¡Qué tal, camarada! Alejado de estas lides del teclado hacia la opinión porque de verdad estoy desencantado de no lograr mucho, o no logra nada con ello. No considero satisfactorio, por lo menos yo, proponer, como hacemos muchos, cosas interesantes, y que no haya interlocución válida y que, con el tiempo perdido, nos esté comiendo el lobo.
Tampoco es satisfactorio y mucho menos conveniente desatar los demonios de criterios contra nuestra propia Revolución, siempre incipiente, ya que con todos sus defectos hemos estado en la palestra parcial del Poder y lo estamos perdiendo. Muchos dirán que es culpa del gobierno, claro que lo es, pero si escribimos con nuestros demonios desatados vamos mermando simpatías, más en los débiles ideológicos, que son la mayoría.
Arrecho es estar sentado en la Asamblea en minusvalía. Imaginen si perdemos el gobierno que es lo que se vislumbra, aun tantos esfuerzos para superar la crisis, pero a última hora.
Investigados (y luego presos) deberían estar todos y cada uno de quienes nos hicieron llegar a estas situaciones de dependencia total. Especialmente en el sector abastecimiento de todos los insumos. Los que fallaron por malas ejecuciones, malas ideas, malos proyectos, por omisiones y por malas decisiones. E investigarlos cómo y de qué viven…
Sin embargo lo que recogemos en las calles, en las bases populares, es que todas esas investigaciones deben ser realizadas por personas serias, responsables, sanas integralmente, de las comunidades. Inclusive profesionales. Donde no participen autoridades del gobierno ni de partidos "polares", con compromisos de variada índole. ¡Transparencia!
Y que se hagan juicios populares, "Tribunales al efecto", con esas personas y todos los que se quieran integrar, sin activismo político comprometido.
No está nada bien ampararse en que las revoluciones necesitan unos sacudones, cuando ellas en sí están obligadas a ser los grandes sacudones. Nada de alegría de tísicos.
Sin embargo, debo aplaudir las iniciativas de cambio de nuestro presidente obrero Nicolás Maduro. Lástima, repito lo que muchos, que no se hicieron años atrás. Entre ellas la creación de las "Comisiones presidenciales" por áreas bien definidas para diagnósticos actualizados y proposiciones sólidas y prácticas.
Fui invitado a la Comisión Presidencial para la Cultura por un amigo, y por ser desconocido en ese grupo de cultores populares, presenté estas propuestas a continuación:
PROPUESTAS DEL INGENIERO EDUARDO PALACIOS SEVILLANO, NOVELISTA, POETA, COLUMNISTA DE OPINIÓN, REVOLUCIONARIO CHAVISTA, SOBRE LA CULTURA AL PUEBLO, SOMETIDAS A SU CONSIDERACIÓN.
Las hago de manera sucinta.
Siempre se ha pensado que los conocimientos de historia hay que hacerlos llegar con charlas por conocedores de la historia y generalmente a grupos aislados, colegios, liceos y pocas veces a las comunidades.
Con la literatura ocurre casi lo mismo. Muchas, o pocas veces, con talleres al respecto. Nada hacia las comunidades.
Con la pintura, incorporando a algunos cultores populares a las exposiciones, para darles a conocer su obra, como suele decirse.
Estimo que no hemos logrado conectar a las comunidades con el quehacer cultural, salvo con las expresiones musicales, las más de las veces en fiestas tradicionales, patronales, eventos en las fiestas carnestolendas, y "conciertos políticos", etc.
Me he permitido llamar a estas humildes propuestas: IMPLOSIONES, apoyado en la existencia de las comunidades organizadas, obra de Chávez y de nuestra Revolución.
A pesar de que no se le ha dado fuerza por parte de alcaldes y gobernadores, y todavía retumba una expresión casi desesperada: ¡NICOLÁS, COMUNA O NADA!
Se basan en que "los conocimientos provengan de las informaciones e investigaciones que hagan las mismas comunidades" con apoyos varios, especialmente institucionales, y de los privados para hacerla más participativa y en cuanto a cubrir algunos costos.
IMPLOSIÓN EN LITERATURA. Una vez a Farruco cuando ministro de Cultura en un concierto que nuestra Orquesta Sinfónica de Anzoátegui, y a muchos otros, y en mis escritos, le manifesté que no basta con regalar masivamente los libros (una extraordinaria iniciativa) ya que pasan a engrosar modestas estanterías populares, tal como ocurre con los costosos libros en las bibliotecas de Ejecutivos, porque no los leen, salvo sus excepciones, claro.
Tampoco es necesario construir Casas de la Cultura, Casas de la Poesía, etc., basta con que cada espacio educacional, colegios, liceos, en horarios no coincidentes con las clases, salas de edificios, canchas deportivas, etc., se transformen en Casas de la Cultura. Aunque también pueden ser algunos hogares, cada casa por sector en noches de lecturas. "Tenidas culturales interfamiliares". ¡Sabroso! ¿No?
