La filosofía presente tocante, entre oír campanas y no saber dónde y oír campanas y saber dónde del sabio y del cándido. La filosofía presente tocante, medio aristotélico profundo, entre el entender mal y el entender bien de la gente, entre el distinguir lo bueno y el distinguir lo malo del sentido común humano. La filosofía presente tocante, medio aristotélico profundo, entre el hablar con sabiduría y el hablar sin sabiduría de la estética poesía. La filosofía presente tocante, medio aristotélico profundo, entre el hacer afirmaciones exactas y el hacer afirmaciones inexactas, entre el andar equivocado y el andar acertado, entre el hacer afirmaciones equivocas y el hacer afirmaciones inequívocas de juicios problemáticos y apodícticos. La filosofía presente tocante, medio aristotélico profundo, entre andar errando y andar acertando, entre andar despistado y andar pistado, entre tener conocimiento y no tener conocimiento, del proceder raciocinado humano. La filosofía presente tocante, medio aristotélico profundo, entre el tergiversar y el no tergiversar, entre el confundir y el no confundir, del razonar humano, es decir que no estamos liberados de los casos límite contradictorios caliginosos congruos complementarios. Unos oyen campanas y otros que no oyen campanas, unos que saben dónde y otros que no saben dónde. A pesar de los pesares, y pese a que el concepto de límite matemático es libertad, llevado, el límite matemático, por la liberación de las limitaciones, este de tendencia y los casos límite contradictorios caliginosos congruos complementarios, de tendencia y de trascendencia.

Con digresión y sin digresión, entre oír campanas y no saber dónde y oír campanas y saber dónde, y entre los extremos, la filosofía presente tocante, medio aristotélico profundo, del sabio y del cándido, tanto como entre pretérito y porvenir, asina asín así, entre esencia y existencia, entre natura y persona, entre sujeto y predicado, entre ser y no ser. Del cándido y del sabio, es el dicho, a según el cual: "Los extremos se tocan". Mas y más, aun y aún, jamás y nunca jamás, dijéronnos, el sabio y el cándido, en dónde. Tócanse en la verdad aristotélica profunda, en la filosofía presente tocante del exceso y del defecto de la Gran Moral Aristotélica. Medio aristotélico profundo, que el Estagira arrumbara por mas y más de 30 siglos, hasta el derrumbe de las Torres Gemelas Neoyorquinas, 11/09/2001, con el famoso discurso parlamentario arbolario nefasto nefando, sobre las edificaciones derrumbadas, en que George Bush, dijera: "O estás conmigo o estás con mi enemigo", del principio del tercio excluso aristotélico del Tratado Lógico Órganon Oxímoron, que el imperio capitalista neoliberal, ha sabido meter como aguja de marear a la mayoría, que el capital, en sus intereses ha sabido sacar recia necia reja de la queja en los pueblos explotados. Como tiénese dicho que con el derrumbe de las Torres Gemelas Neoyorquinas, 11/09/2001, y sobre estas, el parlamento nefando discurso georgebushiano del estás conmigo o estás con mi enemigo, en que a la conjunción "O" exclusiva capitalista georgebushiana de la mente retrógrada del ser o noser, salióle criada respondona la conjunción "Y" inclusiva socialista luisalbertomachadoiana de la inteligencia avanzada del ser y del noser. Conjunción inclusiva socialista, en que los extremos se tocan, que no es mas y más que, en el medio aristotélico profundo entre oír campanas y no saber dónde y oír campanas y saber dónde del sabio y del cándido.

Con divagancia y sin divagancia, entre oír campanas y no saber dónde y oír campanas y saber dónde, la filosofía presente tocante, medio aristotélico profundo, del sabio y del cándido, tanto como entre pretérito y porvenir. Del cándido y del sabio, es el dicho, a según el cual: "Entre el dicho y el hecho hay un trecho estrecho arrecho". Mas y más, aun y aún, jamás y nunca jamás, dijéronnos, el sabio y el cándido, en dónde podíase encontrar ese trecho estrecho arrecho. Encuéntrase en el lienzo pictórico blanquinegro del yin y del yang, de la antigua filosofía china, símbolo de tao, en la línea tangencial de la sombría penumbra taoiana de la grata grafía gráfica gratificante, tanto como en lo cóncavo y lo convexo del contradictorio caliginoso 69 cojedeño trazado tangencial onfalócico punto inflexivo umbilical, es ahí en donde está el trecho estrecho arrecho, es ahí en donde está el medio aristotélico profundo, la filosofía presente tocante de todos los casos límite contradictorios caliginosos congruos de los mas y más de 8 millones que hay en la ciudad desnuda borrosa, y, oír campanas y no saber dónde y oír campanas y saber dónde, es solo y sólo uno de ellos.

