Nuestro país vive duros momentos, caídas ya muchas mascaras los enemigos de la Patria se creen más fuertes, incluso se ven victoriosos… lo cierto es que el pueblo, ese diáfano y humilde pueblo vive su realidad, una realidad que se ufana por tratar de ser normal, vivible y cotidiana pero entonces, quienes empeñados están en trastocarla apelan a cualquier método y forma de lucha para imponer los escenarios más tenebrosos, oscuros y dantescos y empujan a nuestra sociedad a una “realidad” invivible donde sea la huida la única alternativa para salvarse de ella.
Siempre la lucha entre las clases sociales ha marcado el ritmo de la historia de la vida, el control y manejo de las riquezas, del uso y abuso del poder, la posesión de los medios de producción, el manejo absoluto del mercado, la cosificación de los recursos naturales, la pauta conductual que imponen los medios de comunicación, la suprema obediencia y resignación que siembran con el aparato educativo son entre algunos otros los métodos y/o medios donde siempre la burguesía manifiesta su poderío para dominar a la clase humilde y obrera es decir al Pueblo mismo.
Ellos solo creen en la explotación al hombre, en la degradación ambiental, en la alineación ideo-cultural, en la pauperización de los servicios, en el empobrecimiento del Pueblo, en el imperio de la ignorancia, en fin siempre será la burguesía el mayor enemigo de la especie Humana.
Oportunamente apareció Hugo Chávez y con gallardía, valentía, inteligencia y mucha convicción fue capaz de enfrentar y derrotar a este horroroso monstruo devolviéndole al Pueblo muchas y tantas conquistas en los diferentes ámbitos de la vida del hombre y la mujer del Pueblo, aposto y lucho por la dignidad social y creyó en la libertad e independencia de su Pueblo, trabajo por, la construcción de una sociedad de iguales y para iguales, vitalizo la esperanza de vivir, construyó la felicidad y amor de su Pueblo.
Lamentablemente partió a la eternidad de los cielos; quedando entonces todavía pendiente mucho que hacer, y es entonces aquí donde está el compromiso de seguir haciéndolo, sin pausa, pero sin prisa, sin temores, pero sin extremas confianzas, hacerlo implica parecerse a él, luchar como él, entregarse como él.
Nuestra hermosa Republica nace todos los días, en su gente, obreros, juventud, en el campo, ciudad, fabricas, escuelas, parques, en el teatro, canchas, en el hogar, en el barrio, allí donde la esperanza es el combustible, allí late el corazón valiente y vigoroso de la Patria eterna y gigante, eso ocurre a pesar de los malvados y perversos crímenes que en su “protesta y resistencia” siembran desde esos sectores de la histórica burguesía. Quemar gente viva, degollar, utilizar francotiradores, asesinar jóvenes, drogarlos, obstaculizar vías, intentar linchar niños recién nacidos y madres, incendiar instituciones y transporte públicos, fomentar el saqueo, cotizar las muertes de funcionarios policiales, alentar el ataque a bases militares entres tantas miserables acciones son pues sus métodos para alcanzar el poder y retornar a “su realidad” para ellos volver hacer lo que en el pasado hicieron por más de 4 décadas; todo eso no solo tiene la mirada complaciente del imperio, también tiene el apoyo logístico, financiero y diplomático de la nación más asesina del mundo.
Ante esa macabra agenda nuestro Presidente del Pueblo Nicolás Maduro hizo (Legal y Constitucionalmente) el llamado a una Asamblea Nacional Constituyente, que tal cual como realizo su llamado, conformación y propuesta de agenda luce pues, apropiada, oportuna y justa ; tratare de realizar algunas consideraciones que humildemente considero pudieran ser útiles para contribuir en esta Campaña Admirable e Histórica.
1. ¿Tiene aceptación popular esta Asamblea Nacional Constituyente?
El llamado a la Asamblea Nacional Constituyente por la cantidad de inscritos evidencia una fuerte aceptación popular.
Abrir ventanas para la escogencia de constituyentistas de los diferentes sectores de la sociedad categoriza entonces a esta Asamblea Nacional Constituyente como un ejercicio incluyente, amplio justo y de suma equidad, contrastando esto a una elección que ignore la especificidad de curules para los sectores, haciendo siempre correr el riesgo que la propaganda, inversión y trabajo político de unos, afecten la amplitud democrática que se busca, es decir, esto garantiza la participación de los diferentes sectores de la sociedad, acaba con la visión elitesca y burguesa de las elecciones convencionales, la Asamblea Nacional Constituyente con su composición derrota a la visión burguesa de la democracia partidista.
2. ¿Qué se busca con la Asamblea Nacional Constituyente?
La Asamblea Nacional Constituyente no busca refundar la república, muy al contrario, persigue que las realidades, beneficios y logros, características sociales e institucionales de la sociedad actual puedan estar incluidas dentro del texto constitucional, para evitar así, malvadas intenciones en un futuro, de querer atentar o eliminar los logros y elementos que le brindan felicidad y estabilidad al pueblo.
El presidente de la República en su propuesta de llamado de la Asamblea Nacional Constituyente, no solamente presentó las bases comiciales, sino que además planteó ámbitos (ejes temáticos) en los cuales se debe desarrollar esta Asamblea Nacional Constituyente.
Reforzar la Constitución del 99, adecuarla y blindarla de cualquier ataque es la magna tarea que tendrán los constituyentistas.
3. ¿Podrá la Asamblea Nacional Constituyente hacer de la Paz una realidad cotidiana?