Esto permitirá, entre tantos beneficios del "buen uso del tiempo", que gran parte de las familias, adultos mayores y especialmente jóvenes, hasta los pequeñines, se incorporen al mundo de la cultura literaria, haciéndoles ver que lo más importante en la vida está en el conocimiento de lo bueno. Ya emergerán los poetas que existen y los que casi todos llevamos por dentro. Y disfrutar de todo ese maravilloso mundo que de allí se desprende.
La propuesta requiere en seleccionar a "facilitadores" "estimuladores" para que se organicen lecturas colectivas de algunos libros. Novelas, poesía, etc. No importa que las personas no tengan buena capacidad de lectura, se les informará que no tengan pena ni miedo, que con la práctica poco a poco lo podrán hacer con soltura.
Estos "facilitadores para las lecturas colectivas" deben ser de cada sector, de cada edificio (Gran Misión Vivienda Venezuela). Siempre hay ciudadanas y ciudadanos dispuestos a contribuir. Educadores que allí viven o visitan a familiares y amigos.
Otra fuente importante es que en los colegios y liceos se fortalezca la formación de estos facilitadores. Algunos de los estudiantes que se entusiasmen y se hagan amigos y hasta fanáticos de la lectura.
En algunos casos pueden tener visitas de calificados escritores, o profesores para darles mayor impulso y emoción. Y a ver "si incorporamos a tantos de nuestros intelectuales a la revolución… en lo popular". Menos individualismos y más proyección a la masificación.
Se divulgarán todas estas experiencias, de manera obligatoria, en Los Medios Comunitarios, en emisoras del Estado y, tal vez, en las emisoras privadas de radio y TV.
De toda esta experiencia, y con talleres al efecto, seguro se irán formando novelistas, poetas, articulistas de medios impresos (y audiovisuales), etc.
Se crearán premios municipales y gubernamentales "Premio Municipal de poesía Comunitaria", entre otros, que converjan en sus publicaciones.
Y así, con el tiempo, habremos logrado el efecto deseado con la IMPLOSIÓN LITERARIA: enamorar a los miembros de las comunidades en el Mundo de la Lectura y del Conocimiento.
IMPLOSIÓN MURALISTA. Todo el esquema anteriormente planteado, aunque más sencillo, se llevará a las Bellas Artes. Con apoyo de artistas, profesores, grafiteros, jóvenes de los colegios y liceos, los propios pintores de "brocha gorda", etc., que no quede un espacio de paredes en las comunidades sin un mural.
Habrá estímulos, premios, reconocimientos en los medios, etc.
IMPLOSIÓN HISTÓRICA. Como parte de la actividad cultural.
Todos sabemos que los métodos tradicionales de dar a conocer la historia son fastidiosos. Más si la tratan de transmitir personas conocedoras, viejos historiadores, que no entusiasman en una materia que casi nadie entiende, más los jóvenes, para qué deben conocerla, y por ello no les interesa.
La propuesta se basa en que cada comunidad investigue, en grupos, y lo más numerosos posible, por cuadras, por manzanas, etc. sobre temas acordes, en principio, con las efemérides locales, luego las nacionales (e internacionales), y preparen en conjunto sus carteleras, su escritos, etc.
Pero que se demuestre que los realizaron con mucha participación, que el mayor porcentaje de pobladores conocen el tema y que se debatirán en miniforos comunitarios.
De ahí los Premios que se establezcan a todos los trabajos.
IMPLOSIÓN: "CONOCIENDO A LA COMUNIDAD". Tratando siempre de Contribuir con la actividad cultural que debe regir al ciudadano del S XXI.
Se desconoce la existencia de Cronistas para los pueblos, sus capitales, caseríos, etc., en las áreas rurales.
La figura de un solo Cronista para una ciudad no es suficiente, se han expandido mucho. Con mayor razón si por dedicarle tanto a la historia patria no le dedican a conocer a la cotidianidad de todos sus personajes, de los más viejos y sus narraciones y cuentos primero, fotografías de los sectores con el antes y el después, etc.
Por eso en las comunidades, se ha ido perdiendo el asentar sus variaciones, conocer urbanísticamente a esos sectores, sus orígenes, sus pioneros, sus personajes, sus cambios, anécdotas, vicisitudes, etc. y por ello nos permitimos sugerir que se creen "CRONISTAS LOCALES COMUNITARIOS".
Hay que realizar un archivo fotográfico de cada comunidad. De los cambios. De sus personajes, filmados y grabados. De sus Obras. Y luego, y si al fin la pego con unas de mis tantas propuestas, almacenar lo relativo a sus IMPLOSIONES.
Abrazo, camaradas. Actuemos sin mezquindades.
¡CHÁVEZ VIVE Y MADURO Y EL PUEBLO SIGUEN!