El 25 de noviembre de 1960, en República Dominicana, fueron secuestradas y apaleadas hasta morir las hermanas Mirabal: Patria, Minerva y María Teresa, por sicarios de la dictadura de Rafael Leónidas Trujillo, quien fue comandante de la Guardia Nacional, cuerpo militar creado por los Estados Unidos para preservar sus intereses en la isla y que en 1930 dio un golpe de estado, proclamándose presidente. Es por ello que el día 25 de noviembre es decretado por la Asamblea General de las Naciones Unidas en su resolución 54/134 del 17 de diciembre de 1999 como el Día Internacional de la Eliminación de la Violencia contra la Mujer. Sin embargo, no basta con la conmemoración de un día al año para cambiar siglos de violencia contra la mujer, quedarnos solo con esta conmemoración y no hacer nada más sería como otorgarle el triunfo a la burguesía, que desea mitigar los males sociales, con simple acciones mediáticas que no construyen el verdadero modelo socialista por el que luchamos, con igualdad de derechos y bajo igualdad de condiciones. Es allí donde la Revolución Bolivariana, bajo la dierección del Comanadante Chávez, en medio de la construcción del socialismo, ha resaltado a la luchas de la mujeres por sus derechos, como sector histéroricamente excluido, detro de la las diversas formas de explotación del caiptalismo.
Para nadie es un secreto, que la mujer ha soportado durante siglos el peso de la dominación, manifiesta con mil caras: violaciones sexuales, represión sexual, discriminaciones sociales, discriminaciones políticas, discriminaciones económicas, vejaciones, abandono, prostitución, apedreamiento, palizas, hoguera, torturas, mutilaciones sexuales, mutilaciones de miembros, desfiguraciones del rostro, secuestro, esclavitud, feminicidio y más y más. Al saber el trato dado a la mujer en la historia, avergüenza reconocer los profundos rasgos misóginos de la sociedad y más aún cuando las manifestaciones descritas arribas siguen sucediendo hoy en dia. Hace poco conmovio al mundo el feminicidio de una joven mujer Aregentina que fue violada y asesinada de la manera más inescrupulosa, lo que llevo a que las voces de las mujeres y hombres de America Latina se alzarán en contra de estos actos aberrantes que todavia continuan ocurriendo y que son fomentados por todo el aparato mediatico que tiene el sistema capitalista. Las banderas que en todas partes del mundo hoy se alzan: #VivasNosQueremos, #NiUnaMenos #Sisemetenconunasemetencontodas
Y es que la humanidad, mujer y hombre estamos bajo un sistema de dominación irracional cuyo principal fin es la acumulación de capital. El sistema es misógino y complejo, tiene un entramado religioso, jurídico, económico y político para ejercer y mantener la dominación. Es misógino en lo religioso, en las tradiciones judeo cristianas el pecado lo empezó una mujer: Eva, prohíben y penalizan el aborto, sin tener la mujer derecho a decidir, son enajenadas de su cuerpo.Hasta hace muy poco, en la legislación de la cuarta república, el administrador de la comunidad matrimonial era el varón, si cometía feminicidio por ver mancillado su honor de hombre al ser "engañado" recibía atenuantes y así otras más. El sistema es misógino en lo económico, por ejemplo, dado un mismo trabajo la remuneración recibida por la mujer es menor que la del varón, y esto ocurre de manera generalizada aún en países de avanzada como Francia. El sistema es misógino en lo político, el voto se le dio a la mujer apenas a mediados del siglo XX, y por otro lado, aún no es proporcional la distribución de cargos públicos entre mujeres y varones, aunque la Revolución Bolivariana ha avanzado en ese sentido buscando que la proporción de candidatas y candidatos tenga un equilibrio.
El sistema burgués de dominación lo manifiesta el varón en el seno de su familia, allí reproduce la dominación, pasa de explotado por el burgués a explotador de su mujer y sus hijos. El sistema burgués de dominación enajena a la mujer madre de sus hijos, y ella es enajenada de si misma porque es bien de un varón del cual portará su apellido. El sistema burgués de dominación abandona a la mujer en la inmensa responsabilidad de la maternidad.
Es por ello que hoy alzamos la bandera de la lucha de la mujer por su emancipación, la cual es una lucha de todos los Revolucionarios y las Revolucionarias, hombre y mujeres que estamos bajo el mismo sistema opresor, y que logrando la emancipación de la mujer, estaremos avanzando en la emancipación de la sociedad. En tal sentido damos un saludo revolucionario desde el FTTSI, a todas las formas de organización que reivindique la emancipación de la mujer, y sobre todo a aquellas nacientes en el seno de la revolución bolivariana, en cualquier trinchera de lucha que halla lugar.
Fragmento de: Reencarnaciones, escrito por Jenny Londoño López, ensayista y cuentista de la Patria Grande, Ecuador.
... Y un día me dolí de mis angustias, un día me cansé de mis trajines, abandoné el desierto y el océano, bajé de la montaña, atravesé las selvas y confines, y convertí mi voz dulce y tranquila, en bocina del viento, en grito universal y enloquecido.Y convoqué a la viuda, a la casada, a la mujer del pueblo, a la soltera, a la madre angustiada, a la fea, a la recién parida, a la violada, a la triste, a la callada, a la hermosa, a la pobre, a la afligida, a la ignorante, a la fiel, a la engañada, a la prostituida. Vinieron miles de mujeres juntas, a escuchar mis arengas. Se habló de los dolores milenarios, de las largas cadenas, que los siglos nos cargaron a cuestas. Y formamos con todas nuestras quejas, un caudaloso río que empezó a recorrer el universo, ahogando la injusticia y el olvido...
"La igualdad social de la mujer no resulta un producto que se alcanza automáticamente con el desarrollo socio-económico, si no se acompaña de un arduo y multifacético trabajo educativo, político e ideológico, que contribuya a borrar barreras culturales, ideológicas y psicológicas, al propio tiempo que las económicas." Fidel Castro
"La mujer como ente, la mujer como ser, la mujer como esencia solo puede liberarse en medio de una revolución socialista, no hay otra forma" Hugo Chávez