Jueves, 22 de enero de 2019.- Federico Torres, se llamaba el profesor de Sociología I, muy particular, que allá por los 70s, fue el primero que nos hablara sobre ese concepto, el de Anomia, en las frías mañanas del campus de Montalbán, de una UCAB, que al igual que el resto del país ha cambiado, se ha transformado, ya pasó.
Recuerdo que a mi amigo William Laya, con quien comenzamos esa hermosa carrera, le encantaba ese concepto, el después se fue por la vía de los números, su verdadera pasión.
El término anomia (sin acento) es recogido por primera vez en el Diccionario de la lengua española de la Real Academia Española en su vigésima primera edición de 1992 con el significado de 'ausencia de ley' y 'estado de aislamiento del individuo, o de desorganización de la sociedad. (Hispanoteca)
Émile Durkheim desarrolla el concepto de anomia en La División del Trabajo Social y El Suicidio, identificando el momento en el que los vínculos sociales se debilitan y la sociedad pierde su fuerza para integrar y regular adecuadamente a los individuos, generando fenómenos sociales tales como el suicidio.( sic: https://www.google.com/search)
Y el recuerdo de ese concepto de Anomia (ausencia de ley), surge del planteamiento, no tan soterrado, que fuerzas que desconocemos están tratando de imponer en la realidad actual de nuestro país, donde juegan al desorden, al reino de caos y al llamado a la desesperanza.
Pensar que todo lo que está sucediendo: aumento irracional de los precios, intento de un gobierno paralelo, robo de armas, conatos de disturbios, quema de casas (a lo Torquemada), enfrentamientos simultáneos a la autoridad, combinados con los movimientos de presión a nivel internacional que intentan situarnos en la categoría de ''Estado Forajido'', no están relacionados es pecar de inocentes, hay un plan y una estrategia para zambullirnos en una situación de Anomia, de descontrol que nos lleve al punto donde la gente exija un cambio radical, aún sacrificando la libertad individual y los logros alcanzados en este proceso, con tal de obtener un poco de orden y paz social.
Están jugando a la Anomia y todo parece estar diseñado en un plan orgánico y muy bien definido.
La gran pregunta es cómo abortar el camino por esta calle oscura a la que nos están empujando los que juegan a la Anomia y la ineficiencia del gobierno.