Con divergencia y sin divergencia, entre oír campanas y no saber dónde y oír campanas y saber dónde, la filosofía presente tocante, medio aristotélico profundo, del sabio y del cándido, tanto como entre pretérito y porvenir. Del cándido y del sabio, es el dicho, a según el cual: "Una contradicción lo implica todo, a partir de ella pude demostrarse lo que sea". Mas y más, aun y aún, jamás y nunca jamás, dijéronnos, el sabio y el cándido, en dónde podía encontrarlo. Encuéntrase en la slash diagonal contrarrecíproca reductio ad absurdum del cuadrángulo rectángulo euclidiano socrático del teorema directo y del teorema indirecto, asina asín así, entre oír campanas y no saber dónde y oír campanas y saber dónde, la slash filosofía presente tocante, la slash medio aristotélico profundo, del sabio y del cándido, tanto como entre pretérito y porvenir. Asina asín así, por para los mas y más de 8 millones de casos límite contradictorios caliginosos congruos que hay en la ciudad desnuda borrosa, y, oír campanas y no saber dónde y oír campanas y saber dónde, es solo y sólo uno de ellos.

Con divagancia y sin divagancias, entre oír campanas y no saber dónde y oír campanas y saber dónde, la filosofía presente tocante, medio aristotélico profundo, del sabio y del cándido, tanto como entre pretérito y porvenir. Del cándido y del sabio, es el dicho, a según el cual: "La optimalidad ortogonal pitagórica". Mas y más, aun y aún, jamás y nunca jamás, dijéronnos, el sabio y el cándido, en dónde podía encontrarlo. Encuéntrase en la slash hipotenusa del triángulo rectángulo euclidiano pitagórico del teorema de Pitágoras. Asina asín así, entre oír campanas y no saber dónde y oír campanas y saber dónde, la slash filosofía presente tocante, la slash medio aristotélico profundo, del sabio y del cándido, tanto como entre pretérito y porvenir. Asina asín así, por para los mas y más de 8 millones de casos límite contradictorios caliginosos congruos que hay en la ciudad desnuda borrosa, y, oír campanas y no saber dónde y oír campanas y saber dónde, es solo y sólo uno de ellos.

Con digresión y sin digresión, entre oír campanas y no saber dónde y oír campanas y saber dónde, la filosofía presente tocante, medio aristotélico profundo, del sabio y del cándido, tanto como entre pretérito y porvenir. Del cándido y del sabio, es el dicho, a según el cual: "Derecho Usual Ordinario Romano y Derecho Inusual Extraordinario Norteamericano" Mas y más, aun y aún, jamás y nunca jamás, dijéronnos, el sabio y el cándido, en dónde podía encontrarlo. Encuéntrase en la conjunción de los dos triángulos rectángulos en la slash diagonal contrarrecíproca reductio ad absurdum del cuadrángulo rectángulo euclidiano socrático del teorema directo y del teorema indirecto, dos pirámides de Kelsen, unidas por las bases, de los casos límites contradictorios caliginosos congruos, Derecho Usual Romano y Derecho Inusual Norteamericano, asina asín así, entre oír campanas y no saber dónde y oír campanas y saber dónde, la slash filosofía presente tocante, la slash medio aristotélico profundo, del sabio y del cándido, tanto como entre pretérito y porvenir. Asina asín así, por para los mas y más de 8 millones de casos límite contradictorios caliginosos congruos que hay en la ciudad desnuda borrosa, y, oír campanas y no saber dónde y oír campanas y saber dónde, es solo y sólo uno de ellos.

