La señora Janina Añez, expresidenta a lo "mero macho o macha", como diría un mexicano, está en lo que en el habla popular llaman "la palestra". Es decir, es lo suyo como el tema del momento. Aunque es un decir y hasta espejismo, eso de llegó a la "machimberra", pues es más acertado decir que a ella pusieron porque le hallaron en el camino, y ella sólo "dispuesta y lista". Estaba como en la misma lista y fila donde hallaron a ese extraño espécimen que es Juan Guaidó.
La "justicia" boliviana, ponemos la palabra entre comillas por lo que diremos luego, ha decidido someterla a juicio, acusándola de los delitos que abajo se enumeran, que no son todos, pues no se mencionan la represión, asesinatos, etc.
Al someter al análisis este asunto con la intención de indagar hasta dónde es capaz de llegar la justicia o mejor le dejan quienes en eso manejan los tinglados, poniendo siempre sus intereses o deseos por delante, ¡no vaya a ser cosa!, cabe recordar que la acusada, cuando se produjo el golpe, era, si mal no recuerdo, pero sé sin duda que hay mucho de cierto, segunda vicepresidenta de la segunda cámara del congreso boliviano.
Es decir, en el orden de prelación, había por encima de ella 4 funcionarios o magistrados, que siendo valedera la versión de la "ausencia" del presidente Evo Morales, pese todo el mundo sabe la mentira que en eso hubo, pues simplemente los militares le dieron un golpe de Estado, antes que ella, había 4 personas que debían ocupar ese cargo.
Los golpistas, los militares, pues ellos van de primero porque tienen las armas y la fuerza, alegaron "un vacío de poder", porque decidieron que Evo había ganado con fraude violando la constitución y por no poder reelegirse, apelando a un principio antes derogado legalmente, según el cual no podía ser reelegido y continuar en el cargo, hipótesis, invento o marramucia en la que los apoyó la OEA, presidida por el "santurrón" de Luis Almagro, cumpliendo órdenes emanadas del Departamento de Estado. Es decir, los primeros responsables, antes que la señora Añez, son los integrantes del Alto Mando militar y sobre todo el jefe de este. Pero entre la derecha boliviana, sobre todo esa que tiene su bastión en la ciudad de Santa Cruz, una especie de santuario occidental y como ajeno a Bolivia toda, hay muchos allí en cuentas con la justicia por el mismo asunto. Esa clase que cree que el indio boliviano no es gente o el originario no tiene derechos.
Aparte que el impedimento de no poder reelegirse no existía, Evo volvió a ganar de calle, como demostraron las cuentas e investigaciones posteriores, lo que hasta la propia OEA terminó admitiendo, simplemente porque la aplastante mayoría de los bolivianos lo reeligió, la señora Añez entonces fue impuesta, no es verdad eso de la autoproclamación.
Ahora, cuando se somete a juicio a la señora Añez y sus colaboradores, se habla de los siguientes cargos en su contra:
1.- "El sustituto debía salir del partido ganador; en este caso, del MAS, eso es derecho electoral, esto no se cumplió", pues como dijimos ellas pasó o la pasaron por encima de 4 con derecho a suplir a Evo, en caso que la destitución tuviese pertinencia."
En este caso cabe preguntarse, ¿por qué no se cumplió? ¿Lo impidió la señora Añez? ¿En eso sólo privó la arbitraria decisión del Alto Mando Militar? ¿No vale revisar la conducta del MAS entonces?
2.-"En primera instancia, nunca se ha dado lectura a la renuncia, no se ha tratado la renuncia del señor Evo Morales, del señor Álvaro García Linera, que tenía que ser tratada en la Asamblea (Legislativa Plurinacional)".
"¡Por qué no se dio cumplimiento a esto? ¿También lo impidió el mismo personaje? ¿Qué hicieron las dos cámaras del congreso? En aquella oportunidad, llamé la atención sobre la extraña conducta del MAS, que teniendo mayoría en ambas cámaras, no se manifestó ante Bolivia y el mundo, el hecho que se había hecho una escogencia indebida. Y hasta prefirió ausentarse del congreso o no hacer quórum y menos mayoría, en una conducta que todavía no ha sido aclarada. Se limitaron a explicar algunos que la represión les impidió asistir a las asambleas.
3.- Según la nota que hemos utilizado, "En este caso también están implicados el excomandante en Jefe de las Fuerzas Armadas, Williams Kaliman, quien se encuentra prófugo; el exjefe del Estado Mayor, Flavio Gustavo Arce; el excomandante del Ejército, Pastor Mendieta; el excomandante de la Fuerza Aérea Boliviana, Gonzalo Terceros; y el excomandante de la Armada, Palmiro Jarjury y otros del Alto Mando Militar que coadyuvó a que la Áñez pueda instalarse en el Gobierno en 2019."
