¡Libertad!¡Democracia!¡Soberanía!¡Justicia Social!
Hace 55 años un día como hoy, un 23 de enero de 1958, el pueblo le
dijo basta a un tirano dictador que tenía al pueblo sometido con
persecuciones, encarcelamientos, tortura, asesinatos, desapariciones y
terror, un día como hoy el pueblo salió del dictador Pérez Jiménez,
dictador puesto por los gringos para proteger el petróleo de los
venezolanos y venezolanas pero que ellos creían, y creen aún, que era
y es suyo.
Pero la historia y los hechos nos cuentan que la alegría de salir del
tirano duró poco, un año después se instauraba otro régimen, el
régimen de Rómulo Betancourt, el “Padre de la Democracia”, según
ellos, y su famosa política “disparen primero y averigüen después”, su
primer “decreto democrático” fue suspender las garantías
constitucionales y desatar toda una campaña de persecución y terror en
la población, de nuevo vino el miedo y la muerte, de nuevo llegaron
las desapariciones forzosas y la cárcel del pasado, pero lo único era
que no era por un régimen dictatorial, sino por un régimen
“democrático y popular”, empezaba la macabra era del puntofijismo
adeco copeyano asesino de pueblo.
La democracia representativa de la IV República, o sea de los adecos y
copeyanos, trajo a Venezuela una supuesta libertad y reivindicaciones
sociales que hoy todavía algunos adecos y copeyanos y, los partidos
nacientes de ellos, quieren defender, una supuesta democracia que lo
que hizo fue asesinar, perseguir, torturar, desaparecer, robar y
entregar el petróleo y la soberanía nacional al imperio gringo, una
supuesta democracia que llevó al pueblo a su máxima expresión de
pobreza, teniéndolo todo para llevarlo a la prosperidad, teniendo los
recursos energéticos y económicos más no el compromiso y voluntad
política, o inteligencia para hacerlo.
Así transcurrieron 40 años, 40 años de muerte, hambre, miseria, de
desesperación, de violaciones de sus Derechos Humanos, hasta que un 27
de febrero de 1989 hubo el segundo 23 de enero pero un 27 de febrero,
el pueblo dijo ¡Basta! y bajaron de los cerros y salió a las calles de
Guarenas y Caracas a exigir su bienestar, su comida, su libertad, su
soberanía, su petróleo, y allí nació en los cuarteles el 4 de febrero
de 1992, allí nació Hugo Chávez, tres años después llegó el grito ¡Por
Ahora! y con él la esperanza de tener lo que los adecos y copeyanos
vendepatria les negaron durante la era del puntofijismo, o sea
¡justicia social!, fue un 6 de diciembre de 1998 cuando el pueblo
enterró con su Voto esa seudo democracia representativa y represiva,
esa política represiva democrática del “padre de la democracia”,
“disparen primero y averigüen después”, de ese ladrón de cuello blanco
y cachimba en la boca que gritó con su tonito de voz ronca muy
particular, “que se me quemen las manos si he robado el tesoro
nacional”, al otro día le exploto una bomba en el carro presidencial y
lo único que se le quemaron fueron las “manos blancas”, ¿por qué
sería?, la traición se paga, y esa lacra que se llamó Rómulo
Betancourt pagó parte de su mentira y traición con esa justicia divina
que llegó con ese pequeño castigo físico en sus manos, sus muertes,
desapariciones, torturas, robo y entrega del país a los gringos nunca
los pagó, se fue para el infierno igual que los otros asesinos y
ladrón, Carlos Andrés Pérez y Rafael Caldera.
Pero eso pasó hace 55 años y hoy el pueblo junto a su líder Hugo
Chávez aplastó a esos lacayos vendepatria, a esa burguesía parásita, a
esos partidos traidores al pueblo que entregaron la libertad que el
pueblo oprimido con su sangre consiguió y que ellos en el Pacto de
Nueva York y luego refrendado en el Pacto de Punto fijo traicionaron,
pero esos delincuentes adecos y copeyanos no volverán y el 7 de
octubre una vez más el pueblo les dijo ¡No volverán!, fueron 8
millones y medio de voces que gritaron con su voto, fueron miles de
voces que el 10 de diciembre juran ante la Constitución lealtad a su
comandante, líder y presidente, juraron ese día públicamente
defenderlo con la vida, allí está todo un pueblo, ese pueblo que fue
traicionado por los adecos, copeyanos, Fedecamaras, los banqueros, la
cúpula de la iglesia católica y que hoy 23 de enero una vez más les
dice en la toma de Caracas… ¡No volverán!
¡Viva el 23 de Enero!¡Viva la Patria!¡Viva Chávez, carajo!
¡Independencia y Patria Socialista…Viviremos y Venceremos!
23 de Enero de 2013
obny2502@gmail.com