(Caracas, marzo 11, 2015- Prensa/CBST).- Una asamblea nacional con más de 300 dirigentes políticos celebró durante dos días consecutivos, la Central Bolivariana Socialista (CBST), primera organización de trabajadores de Venezuela, para definir estrategias de cara a la activación y aplicación del Plan de Contingencia Productivo, que solicitara en días pasados el Presidente Nicolás Maduro ante los embates de la derecha fascista que promueve la guerra económica.

El maratónico encuentro, con jornada plenaria durante los dos días en espacios del Incret, contó con la asistencia de la dirección nacional ampliada de la organización; presidentes, coordinadores generales de las federaciones estadales y responsables de las comisiones promotoras regionales, así como con una representación de cuadros políticos por cada estado del país.

Es importante destacar que aún cuando no estaba previsto en la agenda de discusión, la clase obrera en pleno, encabezada por sus principales directivos como Wills Rangel, Carlos López, Franklin Rondón, Marco Tulio Díaz, Octavio Solorzano, Eglé Sánchez y miembros del Consejo Consultivo como el diputado Oswaldo Vera y el viceministro del Trabajo, Néstor Ovalles, aprobaron una declaración y un plan de movilización inminente a nivel nacional e internacional para hacerle frente a las últimas agresiones del imperio norteamericano, que catalogó a Venezuela como una amenaza inusual y extraordinaria a su seguridad nacional.

Aumentar niveles de compromiso

El secretario general de la Central Socialista, Carlos López, fue el encargado de abrir el debate en el Salón 13 de abril. Allí aprovechó la oportunidad para solicitar a los dirigentes sindicales presentes, en especial, a los líderes regionales, aumentar los niveles de compromiso y eficiencia políticos.

En este sentido, les pidió involucrarse más con los objetivos resultantes del I Congreso Nacional de Trabajadores, celebrado en el último semestre de 2014, entre estos: presentar propuestas concretas por sectores para la reactivación del aparato económico productivo, propuestas para la transformación del Ministerio para el Proceso Social del Trabajo, la conformación de los cuerpos de combatientes de la Milicia Obrera en todas las instancias laborales y plan para la integración internacional. Como puntos importantísimos destacó la formación política, el plan de contingencia ante la guerra económica y la organización. "Hay que meterle corriente al registro y conformación de las federaciones y sindicatos que aún no han sido juramentados", fueron sus palabras.

Modelo productivo y papel de la clase

El dirigente sindical y actual viceministro del Trabajo, Néstor Ovalles, advirtió a los más de 300 voceros y líderes sindicales presentes en el encuentro sobre los riesgos que corre la Revolución Bolivariana si la clase obrera no termina de asumir su papel histórico para que el socialismo sea una realidad.

"El capitalismo atraviesa por una crisis demoledora y cada vez más está intensificando su condición de acumulación delictiva; en este contexto la clase obrera está llamada a ser vanguardia. O construimos el socialismo o esto es una mofa", indicó.

Explicó Ovalles que "el tránsito hacia el socialismo tiene muchas velocidades y desarrollo a multiniveles y está marcado por una terrible confrontación de clases y una cruenta lucha en el campo de las ideas". Como crítica constructiva indicó que los dirigentes y voceros sindicales "tenemos que retomar la lucha en los portones, en las fábricas, en las empresas, en los sindicatos porque la derecha está apostando a que el pueblo se canse de la revolución y así migrar su intención de voto".

Asimismo, recordó que el Comandante Eterno, Hugo Chávez logró establecer una conexión afectiva, emocional y política con la clase obrera y con el pueblo y "nosotros debemos apuntar hacia allá: debemos rescatar el alma del pueblo venezolano".

Para finalizar, insistió en la urgencia de avanzar hacia la gestión productiva obrera, la reindustrialización del país, la superación de la mentalidad rentista y el rentismo petrolero, la industrialización de la Faja Petrolífera del Orinoco "Hugo Chávez" y la planificación socialista, entre otros.

Movilización permanente

Por su parte, el presidente de la CBST, Wills Rangel, coincidió con Ovalles al advertir que el gran capital va a atentar contra cualquier iniciativa que tome la clase obrera para alcanzar la soberanía productiva y alimentaria. Recordó que el país cuenta con una fuerza laboral conformada por más de 13 millones de trabajadores que deben abocarse a la activación del plan productivo y, como tarea adicional ante las agresiones del imperio, declararse en movilización permanente.

"Aquí la preocupación del Presidente Nicolás Maduro es que estemos movilizados y que ataquemos las roscas productivas. Producción, producción, producción y menos cháchara es lo que reclama el país".

Tras la intervención del dirigente petrolero, Wills Rangel, tomaron el derecho de palabra, los vicepresidentes de la CBST, Marco Tulio Díaz y Octavio Solorzano, la Intendenta para la Protección del Salario Obrero, Nailé Figuera y el coordinador Hernán Iriarte.

En representación de la Comisión de Asuntos Internacionales habló el dirigente sindical Jacobo Torres, quien destacó la importancia del encuentro mundial "Crisis Global y Nuevo Orden Mundial", a celebrarse el próximo mes de abril en Caracas con la participación de académicos e intelectuales europeos amigos de la Revolución y organizaciones sindicales del viejo continente y Estados Unidos.

"Debemos mantener viva la llama de la Revolución en el mundo. El objetivo de este gran encuentro internacional es plantear propuestas que nos permitan movilizar al mundo entero para salvar a la humanidad de las transnacionales y el capitalismo", advirtió.

Es importante destacar que en el marco de esta intensa jornada de debate nacional se realizó un taller para la profundización y ampliación del Sistema de Protección Popular para la Paz (SP3) y se acordó una distribución de responsabilidades para la pronta y efectiva aplicación del Plan de Contingencia Productivo.

Prensa CBST: Alejandra Milano y Virginia King

Fotos: Rolando Semprun, Oscar García y Juventud Obrera