el carácter obrerista de la revolución y garantiza el poder adquisitivo de la clase trabajadora frente la guerra económica gestada desde la derecha apátrida; adicional a los beneficios y ahorros al salario obtenidos a través mercales, Pdvales, red de abastos bicentenarios, planes de viviendas, sistema de salud, Siamed, operativos a cielo abierto, constitución e instalación de los Consejos Populares de Abastecimiento y Producción en cada uno de los centros de abastecimiento alimenticio del país, también nos refleja que son medidas acertadas para la protección del salario del pueblo trabajador y no olvidando que ese incremento es el No. 29 otorgado en 16 años de gobierno revolucionario, con un promedio de dos veces al año, mientras que la burguesía cuando gobernó durante los últimos 25 años, apenas otorgó ocho aumentos salariales.

Como clase trabajadora sólo nos resta apoyar y empoderarnos de las acciones desarrolladas para edificar un nuevo esquema de productividad y fortalecimiento económico impulsadas desde nuestro Gobierno Revolucionario, asumiendo desde la clase, que jugamos un rol preponderante -como sector vital en la cristalización de esta fase de recuperación económica- por lo cual debemos adquirir el compromiso militante de derrotar la grave guerra económica declarada por los sectores oligárquicos para generar la desestabilización necesaria que les abra camino para su regreso al poder político; mientras que a nosotros, por el contrario, nos permitirá la construcción definitiva de la Patria Buena y Bonita, de la Patria Potencia Productiva, Soberana, Humanizada e Igualitaria que todos soñamos y por la que se inmoló nuestro Comandante Supremo y Eterno.

"La riqueza de un país, la produce sus trabajadores;

un Estado estable y una economía productiva, que supere la pobreza,

solo la construye la clase obrera".

Nicolás Maduro

Naile Figuera

Intendenta de Protección del Salario

Mayo 2015