¿Qué sentido tiene realizar un proceso de primarias sí éste arrojará mismas directivas que hoy exhiben o, peor aún, un candidato presidencial ya vencido por el chavismo? No tendría ningún sentido.
La madurez política del venezolano está siendo puesta a prueba, es muy difícil creer que tras estos 22 tortuosos años de chavismo el habitante de esta desnaturalizada nación no sepa identificar quienes son sus cómplices, quienes han resultado ineptos e incapaces. Por tal motivo, se abre una oportunidad excepcional para repotenciar la lucha por nuestra segunda independencia… Sí ¡Nuestra segunda independencia!
Se debate en el seno de los partidos (aun considerados opositores) sí, por ejemplo, aceptar en las primarias los denominados "alacranes", aceptar o no reelección de autoridades vigentes, entre otros tópicos. Hay mucha tela que cortar, pero todo esto poco importa sí la voluntad de los electores es la que realmente prevalecerá, lo dicho, se aguarda por el juicio ya maduro de los venezolanos, sepan a quien atribuirle las responsabilidades por pedir.
Un gran problema serán las instituciones psuvizadas, estamos seguros avalarán solo las primarias de la autodenominada "Alianza Democrática", pues han sido personajes y partidos de bolsillo para el régimen. Sí la oposición que gira alrededor de Guaidó adelanta sus primarias éste resultado será inhabilitado por el chavismo, la gran pregunta: Entonces ¿Qué hacemos?
Un gran error de hoy es el divorcio entre los partidos y la sociedad civil, hoy más que nunca la sociedad civil asume su rol y, ante el recrudecimiento de los males del país, comienza a ejercer presión a nivel nacional. Comunidades, sectores, gremios, etc. alzan sus voces en acciones de calle exigiendo soluciones a sus penurias, las organizaciones partidistas poco oyen y ven este mensaje, continúan viéndose el ombligo.
Qué distinto fuese se reconstruya esta relación para ejercer acciones conjuntas, que los partidos acompañen a la sociedad civil en su lucha y la sociedad civil se sumase a la batalla de los partidos, por ejemplo, a exigir sean respetadas las primarias opositoras sin CNE.
Para hacer esto posible, las primarias son una gran oportunidad, porque no se está colocando en juego el futuro de estas organizaciones políticas sino del país en general, después de todo, los partidos son los tendones de la democracia.
Ahora bien, se crea la Plataforma Unitaria Democrática, con las 10 organizaciones nacionales más relevantes, sin que regionalmente se excluyan otras. Para muchos es un error la no inclusión de la sociedad civil, sin embargo, explicamos nuestro punto de vista: La plataforma es un encuentro de partidos para solucionar todo lo relativo a su existencialismo, como legitimidad, legalidad, consensos, entre muchos otros aspectos, es decir, es una instancia que busca organizar de forma y fondo a los partidos. Se espera, una vez resueltos estos puntos, se sume a la sociedad civil en una lucha conjunta… tal como se encuentran hoy poco pueden hacer.
La sociedad civil también está llamada a organizarse e identificar el norte de su lucha que, dicho sea de paso, lo tiene mucho más claro que los partidos, pero en líneas generales, esa es la misión de la Plataforma Unitaria Democrática y el por qué no se incluye ningún otro sector nacional por ahora.
Las primarias son una oportunidad de oro sí se logra imponer la visión política madura de los venezolanos, al margen de las instituciones psuvizada y con la fuerza de una sociedad civil activa. Solo así se rescataría el poder del voto. En todo momento la presión social debe estar acompañada de las acciones de partidos relegitimados.