El derecho a la vida y la alimentación son derechos fundamentales para todos los seres humanos, los cuales sin ellos no pueden vivir. Los alimentos deben ser suficientes para toda la población y accesibles a todos. Deben ser saludables y duraderos. Estos son derechos humanos que no se cumplen en la mayoría de países, porque el sistema capitalista integrado por comerciantes especuladores que se apoyan en políticos irresponsables no lo permiten. A este problema se le agrega el hambre producida por la guerra, la sequias, las catástrofes naturales. Ocasionando que el planeta sufra por la falta de alimento y muera millones de las personas por enfermedades prevenibles.
Cuando los habitantes de un país del planeta, caso Venezuela y Cuba entre otros, eligen un gobierno garante de la mayoría de derechos humanos, se encuentran con la oposición de los empresarios apátridas e irresponsables que conjuntamente con los políticos corrupto del país respectivo y los EE.UU y sus países lacayos lo sabotean y le imponen un bloqueo económico para derrocar el gobierno, como sucede actualmente con Venezuela. Desde que el Presidente Hugo Chávez ganó las elecciones en el año 1999, somos víctima de un bloqueo económico y acoso político dirigido por EE.UU. Según los informes de las Naciones Unidas Venezuela y Cuba han cumplidos con las metas del Milenio pero con esas dificultades.
Según estadísticas para el 15/09/2017, el hambre mundial alcanzaba el 22% de la población mundial, 1.600 millones de personas padecen hambre, con millones de niños amenazados de malnutrición. Pero el informe reconoce múltiples formas de malnutrición que amenazan la salud de millones de personas. Este incremento de 60 millones de personas con el año anterior, se debe según ellos a la proliferación de conflictos violentos y de perturbaciones relacionadas con el clima. Reconoce también que 300 millones de niños menores de cinco años padecen retraso en el crecimiento (estatura demasiado baja para su edad) mientras que 100 millones su peso es demasiado bajo para su estatura.
La Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible de Naciones tiene como finalidad acabar con el hambre para 2030, pero con estas dificultades será imposible. Conclusión el hambre mundial aplicando el sistema capitalismo no tiene solución. Nosotros que construimos un socialismo venezolano, debemos promover en la ANC la forma de expropiar a todos los comercios expendedores de alimentos que especulan con los precios.