Prof. Pedro Aure, Secretario de la Universidad de Carabobo por más de una década gracias al chavismo, publicó el 18 de junio en su blog una carta de apoyo al Diputado Juan Guaidó firmada por 32 intelectuales venezolanos. Además de apoyar al Diputado Guaidó, dicha carta tiene el motivo adicional de manifestar el repudio de las y los firmantes a los que denominan como "campaña de difamaciones que se tejen en su contra". Pero los firmantes no son ciudadanos comunes y corrientes, en el encabezado se lee "Intelectuales 2019 respaldan a Juan Guaidó".
Lo primero a resaltar es que no lo llaman Presidente ni Presidente Interino en dicho encabezado. Segundo, es que los firmantes no despliegan su firme rechazo en contra de los ataques provenientes del campo del Gobierno y sus seguidores. Realmente su firme rechazo está dirigido a sectores de la misma oposición, a quienes califican de "vociferante minoría". Unido a esta queja denuncian que las redes sociales son usadas para amplificar esos irresponsables y falso comentarios. Reconocen en dicha comunicación el debilitamiento de Guaidó como líder de la oposición, en sus propias palabras: "se está contribuyendo a debilitar al presidente y hacer más difícil su dura lucha en contra de la dictadura". Según estos intelectuales, la larga serie de errores políticos, los actos de corrupción (festines con prostitutas, envenenamiento con burrundanga, lujos y derroche de la ayuda humanitaria, etc.) no tienen nada que ver con la caída en picada de ese liderazgo. No, esa caída se debe a los malsanos comentarios de minorías opositoras que usan las redes sociales como amplificadores. Como era lógico de esperar, las y los intelectuales firmantes arremeten en contra de la libertad de expresión. Claro, no sin antes endulzar la píldora. Después de dar la bienvenida a la libertad de expresión, pasan a calificarla. Tampoco es así que hay libertad para todo, la libertad es solo para ejercerla "responsablemente", entiéndase por responsable no criticar al líder supremo. Según estos intelectuales usted es libre de expresarse, pero solo a favor del Diputado Guidó. A igual lógica recurren cuando se refieren a la corrupción. En este párrafo, las y los intelectuales que apoyan al Diputado Guaidó resultan patéticos. Si bien manifiestan que hay que condenar la corrupción, tampoco podemos exagerar. Y lanzan esta perla, llaman a los venezolanos a "que conserven el sentido de las proporciones, a que mantengan el tono constructivo, a que respeten el liderazgo democrático", y concluyen dicho párrafo afirmando que "debemos luchar por hacer más decente y noble el debate político". Es decir, que lo que se robaron los emisarios del Diputado Guaidó en Colombia es una pequeña proporción de todos los millones de dólares que recibió la oposición para traer a Venezuela convertidos en ayuda humanitaria. ¡Coño! No exageren, tampoco fue tanto. Es decir, que en la parranda con prostitutas solo murió un emisario del Diputado Guaidó de la decena que participaron en ella. Mantengan el sentido de la proporción un solo muerto de 10 no es tanto. Por otro lado, denunciar la corrupción en este momento no es constructivo, déjenlo para más tarde. Además, no se trata de exigir que las y los políticos sean decentes, lo que tenemos que hacer decente es el debate. Bueno, así razona un pequeño grupo de intelectuales que apoyan al Diputado Guaidó en su cruzada contra la dictadura y que como ellos mismos reconocen, cada día está más debilitada gracias a la misma oposición.
Pero hay otro elemento en el blog del Profesor Aure que llama poderosamente la atención, justo antes de dicha carta publica otra carta de 1989 firmada por 911 intelectuales venezolanos. En esa carta le dan la bienvenida a nuestro país a Fidel Castro. La "entrada" en el blog está acompañada de una foto en la que aparecen en primer plano el entonces presidente Carlos Andrés Pérez y el Comandante Castro. Resalta el Profesor Aure que unos cuantos de los firmantes de esta carta también firmaron la carta de apoyo al Diputado Guaidó. Realmente solo seis de los 32 firmantes de esta última carta aparecen firmando también, entre 911 personas, la carta de salutación a Fidel Castro. Hay que mantener el sentido de las proporciones, tampoco es como para exagerar. Lo que si es cierto, y pareciera darle la razón al Profesor Aure, es que el apoyo al Diputado Guaidó se merma considerablemente cada día y es aún cada día menor entre los intelectuales. Para muestra un botón.