La ignorancia es campo fértil para el engaño. Allí, en el ámbito de la credulidad y el desconocimiento la mala yerba del engaño explotador crece a su gusto. Transforma emociones y demuele voluntades blandengues. Así ha sido y así es. Es en el terreno de las ideas donde la vanguardia revolucionaria debe empeñar su mayor esfuerzo. La comunicación de la idea justa, luminosa y sagrada encarnada en un ejemplo de vida absolutamente coherente tiene más poder de convencimiento que mil marchas, o igual número de cuñas y propagandas. Estas hacen lo suyo, impresionan, emocionan o entusiasman a ratos pero adolecen del filo profundo que convence. Una patriota o un patriota consciente, convencido de la razón de sus ideas, de sus dolores y sus esperanzas no es pasto fácil de la manipulación burguesa, ni amanece un día queriendo votar por su enemigo de clase porque no le gusta un alcalde o un gobernador.
A la manipulación burguesa hay que derrotarla con la verdad revolucionaria. La verdad es fruto del conocimiento y siempre es contundentemente revolucionaria. El capitalismo como propuesta de vida para todos los pueblos del mundo, pero en particular para nuestro pueblo, es un camino ¡claro que lo es! Es el camino seguro al infierno, a la guerra, al hambre, a la exclusión, incluso a la extinción de la raza humana y el planeta. Eso es científicamente demostrable no es necesario recurrir a ardides de ninguna clase, ahí está la historia –antigua y reciente- demostrándolo como “un profeta que mira hacia atrás” Ante las mentiras edulcoradas del capitalismo nuestro pueblo debe estar armado con el conocimiento de la verdad y la conciencia profunda de la clase a la cual pertenece.
Esa es la batalla discursiva que debe darse. Optar entre una propuesta que coloca lo humano y lo social por encima del interés egoísta y particular; que invoca la conciencia del deber social y la complementariedad frente a la competitividad darwiniana, salvaje y asesina; que proclama la igualdad frente a la explotación del hombre por el hombre y la solidaridad frente al egoísmo más brutal ¿Cuál debe ser la opción del pueblo? ¿Qué tiene que ofrecer el capitalismo? Desenmascararlo con verdades, ejemplo de vida y argumentos sólidos es como se ganará la madre de las batallas que debe librar la Revolución, en lo inmediato el próximo 7 de octubre. Venezuela, Latinoamérica y el mundo así lo demandan y esperan. ¡VACILAR PODRÍA PERDERNOS!
¡¡¡CON CHÁVEZ HACIA EL SOCIALISMO!!!
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