Nos acercamos a una importante batalla, no la mas importante por que según nuestro recordado Madiba cuando alcanzamos la mas alta cumbre nos damos cuenta de las cumbres que aún nos faltan por escalar, en la construcción de la utopía siempre vamos a estar en batalla. La batalla del 6 de Diciembre requiere de la cohesión del ejército de chavistas para garantizar la victoria, las elecciones del 2.010, 2.012 y 2.013 demostraron que ya no solo con los votos del PSUV (MVR) se garantizan victorias, para las victorias se debe contar con los votos del pueblo Chavista y de las organizaciones del proceso.
Sun Tzu en el Arte de la Guerra plantea que "Para poder vencer al enemigo, todo el mando militar debe tener una sola intención y todas las fuerzas militares deben cooperar" sobre esto último trata este pequeño artículo, a la batalla del 6D debemos ir todos los patriotas, bajo una misma bandera, la bandera del socialismo, la bandera de los mejores sueños de Chávez, para lograr esto se requiere un ejercicio de humildad y amplitud por parte del alto mando de la Dirección de la Revolución, no es nuevo lo que se plantea, cuando las potencias europeas atacaron al gobierno nacionalista de Cipriano Castro, este respondió con un llamado a la unidad de los venezolanos, abrió las puertas de las cárceles y en tropel los venezolanos que adversaban a Castro se unieron a la defensa de la Patria, el escenario es parecido, aunque las potencias utilizan otros métodos, pero la repuesta debe ser igual, llamar a la unidad de los patriotas, decretar una amplia amnistía general para los chavistas presos, execrados, alejados, inconformes para ir a la batalla y ganarla. En estos 15 años tenemos muchos compañeros que se han alejado por cuestiones de diferente índole, tenemos compañeros que confrontaron a Don Luís Miquilena y los alejaron del proceso no fueron tomados en cuenta para nada, esos compañeros deben de regresar, en este grupo apunto al Compañero William Izarra quien llegó a ser senador por el Distrito Capital y luego se topó con una pared y con todo el poder que aglutinaba Miquilena.
El otro planteamiento es la suspicacia de la gente de a pié, que ve casos como el de Didalco Bolívar que tenía tras de si 47 causas y estuvo 3 años huyéndole a la justicia nacional, regresó y Didalco ni siquiera pisó una prefectura y hoy es candidato a Diputado del GPP, sin con Didalco pudieron conversar, por que no se hace con ese conglomerado de valiosos compañeros, que no tienen rabo de paja y que aún cuando siguen en el proceso, por una razón u otra están fuera de su línea principal y puedo nombrar casos como: Numa Rojas en el estado Monagas, por todos es sabido que a Numa y sus 40.000 votos no se le perdona que no se plegó a apoyar a alguien que había abandonado al proceso públicamente, Oswaldo Rodríguez León en Falcón, el alcalde electo con la mayor votación en el Municipio Miranda y un líder natural, condenado injustamente a 25 años y cuya apelación duerme el sueño de los justos desde mayo 2.013, sobre este caso en alguna oportunidad se le preguntó a un ex Presidente del TSJ y respondió que era un caso político, Toby Valderrama alejado por plantear ideas que nadie sale a refutar, Vladimir Acosta separado de Radio Nacional con el programa del segundo mayor "rating" de la radio en estos últimos 15 años (el primer lugar fue Aló Presidente radio), Nicmer Evans execrado por hacer propuestas que nadie ha dicho si son viables o no y por pedir una auditoria sobre una denuncia realizada por una ministro en funciones (Enmeé Betancourt), Robert Ramos en Mérida con pase de factura por no aceptar la imposición de alguien que perdió las elecciones allá en El Vigía, el Profesor Giordani, Alberto Noglia (ya demostrado que tenía razón), el Profesor Héctor Navarro, la compañera Ana Elisa Osorio. Cómo esos casos, los hay muchos a lo largo y ancho del país, gente que es fiel a Chávez, que sigue con los sueños intactos y con la cual se debe establecer una mesa de diálogo, corregir errores para fortalecer la unidad del chavismo.
Libertad a Sonia y Simón Trinidad prisioneros del imperialismo yanqui
