Nuevamente me permito abrir espacio a esta comunicación recibida vía correo electrónico, de esta apreciada camarada Zulay Farías, con un tema que es muy interesante, toda vez que contiene dos vertientes que eran antagónicas en la cuarta república, las cuales eran no mezclar la política con lo jurídico ni con lo religioso. La camarada Zulay Farias le responde a un columnista opositor de Carabobo de nombre Gustavo Vásquez, quien quería adornarse con una exposición político-jurídica y nuestra camarada dio tres pasos al frente marcialmente hablando, para defender nuestra revolución, la cual se encamina por el sendero de la rectitud, cuyo contenido es del tenor siguiente: “Estimado Gustavo Vásquez, Ud., publicó un artículo sobre el allanamiento a las inmunidades de los diputados Mardo y Caldera y las elecciones del 8 de diciembre próximo.
Me gustaría que Ud., obviamente por ser el autor y motivador principal de esta respuesta, y cualesquiera interesados profundizáramos sobre sus planteamientos. Creo que si existe la base jurídica para lograr el enjuiciamiento de estos impresentables. Abajo la expongo. Espero que podamos precisar jurídicamente la procedencia o no del enjuiciamiento. Abogado, en su análisis advierte la probabilidad de que los delincuentes de la oposición Mardo y Caldera que ostentan una curul en la Asamblea Nacional, no sean objeto de allanamiento de su inmunidad parlamentaria luego de debatidas la presunta comisión de delitos cometidos por ambos, relacionados con sobornos y negocios ilegales sobre legitimación de capitales y defraudación al Fisco Nacional que comprometen los deberes que les obligan a realizar una gestión digna, transparente libre de inmoralidades e ilicitudes.
Según, usted, Vásquez para lograr dicho allanamiento y someterlos a juicio, es necesario que el 75% de los diputados (3/4 partes) aprueben dicha medida. Alcanzar dicho porcentaje excede a todas luces el número de las curules pertenecientes a los partidos políticos que apoyan el Proceso Revolucionario dentro de la Asamblea Nacional, pues nuestras fuerzas constituyen aproximadamente el 59,3% de la fuerza parlamentaria, pues de los 165 diputados que conforman la cámara, 97 pertenecen a las fuerzas patriotas chavistas. Ello significa, según lo expuesto por Ud., que no poseemos lo que se denomina la mayoría calificada para lograr el allanamiento de las inmunidades de los diputados de marras y el pase de estos delincuentes a la Fiscalía para que ésta en su rol de acusadora proceda a imputarlos de acuerdo con el cúmulo de pruebas que así lo permitiere. Ahora, Vásquez, yo observo lo siguiente: Nuestra Constitución Nacional en el Artículo 187, numeral 10 prevé las 3/5 partes del voto parlamentario para aprobar voto de censura al Vicepresidente o Vicepresidenta ejecutivo y Ministros que conlleve a sus destituciones si fuere pertinente, y en este sentido es taxativa, precisa. No extiende esa porción (3/5) a las decisiones relacionadas con allanamientos de inmunidades parlamentarias.
La Carta Magna no establece o fija porcentaje alguno en relación con el allanamiento de inmunidades parlamentarias. Tampoco lo hace el Reglamento Interno y de Debate de la Asamblea Nacional. En su Artículo 25, ejusdem, sobre La inmunidad habla entre otras, sobre la garantía del debido proceso al diputado o diputado a investigar, de la denegación del estudio de la solicitud del antejuicio de mérito si transcurrieren 30 días después de presentado el informe que una Comisión Especial legislativa elabora por orden del Tribunal Supremo de Justicia y la Asamblea no se abocare a su discusión y tratamiento. Y a mi juicio hay algo relevantísimo en este articulo 25 en el penúltimo párrafo que faculta, si la cosa fuere grave, a cualquier diputada o diputado miembro de la directiva de la Asamblea para que haga del conocimiento de la Plenaria el Asunto y ésta proceda al debate y decisión sobre la solicitud de antejuicio de mérito formulada por el máximo tribunal de la República.
También, Vásquez, observo que ni la Constitución Nacional ni el Reglamento Interno y de Debates de la Asamblea Nacional fijan porcentaje específico de votos para decidir la procedencia o no del allanamiento a la inmunidad de un parlamentario. De lo que podría inferirse que tal decisión podría ser tomada, entonces, por mayoría simple, es decir por el voto favorable para el allanamiento del 50% + 1. Y si así fuere, si no estoy equivocada, podría darse perfectamente la aprobación para el allanamiento de la inmunidad parlamentaria de Mardo y Caldera con el voto favorable de la bancada patriota y revolucionaria que constituye -como señalé anteriormente- el 59,3% de la Cámara de diputados. Le solicito, Gustavo, que fundamente jurídicamente sus razonamientos porque repito puedo estar equivocadísima. En lo que coincido con Ud., plenamente es en sus observaciones políticas sobre nuestro futuro político: Si queremos conservar el poder, aumentarlo con el apoyo de lo que es su génesis: las clases populares.
Debemos darle muerte a los vicios, ser implacables con los que burlan las leyes y asesinan el Proyecto Chavista porque parece que hubieran comido piedras, y ahora se atragantan con "el poder": no se ubican moralmente ante los deberes patrióticos que les exige la Revolución. Sancionar y apartar a todos y todas los que con su pésimo actuar han desdibujado el rumbo y confunden a las masas. Desaplicar, abrogar la cooptación como método para escoger candidaturas, pues a las bases ese método les suena a: INDIFERENCIA, RATIFICACIÓN DE LA CORRUPCIÓN, INJUSTICIA, NO PARTICIPACIÓN, ABUSO DE PODER, PREMIO A LOS INSERVIBLES: todo esto es deleznable, todo esto vuelve insano al cuerpo y puede matarlo. Para finalizar, si como dice Ud., Vásquez, son necesarias las 3/4 partes, o sea el 75%, entonces será imposible el allanamiento porque ello equivale al voto favorable de 124 diputados. Con seguridad, todas las fuerzas opositoras presentes en la Asamblea Nacional harán alianzas automáticas, tal como lo han hecho tanto con la delincuente María Machado, traidora a la Patria, apátrida monstruosa y loca de atar, como con el delincuente y no menos alienígeno desestabilizador Ramón Guillermo Aveledo, arrastrados a quienes ni con el pétalo de una rosa osarán reclamarle la venta y la sangre de patriotas venezolanos que no les importa derramar tras la promesa de entregar nuestra Patria a los intereses del imperialismo yanqui.
Ninguna de las fichas del oposicionismo siquiera los señalará, y mucho menos les espetará que si quieren ofrecerle algo a la potencia gringa, lo único que pueden ofrecer son sus asqueantes traseros. Tampoco a estos vende patria les exigirán que abandonen junto a sus descendientes la Patria de Bolívar y Chávez, y por supuesto jamás tendrán la iniciativa de echarlos del Poder legislativo que tan indignamente conforman. Zulay Farías M.”