El 14 de diciembre de 2014 escribimos una nota (ver aporrea Alexis Arellano) en la que proponiamos una salida a la crisis generada por el ataque al bolívar y a nuestra economía a través del dólar negro.
Hoy tenemos la impresión de que el gobierno se enrumba en esa dirección con el PETRO.
Con toda la fuerza de nuestro espíritu esperamos que se avance en la dirección que propusimos.
No se trata de tener razón o no. Se trata de la urgente necesidad de salvar la patria.
Entre comillas anexamos lo que en ese entonces dijimos.
"Es necesario, entonces entender, que necesitamos oxígeno y retomar fuerzas o se perderá el enorme trabajo que hizo el Comandante Supremo.
Hacemos el planteamiento anterior a manera de introducción, porque con preocupación vemos que el gobierno nacional se plantea como objetivos del 2015 el acabar con el mercado negro del dólar, incrementar la producción nacional, derrotar la inflación y acabar con el contrabando, el acaparamiento y la especulación.
Con todo respeto exponemos que todo eso no es más que la repetición de un mismo objetivo. Objetivo por cierto en el que nunca hemos logrado avanzar ni un paso.
Hasta un párvulo sabe que eso es lo que Venezuela necesita. El problema es el cómo. ¿Cómo carajo vamos a hacer para derrotar a un enemigo que nos tiene contra la pared y no cesa de tirar golpes?
Hablar de todos esos objetivos no es más que redundar. Todos ellos se reducen a uno solo: Controlar un mercado cambiario ilegal que está haciendo pedazos la economía del país, empobreciendo a millones de venezolanos y conduciendo a una tumba sin fondo la revolución por la que murió Chávez.
El contrabando existe porque hay un dólar paralelo. Se compran productos en bolívares se venden en pesos, se transforman estos a dólares y se llevan al mercado negro con una ganancia de hasta 2000%.
La especulación es también consecuencia de la existencia de un mercado paralelo del dólar que impone precios criminales para el pueblo y apetitosos para los apátridas.
Se acapara para contrabandear y para incrementar los precios en función del valor del dólar en el mercado negro.
La inflación es de las más altas del mundo, porque ésta es impulsada y alimentada por el valor de comercialización de unos productos que van al mercado a costo del dólar negro.
La producción no crece porque en la lógica de un empresariado parasitario y rentista el negocio hoy, no es la producción sino el mercado paralelo del dólar.
¿Entonces? Todo se reduce a la necesidad urgente de acabar con el dólar negro… pero ¿cómo?_
Si mañana el gobierno nacional decretara que los salarios de todos los venezolanos se pagaran a nivel del mercado de trabajo internacional en una moneda fuerte y diferente al bolívar (bolívares convertibles, dólares, euros, yuanes, rublos o cualquier moneda que no sea fácil de atacar) y se permitiera la comercializarían de los productos y servicios en la moneda elegida y también a precios internacionales, fenecería el dólar negro y se controlaría casi automáticamente el contrabando de extracción, la especulación, el acaparamiento y la inflación.
Hay que tomar medidas ya. No se trata de olvidarse de intentar derrotar el contrabando, la inflación, la especulación y el acaparamiento; se trata de concentrarse en acabar con el dólar paralelo.
No es nuestra idea exponer aquí a cual moneda deberíamos anclarnos, pues de hecho consideramos que una moneda propia convertible podría estar entre las soluciones. Lo que sí queremos exponer es que el sacrificado, con una medida como esta, no puede ser el pueblo humilde. Su poder adquisitivo debe ser preservado por encima de cualquier cosa.
Eso sí, teniendo claro que el objetivo final es el socialismo, pero que para alcanzarlo se debe tener una patria sana y a salvo. Estamos en un periodo de emergencia y hay que tomar decisiones que enrumben al barco"
Diciembre 2017