La Paz no debe ser directamente proporcional al número de desplegado de funcionarios policiales y militares en la sociedad, debe ser la Paz un común elemento de la conducta ciudadana y del metabolismo mismo de la sociedad; su alteración, ataque o vulneración implica un horroroso delito… Es acá precisamente donde se enfilan las baterías de los violentos; la Asamblea Nacional Constituyente podrá en su accionar activar mecanismos que resguarden la pacificidad social, podrá generar alianzas para un mayor diálogo político nacional, podrá construir una agenda con objetivos pacificadores de la Patria; en fin la Asamblea Nacional Constituyente deberá apelar a las mejores y más humanas acciones para que la Paz sea una constante en la ecuación de la vida Republicana.
La Paz si bien es cierto es un derecho, debe y tiene que ser también un deber social que lleva implícito una fuerte carga de responsabilidad tanto individual como colectiva, ante ello la Asamblea Nacional Constituyente debe entonces disponer de mecanismos que hagan de estricto cumplimiento y obligatoriedad dicha cualidad…
En fin sobre la Asamblea Nacional Constituyente reposa ya no solo la esperanza sino también la ineludible responsabilidad de que nuestra Sociedad haga en Paz y de la Paz una realidad que normalice la cotidianidad…
4. ¿Se acabara la escalada inflacionaria, se normalizara la disponibilidad de productos alimenticios y de otros usos?
La infame guerra económica ha mermado grandemente la disponibilidad y alcance de un sin fin de productos o mercancías; la naturaleza de esa guerra es despiadada y su esencia es mutilante, genera angustias, rabias, desespero, frustración, zozobras e incluso atiza la incredulidad o posturas antagónicas en nuestra sociedad , sumado a esto tenemos la realidad de un aparato económico productivo con fuertes limitaciones, obstáculos y debilidades debido muy probablemente a su cualidad rentística petrolera y a una series de vicios y taras que la dinámica capitalista ha inoculado históricamente. El criminal ataque ocurre en la disposición de alimentos, medicamentos y otros productos de la vida diaria, acá también el concierto de algunos “Productos agroindustriales e industria farmacéuticas” la terrible y corrupta cadena de comercialización y neovicios como el bachaqueo, contrabando de extracción y accionar especulativo ha incrementado el escenario de escasez y dificultad para la compra y adquisición de muchos productos.
Corresponderá a la Asamblea Nacional Constituyente poner freno a todo esto, no es tarea fácil, sincerar el aparato y cadena productiva, coadyuvar sin cuestionamientos ni nuevos conflictos en la construcción de una alianza por y para la producción de alimentos y otros insumos de interés y uso nacional; priorizar la política de justa y necesaria inversión, concentrar esfuerzos y recursos en la satisfacción de las necesidades básicas para la vida, definir un modelo de producción en todos los ciclos del año, redireccionar la política de importación, estabilizar la política cambiaria para asi fortalecer el poder adquisitivo de la moneda local, construir convenios fundamentados en la complementariedad justa y oportuna tanto con fuerzas internas continentales como con otras naciones del mundo.
En fin la Asamblea Nacional Constituyente debe garantizar un nuevo arranque, una nueva realidad, con nuevos métodos y acciones que devuelvan la tranquilidad, el sociego, la seguridad y la confianza de y en nuestro Pueblo, teniendo siempre claro que una estabilidad económica siempre garantizara y hará posible una estabilidad social y esto brindara felicidad a nuestro Pueblo.
El gobierno no descansa en buscar soluciones, los CLAP, son muestra de ello, ahora bien la Asamblea Nacional Constituyente debe y tiene que reforzar todas y cada una de las acciones y mecanismo que el gobierno haga para restituir los plenos derechos económicos del Pueblo; debe la Asamblea Nacional Constituyente reforzar la política de dignificación que solo ha logrado la Revolución Bolivariana Chavista.
Más allá de una normalización en la disposición y adquisición de estos rubros, la Asamblea Nacional Constituyente debe garantizar el relanzamiento de un aparato productivo que no sucumba ante sismos económicos, políticos y sociales, debe y tiene que ser el aparato productivo de esta República, un fortalecido tejido económico y social de un gran compromiso y accionar humanocéntrico, he aquí uno de los más grandes retos de la Asamblea Nacional Constituyente.
5. ¿Qué ocurrirá con los logros de la Revolución en lo Social? ¿Cuál es el papel de Asamblea Nacional Constituyente en todo eso?
La Asamblea Nacional Constituyente es la oportunidad cierta de prosperidad y desarrollo en los nuevos tiempo de la Republica, su papel consistirá en darle seguridad de permanencia, existencia y crecimiento de los logros y conquistas sociales alcanzadas y construidas en Revolución; todas y cada una de la misiones, las políticas de atención a discapacitados, pensionados, juventud y Pueblo en general deben y tiene que contar con fundamento Constitucional.
Conocemos y sabemos de la maldad de la burguesía, hemos visto cómo sus aparatos de poder (Asamblea Nacional por ejemplo) arremeten contra los sectores más desposeídos y la misiones sociales, educativas y económicos; su odio de clases los empujan a acabar con los logros de la Revolución, por tal razón la Asamblea Nacional Constituyente debe y tiene que incorporar en el texto constitucional todo lo que corresponda a nuestras misiones.
No podemos correr el riego de dejar brechas por donde la maldad burguesa penetre y dañe la felicidad de la Patria; la Asamblea Nacional Constituyente debe ser garante del legado de Hugo Chávez.
De seguro hay más preguntas y más respuestas sobre la Asamblea Nacional Constituyente, corresponde a todos nosotros con mucha humildad, verdad y valor buscar explicarlas, motivar al Pueblo e incentivar la movilización, esto no es un Reto Electoral, es quizás la Batalla más crucial por el futuro nuevo de la Patria digna…
Vamos a Vencer!!!