La historia la hacen casi siempre los triunfadores, de acuerdo a sus intereses políticos económicos o religiosos.

El 19 de abril de 1810, no sería una excepción. Así como los historiadores nos mintieron y ocultaron muchas cosas, sobre Colón y el ¨descubrimiento de América¨, de un Bolívar héroe de la independencia, que lo fue, pero nos ocultaron ciertas facetas importantes que algunos historiadores no recogen. Lo mismo que el exterminio de cuarenta millones de indígenas latinoamericanos por los españoles provenientes de la ¨madre patria¨ entre otras cosas.

Así tratan de ocultar muchos hechos relacionados con el 19 de abril.

Durante la Colonia, Venezuela había sido un oasis de paz. Nunca pasaba algo importante en nuestra patria. Los blancos peninsulares ocupaban los cargos públicos. Los blancos criollos, descendientes de los conquistadores y encomenderos, controlaban el comercio. Eran muy ricos y usaban como distintivo un manto. Por eso se les llamaba ¨mantuanos¨. Españoles y mantuanos poseían todas las ventajas y oprimían a los indígenas, negros y mestizos.

A pesar de esta situación injusta, el pueblo obedecía y quienes se oponían a esta forma de vida eran apresados. La educación también era privilegio de la aristocracia. Casi toda Venezuela podía considerarse analfabeta.

En el siglo XIX, (desde 1800 en adelante), hay cambios que ya no se pueden detener.

La verdad era que estaban sucediendo acontecimientos nuevos. En 1795 se había sublevado en Coro, José Leonardo Chirinos con un grupo de esclavos. Dos años después algunos blancos criollos liderizados por Gual y España, conspiraron contra el Capitán General. Fueron denunciados y pagaron con sus cabezas la rebelión. Esta crueldad disgustó más a los caraqueños. Por eso el malestar crecía y crecía.

Cuando Bolívar regresa de Europa, en 1807, el General Francisco de Miranda había organizado un año antes dos expediciones militares contra el gobierno español en Venezuela. Los dos intentos fracasaron, es verdad, pero durante el desembarco en la Vela de Coro, logró izar por primera vez la bandera que más tarde se convertiría en emblema nacional. Bolívar conoce todas estas noticias. Además, en París había empapado su espíritu e ideas en las consignas de libertad, igualdad y fraternidad propagados por la Revolución Francesa. Por si fuera poco, los Estados Unidos se acaban independizar de Inglaterra. Entonces ... ?por qué no América Latina y más concretamente Venezuela...?

Simón Bolívar convoca en su casa de Caracas a quienes defienden esos ideales. En ella discuten planes que exigen mayor representatividad criolla en el gobierno. No sueñan aún con la independencia sino sólo con mayor participación.

-Es inadmisible que se nos siga gobernando desde España mediante funcionarios venidos de la Península explican.

El Capitán General descubre la intención de estos revoltosos y ordena apresar a los principales cabecillas. Bolívar se salva de la cárcel porque el hijo del propio Capitán General es amigo suyo. Le imponen una sanción benigna: destierro a la hacienda de Yare, en los valles del Tuy.

Como vemos el 19 de abril tiene sus antecedentes.

España ha sido invadida por las tropas de Napoleón...El Rey Fernando VII ha sido llevado a Francia. La noticia llegó en barco a la Guaira y se extendió por toda Caracas.

Los funcionarios peninsulares, al principio, se asustan. Luego se calman cuando comprueban que los criollos no pretenden aprovechar la ocasión para alzarse. Por su parte, el Capitán General Vicente Emparan es partidario de las nuevas autoridades constituídas en España. Los mantuanos lo acusan de ser afrancesado y suponen que habrá reformas económicas y políticas. En consecuencia sus tradicionales privilegios están en peligro. Temen, sobre todo, que se eliminen los latifundios y la esclavitud que constituyen para ellos la ¨mano de obra barata¨.

Pero los criterios no son unánimes. Sólo los más revolucionarios intuyen que se les ofrece una estupenda ocasión para declarar la independencia. A la burguesía, sin embargo. les asusta la palabra ¨independencia¨. Sospechan que los esclavos y pardos podrían aprovechar el incidente para reclamar sus justas reivindicaciones. Esto no les conviene. Prefieren que cualquier transformación sirva para que todo siga como antes.

Todo lo demás lo sabemos qué si Vicente Salías, el médico Villarroel y sobre todo el sacerdote Madaríaga influyen para que el pueblo vote por él no lo queremos y renuncia el Capitán General Vicente Emparan y le entrega a la junta nombrada por el Ayuntamiento.

La aristocracia ha ganado una vez más la batalla. Ellos son ahora dueños del poder, en nombre del Rey. Todo seguirá como antes.

Bolívar, mientras tanto, permanece retirado en su hacienda.

Algunos califican el 19 de abril, como la antesala de la libertad, hasta cierto punto tienen razón. Pero el pueblo humilde sigue igual.

El historiador e investigador de nuestra historia Angel Grisanti. trabajó siempre sobre documentos inéditos. Complementó sus estudios en archivos y bibliotecas con la visita a aquellos lugares históricos que son materia de controversia, y sobre los cuales emitió opiniones idóneas y veraz. Publicó más de ciento veinte libros. Fue quizás el más fecundo escritor de su generación. Hizo investigaciones en los archivos de Europa y de América. Recorrió toda la América Latina y fue a las fuentes de información.

Él decía que la mayoría de los historiadores eran unos copiones y embusteros que lo que hacían era repetir lo que decían los demás.

Menos mal que en estos tiempos de revolución tenemos escritores valiosos que han rescatado nuestra historia.

La Conferencia Episcopal Venezolana, la misma que estuvo en el golpe contra Chávez, que ha cometido una serie de errores y no ha pedido perdón se preocupa por los sacerdotes fallecidos por el COVIT, pero no se pronuncia en contra del bloqueo criminal que tiene E.E.U.U y sus aliados en contra de Venezuela que no le permite al gobierno obtener vacunas, medicinas ni alimentos. La oportunidad la tienen el 30 de abril cuando beatifican al santo de los pobres el Doctor José Gregorio Hernández.

Deben seguir el ejemplo del Papa Francisco en cuanto a su humildad y estar siempre al lado del pobre, el desposeído el perseguido, los abandonados de siempre. Como lo hizo Jesús.

Cuídense del COVID y cumplan las normas de bioseguridad. Usen sus tapabocas, el distanciamiento y el lavado frecuente de las manos.