El período actual de la humanidad bajo el sistema capitalista es de crisis recurrente con ciclos cortos de aparente recuperación en medio de una crisis estructural debido, por una parte, a la contradicción entre el carácter social de la producción y propiedad privada de los medios de producción y, por otra parte, entre el libre mercado y la planificación de la producción.
La civilización humana está en peligro debido al modelo de producción de la gran industria capitalista que persigue la acumulación de capital, sin pensar en el equilibrio del ecosistema terrestre, sin seleccionar las opciones tecnológicas apropiadas para la preservación del medio ambiente. No sería exagerado decir que la opción socialista es vital, ya que la opción capitalista conduce al abismo de la barbarie.
Las propuestas revolucionarias deben partir de la realidad existente y superarla, es decir, someter a crítica despiadada todo lo existente para lograr construir un modelo nuevo. Ese es el reto del socialismo y de ello depende el futuro del planeta. La responsabilidad de la clase trabajadora es crucial por ser la llamada a liberar la humanidad de la barbarie del capitalismo, ya que solo el factor subjetivo de la organización podrá romper el círculo vicioso de la crisis estructural de l capitalismo.
La clase trabajadora organizada en sindicatos y en los partidos socialistas es la garantía del futuro socialista, ya que las condiciones objetivas han empezado a romper las cadenas de dependencia ideológicas que la mantienen esclavizada. Además de la toma del poder político, la revolución socialista implica el salto de la necesidad a la plena libertad, lo que implica la utilización de la ideología socialista como herramienta política actual y en el futuro como la ciencia para la construcción de una nueva realidad. En nuestro país el grado de desarrollo capitalista hace necesario que la clase trabajadora se una a las demás capas oprimidas y excluidas por el capital.
Es entonces importante saber qué es progresivo o regresivo para fortalecer el factor subjetivo, es decir, la organización revolucionaria. Al analizar diversos escritos durante varios años se nota que el camarada Valderrama realiza críticas que contribuyen a destruir la organización y debilitamiento de la lucha de la clase trabajadora al despreciar las formas de enfrentarnos a la burguesía parasitaria venezolana mediante argumentos que en apariencia parecieran válidos. En otras ocasiones el mismo camarada Valderrama hace un llamado a la organización de la clase trabajadora pero realizando este llamado desde una posición fuera del movimiento de los trabajadores. La crítica transformadora es aquella que se extrae de la propia lucha, es decir, que los revolucionarios debemos criticar, teorizar y participar en la lucha desde adentro para transformar la sociedad burguesa y no se puede reducir el asunto a una crítica unilateral contra los sindicatos.
El movimiento de los trabajadores y trabajadoras necesitamos la crítica no como herramienta de análisis puro sino como instrumento para orientar la lucha contra el capital ya que como de decíaía Marx, la lucha por transformar la realidad parte de la realidad material existente. Y al ser las organizaciones revolucionarias, los sindicatos y partidos parte de esa realidad existente e influenciadas por la ideología burguesa, solo con ellas y mediante la revelación de las contradicciones capitalistas a esas organizaciones nuestras, podremos liberar la conciencia y dar herramientas poderosas para el enfrentamiento con la burguesía.
Finalmente, la lucha revolucionaria no es algo lineal que indique que mediante unas recetas llegaremos finalmente al socialismo. Marx en su carta a Joseph Weydemeyer en 1852 decía que los economistas burgueses ya habían analizado la anatomía económica de la lucha de clases, y que el aporte de la teoría socialista se dirigía a utilizar la lucha de clases para lograr el poder político de la clase trabajadora, pero que este poder político no es más que el tránsito hacia una sociedad socialista. Como vemos, la transición requiere de conocimiento de la realidad política y económica para lograr llevar a feliz término la construcción de la sociedad nueva, y esa transición lleva aparejada una diatriba interna en el propio campo revolucionario para diseñar el conjunto de medidas que faciliten la transición.
Independencia y patria socialista...viviremos y venceremos
CBST-Miranda/Sintraintevep