Con divergencia y sin divergencia, entre oír campanas y no saber dónde y oír campanas y saber dónde, la filosofía presente tocante, medio aristotélico profundo, del sabio y del cándido, tanto como entre pretérito y porvenir. Del cándido y del sabio, es el dicho, a según el cual: "El torbellino de ideases una dinámica de grupos llevado, el torbellino de ideas, por la imaginación creadora". Mas y más, aun y aún, Cirigliano y Villaverde en La Dinámica de Grupos, imperecederos, aun y aún, dijéronnos, al sabio y al cándido, en dónde podíase encontrar la síntesis del torbellino de ideas. Encuéntrase en la slash diagonal contrarrecíproca reductio ad absurdum del cuadrángulo rectángulo euclidiano socrático del teorema directo y del teorema indirecto, asina asín así, los aspectos límbico antagónicos ambiguos, lo consciente y lo inconsciente, tanto como la optimalidad ortogonal pitagórica, los mejores resultados esperados, asina asín así, entre oír campanas y no saber dónde y oír campanas y saber dónde, la slash filosofía presente tocante, la slash medio aristotélico profundo, del sabio y del cándido, tanto como entre pretérito y porvenir. Asina asín así, por para los mas y más de 8 millones de casos límite contradictorios caliginosos congruos que hay en la ciudad desnuda borrosa, y, oír campanas y no saber dónde y oír campanas y saber dónde, es solo y sólo uno de ellos.

Con digresión y sin digresión, entre oír campanas y no saber dónde y oír campanas y saber dónde, la filosofía presente tocante, medio aristotélico profundo, del sabio y del cándido, tanto como entre pretérito y porvenir. Del cándido y del sabio, es el dicho, a según el cual: "El límite matemático es libertad, llevado el límite, por la liberación de las limitaciones en el punto crucial decisivo al que trascienden y al que tienden los aspectos extremos, que tócanse en el medio aristotélico profundo". Mas y más, aun y aún, jamás y nunca jamás, dijéronnos, el sabio y el cándido, en dónde podía encontrar el punto crucial decisivo de tendencia y de trascendencia, del concepto de límite. Encuéntrase en el centro de slash diagonal contrarrecíproca reductio ad absurdum del cuadrángulo rectángulo euclidiano socrático del teorema directo y del teorema indirecto, asina asín así, en el centro de slash diagonal contrarrecíproca entre oír campanas y no saber dónde y oír campanas y saber dónde.

Con divagancia y sin divagancia, el centro de la slash filosofía presente tocante, medio aristotélico profundo, y, en el centro de la slash medio aristotélico profundo, del sabio y del cándido, el punto crucial decisivo, tanto como el centro de la slash diagonal contrarrecíproca entre pretérito y porvenir. Asina asín así, el punto crucial decisivo, el centro de la slash diagonal contrarrecíproca, al que tienden y al que trascienden por para los mas y más de 8 millones de casos límite contradictorios caliginosos congruos que hay en la ciudad desnuda borrosa, y, oír campanas y no saber dónde y oír campanas y saber dónde, es solo y sólo uno de ellos.

