La oligarquía Santanderina Bogotana desde la independencia de Colombia ha pretendido dar a conocer que fue Santander que los libro del yugo español y no Simón Bolívar quien rompió las cadenas de la esclavitud en la Nueva Granada para darle el nombre a la Gran Colombia.
La Nueva Granada tutelaba varios países del cono sur: Argentina, Uruguay, Paraguay, Perú y Ecuador donde todas las decisiones de los gobiernos debían ser aprobadas por el virreinato de la Nueva Granada. Solo fue hasta la llegada de mantuano de alta alcurnia nacido en Caracas llamado Simón Bolívar que viajo a los montes sacros en Roma para hacer el juramento de librar a su patria de las cadenas que la oprimían por voluntad del imperio Español y a otros países de la América Meridional que sufría igual esclavitud.
Hoy los descendientes de la Nueva Granada desconocen y niegan los privilegios y méritos del padre de la patria de Colombia Simón Bolívar, a quien un día la oligarquía de Santa Fe de Bogotá al notar enfermo al libertador lo forzó al retiro. Bolívar para recuperar su salud requerío partir hacia Cartagena donde era muy querido por los pueblos de la costa Atlántica a quienes había librado de la esclavitud. Su penoso viaje le permitió llegar hasta Santa Marta, donde le toco morir en la quinta de San Pedro Alejandrino, pobre y olvidado por los mismos que gozaron sus favores.
12 años después de su desaparición física el 23 de Noviembre de 1842 sus restos mortales salieron de Santa Marta en comboy y conducido hasta su suelo natal, lo integraban la goleta Venezuela, (constitución) la corbeta de guerra Francesa "Ciris" el Bergantín mercante "Caracas" y el Bergantín Igles "Alabastre" el Bergantín holandés "Venus" que se hallaba en santa Marta desde el 16 de Noviembre.
El traslado de los restos del libertador de Santa Marta Venezuela fue decretado por el entonces presidente de Venezuela José Antonio Páez en el ejercicio de su segundo mandato presidencia.
La exhumación de los restos se inicio el 20 de Noviembre en la iglesia Catedral ante el gobernador de Santa Marta, General Joaquín Gutiérrez Posada, presidente de la comisión de Colombia designado por el gobierno de Colombia para ser entregado los restos; del obispo de la de la diócesis; de Don Joaquín Mier; de los comisionados venezolanos, Dr. José María Vargas, general José María Carreño y Mariano Listariz, del consejo municipal de los capitanes de los buques extranjeros, diplomáticos y de otras personalidades y del pueblo que se opuso a la entrega de los restos mortales del libertador. El general Joaquim Gutiérrez Posada converso con ellos haciéndoles ver que fue un pedido hecho por el libertador, que después de muerto sus restos mortales fuesen trasladados a Caracas su ciudad natal. Una vez exhumado los restos del medico Prospero Reberend reconoció los restos del padre de la patria. Se levanto seguidamente un acta y antes de ser trasladada la urna al buque constitución se celebraron solemnes ceremonias religiosas.
Ya en la playa el gobernador de Santa Marta pronuncio un emotivo discurso que concluyo así: "Tomad señores el precioso tesoro que buscáis llevadlo a esa tierra privilegiada y sabed y sepa ella que solo el respeto que el gobierno y el pueblo de Colombia tiene a la ultima voluntad del héroe, es la única fuerza capaz de hacer a la gran Colombia resignarse al sacrificio y vosotras cenizas ilustres que habeis reposado en paz por mas de una década en este suelo que no quisiste que sirviera de asilo eterno, recibid los votos que los colombianos todos elevamos al cielo por vuestro descanso perdurable, General Joaquim Gutiérrez Posadas".