¿No hicieron los militares uso de las contradicciones que parecieron surgir en el seno del MAS?
https://www.aporrea.org/internacionales/n371396.html
Dije al principio aquello mexicano de "a lo mero macho", porque se suele decir, la nota citada también lo dice, que la señora Añez se "autoproclamó". Como que ella decidió por su propia cuenta saltar, de ese quinto lugar donde estaba en el orden de prelación, al primero, para hacerse presidenta encargada y hasta el infinito y se pasa por alto que, hubo un número más o menos importante de congresistas, quienes formaban la minoría y unos cuantos del MAS que hicieron quórum, lo que de hecho es un delito y complicidad, pues quienes formaban la mayoría se abstuvieron de asistir a aquel acto de proclamación que ya estaba acordado, entre los militares del alto mando y una macolla política opositora de derecha y unos "masistas" dudosos. Pues según tengo entendido, quien lo dude investigue en las fuentes, no hubo nadie que demandase la ilegalidad de aquel acto de proclamación. Todos se centraron en que se había dado un golpe de Estado al desconocer el triunfo de Evo.
Para que la señora Añez fuese admitida, porque lo fue en el congreso con una mayoría amañada, por imposición militar, factores de la derecha y una conducta todavía no ventilada y menos aclarada en el seno del MAS, donde al parecer hubo gente contra Evo, contrarios a la reelección, pese la legalidad que en eso hubo, se hicieron antes unos tres intentos fallidos
Y esto es más sospechoso, cuando al hablar del ascenso de la señora Añez al poder, se habla de autoproclamación y se pasa por alto que aquel congreso siguió funcionando.
Juan Guaidó, se autoproclamó, con unos pocos diputados a su alrededor y en una plaza pública, sólo con el reconocimiento de un Luis Almagro, con la misma cara de "enratonado" de siempre y los payasos de la diplomacia gringa en los tiempos de Trump. El alto y hasta bajo mando militar de Venezuela en aquello nada tuvo que ver. Pero, por ser una autoproclamación, una payasería, Guiado no pasó de ser eso, un payaso, pese todos los atropellos cometidos con respecto a los bienes nacionales en los espacios de EEUU, la UE y Colombia, delito por los cuales algún día tendrá que comparecer ante la justicia; ese día cuando la fuerza y el natural temor al más fuerte, dejen de ser el fiel de la balanza.
En lo de Bolivia hay algo significativo, lo que indica la nota, por lo menos el "Alto Mando Militar", si no todo, también está siendo sometido a juicio. Si algo uno pudiera objetar en este caso, por lo que dijimos en el título que parece como "una matraca de alcabala", es porque pareciera que el mayor peso de todo recae en la señora Yáñez, habiendo sido ella, sin duda alguna, un simple alfil, de demasiadas agallas, por la ambición y no la audacia o valentía, puesto que en el juicio se le ha visto mucha debilidad. Mientras que unos pocos militares, los del más alto mando, aparecen como acusados de segunda categoría.
En Chile, el ejército pinochetista, no precisamente por orden, quizás si por él inspirados, cometió todos los desafueros habidos y por haber, hasta quitarle los hijos a sus padres y casi nadie pagó por eso. En los mandos, en buena medida, siguieron los mismos o sus alumnos preferidos. En toda América Latina no se sabe de un cuerpo policial más represivo y sanguinario que los carabineros chilenos. Terminado el período de Pinochet siguió siendo el mismo y todavía, pese el proceso constituyente que se desarrolla en ese país y la elección de nuevo presidente, continúa tal como estaba. El mismo cuerpo que inventó y proliferó y hasta exportó a Colombia, eso inhumano, criminal, de disparar balines "inofensivos" de goma a los ojos de los manifestantes, dejando tuerto o ciego a centenares de manifestantes.
Es decir, lo de la señora Añez, es como lo de las alcabalas o las tracalerías que hacen los tipos de la CANTV, esas según los cuales dice un descomunal número de presuntas víctimas, le quitan a uno la línea para vendérsela a otro, a quien condenan a "gozar" de ese servicio por días, pues no tardan en volvérsela a quitar para ponérsela a otro. Y es muy raro el venezolano que no haya sido víctima de eso.
Y es así también lo de las alcabalas. Pues como señalé en artículo días atrás, nada más y nada menos que el comandante Francisco Arias Cárdenas, admitió públicamente que, siendo él gobernador del Estado Zulia, no pudo eliminar el delito o vicio de bajar de la mula a la gente, sobre todo a la que transporta carga, porque le alegaron que "eso iba al pote del comando". Pasó por alto que estaba denunciando un delito del cual se hizo corresponsable; es decir se confesó culpable. Pero en este caso, ante la "justicia", pasa desapercibido, como pasarán muchos que de una manera u otra son responsables de la "autoproclamación" de la señora Añez", como también la de Guaidó.
En lo relativo a CANTV y otros servicios, no es extraño que en eso también haya un pote del comando, como lo de las alcabalas. Y esto, todo esto, tiene un punto de arranque, una causal original, una matriz, el miserable salario de los trabajadores, sobre todo los del Estado, que les incita a esas deplorables y censurables conductas y casi nunca, en estos casos, la justicia no llega lejos por sus cortos brazos.