Si las elecciones presidenciales de Brasil y Colombia se realizaran el próximo domingo, en ambos países ganaría la ultraderecha en la primera vuelta. Estos dos países son importantes porque tienen fronteras con Venezuela y por su peso político y económico en la región, el seguimiento a sus procesos, políticos, económicos y otros es necesario.
Elecciones 2018. En Colombia repetiría el uribista Oscar Zuluaga pues tiene acumulado 6 millones de votos. La izquierda llevaría dos candidatos uno del Polo y otro de la UP-Marcha Patriótica-Partido Comunista. Vargas Lleras se iría con Cambio Radical y el Partido Conservador con Marta Lucia Ramírez. El Polo repetirá a Clara López y los verdes su candidato. En junio 2014 Santos en segunda vuelta superó en 6 puntos a Zuluaga.
En Brasil el escenario es más complejo. En noviembre pasado Dilma Rousseff del Partido de los Trabajadores PT, fue reelecta por tres puntos sobre Aécio Neves del Partido de la Socialdemocracia Brasileña PSDB.
Afecta mucho la corrupción en sector petrolero y de dirigentes del PT. Hay desaceleración económica y seguirá en el 2015. En estos momentos no hay signos para vaticinar los resultados de los comicios del 2018 de Brasil.
Colombia crecerá 4.5, por debajo solo de Panamá y Bolivia, (exitoso Evo Morales). Hay que observar su incidencia en Venezuela, un factor extraeconómico a considerar es el fin del conflicto, como ya se ha dicho en estos artículos, la paz incrementaría la producción. La meta no es satisfacer las necesidades básicas de la población, como en Venezuela, sino producir y exportar, así mide el desarrollo el neoliberalismo. Lo que le daría a Colombia “excedentes” para vender.
Aunque si continúa el actual diferencial cambiario habría reducción de las exportaciones no gubernamentales a Venezuela.
Conclusión: Debe mantenerse relación comercial con Brasil. Con Colombia incrementarse y convenir complementariedad ahora, no en cuatro años cuando su crecimiento, podría afectarnos.