El lunes 5 de septiembre del presente año, la Federación de Psicólogos de Venezuela emitió un comunicado con la intención de hacer del conocimiento público su preocupación por los actos de discriminación de personas que han sido víctimas por su identidad sexual, orientación sexual y expresión de género, así como por las declaraciones públicas a través de distintos medios comunicación que las estigmatizan, en las que se aboga por terapias de conversión, reparativas o ECOSIG (Esfuerzos para Corregir la Orientación Sexual e Identidad de Género) El pronunciamiento lo hacen frente a una situación que afecta la salud mental de la población sexo-diversa y sus familiares, además lo valoran como una falta ética grave cuando es propiciada por algún profesional de la salud mental.
Sabemos que antes de 1973 la conducta homosexual, por un lado, era considerada un delito y por otro, una enfermedad mental, así es expuesto por Cormac Burke en su libro "Relevancia Jurídica de las pericias psiquiátricas. Su aplicación en un ejemplo concreto: la homosexualidad"
Las conductas homosexuales, incluso entre personas adultas, eran consideradas como delitos en la ley civil y se veían como una desviación social inaceptable. Lo mismo se verificaba en la psiquiatría que unánimemente tenía la homosexualidad como una enfermedad psiquiátrica susceptible de tratamiento.
Actualmente se sostiene, y probablemente el público lo cree, que la opinión tradicional que veía la homosexualidad como una condición anómala, ha sido demostrada errónea por el progreso científico. Así, por ejemplo, se lee: «Como resultado de la investigación científica, la Asociación Americana de Psiquiatría eliminó en 1973 la homosexualidad de su lista de enfermedades mentales y en 1980 fue omitida de su Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos mentales» (107-108)
Iguales resultados producto de los estudios científicos a través de los años, durante las dos primeras décadas del siglo XXI ha venido aplicando para el transexualismo.
Ahora bien! En qué consisten estas terapias de conversión
Son "tratamientos" psiquiátricos, psicológicos y hasta espirituales, con la finalidad de cambiar la orientación sexual, la identidad, o la expresión de género de aquellas personas diferentes a una heterosexualidad binaria cisgénero. Sesiones que prometen "curar" a quienes se sometan a las mismas, cuando en realidad son un tipo de tortura para las personas LGBTI+.( http://www.acciongay.cl/que-son-las-terapias-de-conversion/)
[Cisgénero. Término que describe a aquellas personas que se identifican con el género con el que nacieron. Es decir, lo contrario a las personas transgénero. Ambas palabras provienen del latín: el prefijo "cis" significa "de este lado", mientras que "trans" es "del otro lado"]
La página WiKipedia describe la terapia de reorientación sexual:
La terapia de reorientación sexual, terapia de conversión sexual, terapia reparativa o de deshomosexualización son los nombres con los que se conoce a una serie de métodos pseudocientíficos enfocados al cambio de la orientación sexual de personas homosexuales y bisexuales para intentar convertirlos en heterosexuales, o para eliminar o disminuir sus deseos y comportamientos homosexuales. Puede incluir la modificación del comportamiento, la terapia de aversión, la oración y el consejo religioso. Esta práctica está estrechamente relacionada con el movimiento exgay, que es más explícitamente religioso. Los grupos de exhomosexuales tienden a concentrarse en evitar actividades homosexuales y secundariamente (o a veces, en absoluto) en cambiar la tendencia subyacente.
Lo cierto es que estas terapias no son nuevas,
La Asociación Estadounidense de Psiquiatría, en su declaración del año 2000 sobre la terapia "reparativa", afirma: Las modalidades psicoterapéuticas para convertir o "reparar" la homosexualidad se basan en teorías de desarrollo cuya validez científica es cuestionable. .. (https://www.apa.org/pi/lgbt/resources/solo-los-hechos.pdf)
En 2012, la Organización Panamericana de la Salud señaló que las "terapias de conversión" no tienen justificación médica y representan una amenaza para la salud y los derechos humanos de sus víctimas (https://www.ohchr.org/es/stories/2020/07/)
En marzo de 2016 se emitió el pronunciamiento de la Asociación Mundial de Psiquiatría en contra de las terribles «terapias» reparadoras, intervenciones que no solo se han mostrado ineficaces para cambiar la orientación sexual de una persona, sino que resultan muy peligrosas (los riesgos incluyen depresión, ansiedad y comportamiento autodestructivo).