Con divergencia y sin divergencia, el punto crucial decisivo, el centro de la slash diagonal contrarrecíproca, en que amplíase y compleméntase el concepto de límite matemático, en el centro crucial decisivo, y en donde resuélvense todas las paradojas e incertidumbres existente, pues, los extremos se tocan en el punto crucial decisivo, ya que en ese punto partitivo vivo, tanto es lo más cómo lo menos , tanto es la posición como la velocidad, tanto es el todo como la parte, tanto es algo como nada, tanto es lo igual como desigual, lo es en igual valor, en término, en porcentaje, en posición, en medida, en grado en fracción, cantidad, tas con tas, si y solo si en la armónica unidad de contrarios del medio aristotélico profundo, en el punto inflexivo topológico espacial borroso, en que se tiende como se trasciende, en que como tiénese dicho que en el punto crucial decisivo, resuélvense y compleméntanse, en el punto crucial decisivo, en la partícula partitiva viva, en el punto inflexivo topológico espacial borroso, el principio de complementariedad de Niel Bohr, en que la onda y la partícula han de tener las mismas características, como tiénese dicho que se resuelven las paradojas y las incertidumbre, entre otras la paradoja de Zenón de Elea, del veloz Aquiles y la lenta tortuga, compleméntase el principio de incertidumbre de Heisenberg, de la posición y de la velocidad, casos límite contradictorios caliginosos congruos complementarios, extremos que tócanse en el medio aristotélico profundo, en unidad de contrarios sin saltos de talanquera ni vuelos de gallera. Medio aristotélico profundo, arrumbado por Aristóteles por mas y más de 3000 años, y helo ahí, el atraso de la ciencia y la filososfía, pero gracias al parlamentario discurso nefasto de George Bush, hemos llegado a estas reflexiones, en que surgen los casos límite contradictorios congruos complementarios, y, que reducen el hexámetro de Quintiliano a un dístico de Simón Bolivar, natura y persona. Hegel y Marx, impulsan de Heráclito, la tesis y la antítesis, en que ha de haber la sucesión armónica de simultaneidades contradictorias heraclitoianas, de la unidad sintética antagónica de las clases y las leyes de la dialéctica heraclitoiana hegeliana marxista, que este cura ignaro raro cleuasmo asno, trae de la literatura védica upanishad sánscrita, mucho antes haber nacido Heráclito, la modernidad ilustrada originaria einsteiniana, del ser y del noser, y que de la indeterminación védica profunda, sombría penumbra whitmaniana del yin y del yang, surgen iguales elementos contrarios, surgen todos los caos límite contradictorios caliginosos congruos complementarios, en que extiéndese al universo en expansión y al universo en contracción, a las partículas y a las ondas, al macro mundo y al micro mundo, natura y persona, el yin y el yang, pero que se inscriben en el cuadrángulo rectángulo euclidiano socrático del teorema directo y del teorema indirecto, optimalidad ortogonal pitagórica, asina asín así, entre oír campanas y no saber dónde y oír campanas y saber dónde, la slash filosofía presente tocante, la slash medio aristotélico profundo, del sabio y del cándido, tanto como entre pretérito y porvenir. Asina asín así, por para los mas y más de 8 millones de casos límite contradictorios caliginosos congruos que hay en la ciudad desnuda borrosa, entrada y salida, pregunta y respuesta, acción y reacción, estímulo y reacción, insumo y resultado, del esquema básico de la retroalimentación cibernética, inscrito en el cuadrángulo rectángulo euclidiano socrático del teorema directo y del teorema indirecto, y, oír campanas y no saber dónde y oír campanas y saber dónde, es solo y sólo uno de ellos.

Si la filosofía presente tocante, es medio aristotélico profundo, entre oír campanas y no saber dónde y oír campanas y saber dónde del sabio y del cándido. Entonces sea dicho que es la filosofía presente tocante medio aristotélico profundo, entre el entender mal y el entender bien de la gente, entre el distinguir lo bueno y el distinguir lo malo del sentido común humano. Ergo vergo sea dicho que los extremos se tocan en el medio aristotélico profundo. Ergo vergo sea dicho que trecho estrecho arrecho encuéntrase en el lienzo pictórico blanquinegro del yin y del yang, de la antigua filosofía china, símbolo de tao, en la línea tangencial de la sombría penumbra taoiana de la grata grafía gráfica gratificante, tanto como en lo cóncavo y convexo del contradictorio caliginoso 69 cojedeño trazado tangencial onfalócico punto inflexivo umbilical, asina asín así, entre oír campanas y no saber dónde y oír campanas y saber dónde. Ergo vergo sea dicho que una contradicción lo implica todo, a partir de ella pude demostrarse lo que sea, encuéntrase en la slash diagonal contrarrecíproca reductio ad absurdum del cuadrángulo rectángulo euclidiano socrático del teorema directo y del teorema indirecto, asina asín así, entre oír campanas y no saber dónde y oír campanas y saber dónde. Ergo vergo sea dicho que la optimalidad ortogonal pitagórica encuéntrase en la slash hipotenusa del triángulo rectángulo euclidiano pitagórico del teorema de Pitágoras, asina asín así, entre oír campanas y no saber dónde y oír campanas y saber dónde. Ergo vergo sea dicho que Derecho Usual Ordinario Romano y Derecho Inusual Extraordinario Norteamericano encuéntrase en la conjunción de los dos triángulos rectángulos en la slash diagonal contrarrecíproca reductio ad absurdum del cuadrángulo rectángulo euclidiano socrático del teorema directo y del teorema indirecto, dos pirámides de Kelsen, unidas por las bases, de los casos límites contradictorios caliginosos congruos, Derecho Usual Romano y Derecho Inusual Norteamericano, ejercicio histórico borroso, que contiene las dos pirámides de Kelsen, del Derecho Usual Ordinario Romano Bolivariano y del Derecho Inusual Extraordinario Británico Norteamericano, unidas, las dos pirámides, por la base en la slash diagonal contrarrecíproca del cuadrángulo rectángulo socrático, que contiene el punto crucial decisivo, medio aristotélico profundo, al que tiende y del que trasciende el principio aforístico legal: "Quien participa del lucro, debe participar del daño". Este principio trascendental consentido en la base de las pirámides, es el que débesele aplicar a Juan Guaidó, y a su camarilla hamponil por sus santas agitadas, por el robo a la nación, de la empresa y dinero de los venezolanos a Citgo, a Monómeros, a las cúpricas satánicas de brillante oro en barricas de roble en la banca británica, y, tantos otros asaltos de estos asaltantes de camino, que no de comino. Asina asín así, entre oír campanas y no saber dónde y oír campanas y saber dónde. Ergo vergo sea dicho que el torbellino de ideas es una dinámica de grupos llevado, el torbellino de ideas, por la imaginación creadora encuéntrase en la slash diagonal contrarrecíproca reductio ad absurdum del cuadrángulo rectángulo euclidiano socrático del teorema directo y del teorema indirecto, asina asín así, los aspectos límbico antagónicos ambiguos, lo consciente y lo inconsciente, tanto como la optimalidad ortogonal pitagórica, los mejores resultados esperados, asina asín así, entre oír campanas y no saber dónde y oír campanas y saber dónde. Ergo vergo sea dicho que el límite matemático es libertad, llevado el límite, por la liberación de las limitaciones en el punto crucial decisivo al que trascienden y al que tienden los aspectos extremos, que tócanse en el medio aristotélico profundo, el punto crucial decisivo de tendencia y de trascendencia, del concepto de límite, encuéntrase graficado en el centro de slash diagonal contrarrecíproca reductio ad absurdum del cuadrángulo rectángulo euclidiano socrático del teorema directo y del teorema indirecto, asina asín así, en el centro de slash diagonal contrarrecíproca entre oír campanas y no saber dónde y oír campanas y saber dónde. Ergo vergo sea dicho que el concepto de límite matemático, amplíase y compleméntase en el centro crucial decisivo, y en donde resuélvense todas las paradojas e incertidumbres existente. Ergo vergo sea dicho que los extremos se tocan en el punto crucial decisivo, ya en ese punto partitivo vivo, tanto es lo más cómo lo menos, tanto es la posición como la velocidad, tanto es el todo como la parte, el ser como el noser, tanto es algo como nada, tanto es lo igual como desigual, tanto es el tejer como el destejer de Penélope, lo es igual en cantidad y en posición, si y solo si en la armónica unidad de contrarios heraclitoianos en que se tiende como se trasciende. Ergo vergo sea dicho que en el punto crucial decisivo, resuélvense y compleméntanse, en la partícula partitiva viva, el principio de complementariedad de Niel Bohr, en que la onda y la partícula han de tener las mismas características, como tiénese dicho que se resuelven las paradojas y las incertidumbre, entre otras, la paradoja de Zenón de Elea, del veloz Aquiles y la lenta tortuga, compleméntase el principio de incertidumbre de Heisenberg, la posición y la velocidad, casos límite contradictorios caliginosos congruos complementarios, que reducen el hexámetro de Quintiliano a un dístico bolivariano, natura y persona, asina asín así, por para los mas y más de 8 millones de casos límite contradictorios caliginosos congruos que hay en la ciudad desnuda borrosa, y, oír campanas y no saber dónde y oír campanas y saber dónde, es solo y sólo uno de ellos.