En abril de 2018, la Asamblea de California aprueba un proyecto de ley que considera que las «terapias» de conversión constituyen un fraude al consumidor "La base de la propuesta es simple: si de acuerdo a la evidencia científica esta modificación no es posible, prometerlo supone un fraude"
(https://www.dosmanzanas.com/18/04)
Víctor Madrigal-Borloz, jurista costarricense, es investigador visitante senior en el Programa de Derechos Humanos de la Facultad de Derecho de Harvard, experto Independiente de las Naciones Unidas sobre orientación sexual e identidad de género; al presentar su último informe ante el Consejo de Derechos Humanos, en octubre de 2021, realizó un llamamiento a los Estados con miras a "colaborar para instaurar la prohibición mundial de las terapias de conversión".
El término "terapias de conversión" abarca intervenciones que tienen por finalidad cambiar la orientación sexual de una persona o su identidad de género; sus promotores afirman que estas terapias pueden transformar a las personas gays, lesbianas o bisexuales en heterosexuales, y a las personas trans o de género diverso/diferente a cisgénero, lo que significa que la identidad de género corresponde al sexo asignado al nacer.
Explica Madrigal-Borloz que "Los métodos de las terapias de conversión se basan en la creencia de que las personas de orientación sexual e identidad de género diversa/diferente son de alguna manera inferiores moral, espiritual o físicamente, debido a su orientación o identidad y que se ha de modificar esa orientación o identidad para solucionar esa inferioridad", Para el experto, los niños y la gente joven son especialmente vulnerables a estos métodos, ya que la exposición temprana a estas intervenciones se asocia a sentimientos de ansiedad, depresión, desórdenes de estrés postraumático, ideas suicidas e intentos de suicidio.
Muy enfáticamente puntualizó Madrigal-Borloz "La decisión de someter a un niño a prácticas de conversión nunca redundará realmente en su beneficio",. "Los padres deben tomar decisiones sobre sus hijos bajo la premisa del consentimiento informado, que implica el conocimiento de la verdadera naturaleza de la práctica, su incapacidad para conseguir realmente una ‘conversión’ y las pruebas que apuntan cada vez más hacia la posibilidad de que su aplicación cause daños físicos y psicológicos a largo plazo".
Con la idea de este último párrafo me quedaré, "el sometimiento a los niños".
A grandes rasgos hemos revisado la situación de las terapias aplicadas a adultos, quienes ya habían adoptado un patrón de conducta sexual diferente al aceptado socialmente durante siglos; con frecuencia en estos temas quedan pendientes algunas preguntas: Se nace o se hace? Quiere la persona en verdad cambiar su patrón o es inducido?
Qué hacemos?
Por un lado, las Terapias de conversión hacia la adopción del patrón heterosexual, cuando se es Adulto y por otro lado, llamémoslas también "terapias de conversión" dirigidas a niños, encaminadas hacia influir en ellos desde temprana edad, modificar las creencias y actitudes que hasta el momento de la intervención hayan acumulado, acerca de su sexo, su género, los roles y experiencias sexuales, producto de la interacción con su medio familiar, comunitario, escolar y social en general. Estamos siendo testigos de cómo se induce a través de videos y otros medios virtuales la necesidad de ser del sexo contrario, quitándoles la oportunidad muy natural de vivir su etapa transitoria de evolución sexual, tal como nos ha enseñado la Sexología, a través de estudios científicos en el área de la biología, la psicología y el comportamiento sexual en los seres humanos.
Sí, han existido y existen los transexuales, pero es que últimamente pareciera que lo conveniente es incrementar altamente su número, no es cierto que todos los niños deben sentir ser del otro sexo y estamos siendo invadidos por estímulos aplicados socialmente para que así ocurra. Ante estas terapias también de conversión, debemos pronunciarnos; la Federación de Psicólogos y la Federación o Asociaciones de Orientadores, así como los Docentes
La Federación de Psicólogos de Venezuela reveló que este tipo de terapias de conversión no están permitidas en el mundo dado a que vulneran la libertad de las personas a la autodeterminación. Reporta la existencia de estudios que demuestran los efectos nocivos en la salud física y mental de los individuos que son sometidos a este «tratamiento», amplían la posibilidad del desarrollo de trastornos depresivos, ansiedad y suicidio. También, apliquemos éstas consideraciones a la población de niños y jóvenes, igual aplica.
Vemos como las "terapias" se cruzan en su dirección.