"Comprensión y respeto, eso es lo Importante para convivir con los demás, y sobre todo ¿sabes qué? No creer que uno es mejor que nadie" (Mafalda).
El alto representante de la Unión Europea para los Asuntos Exteriores, el español, Josep Borrell, aseguró que: "Europa es un jardín. Hemos construido un jardín", donde "todo funciona". El Viejo Continente es "la mejor combinación de libertad política, prosperidad económica y cohesión social que la humanidad ha sido capaz de construir: las tres cosas juntas".
Al mismo tiempo, señaló que "la mayor parte del resto del mundo es una jungla, y la jungla podría invadir el jardín". "Los jardineros deben cuidarlo, pero no van a proteger el jardín construyendo muros. Un bonito y pequeño jardín rodeado de altos muros para evitar que entre la jungla no va a ser una solución". Detalló que "la jungla tiene una fuerte capacidad de crecimiento, y el muro nunca será lo suficientemente alto para proteger el jardín". En este contexto, "los jardineros tienen que ir a la jungla" y "los europeos tienen que involucrarse mucho más con el resto del mundo. De lo contrario, el resto del mundo nos invadirá, por diferentes vías y medios".
Indicó que el bloque comunitario no puede "sobrevivir como una excepción" y cerrarse al mundo. Europa tiene que apoyar a otros países que se encuentran en una situación desesperada.
Ya son varias las veces que este señor compara a Europa con "un jardín" y que debe protegerse de la "jungla", recurriendo para ello incluso a herramientas militares, que no son instrumentos caprichosos sino que son "necesarios, imprescindibles para la supervivencia".
En esas expresiones está presente el desprecio hacia el otro y la ausencia de la alteridad, propio de la ciencia y el pensamiento eurocéntrico. Es un discurso racismo e imperialista y refleja puntos de vista, ya hoy, obsoletos sobre la superioridad europea.
Pero auscultemos un poco ese jardín
Estados Unidos, el gran impulsor de la guerra en Ucrania, ha logrado dos de sus objetivos. Uno, que los países de la Unión Europa se conviertan en súbditos de su política, y dos, debilitar la economía de esos países y así anularlos en la competencia internacional.
Los gobernantes europeos no han hecho otra cosa que seguir las orientaciones de imponer numerosas "sanciones" contra Moscú, renunciado a los abastecimientos del gas ruso. Pero todo indica que la Zona Euro se encuentra en una situación peligrosa que puede costarle hasta su posible existencia.
En Alemania, la mayor economía de la región y del bloque, se está sintiendo las consecuencias de seguir ciegamente los dictados de EEUU. Los titulares de prensa insisten constantemente en que existen crisis energética, climática y económica en el país.
La renuncia a utilizar los gasoductos Nort Stream 1 y Nort Stream 2, por donde pasa el combustible ruso con precios más barato y asequible, ha tenido un efecto boomerang para el desarrollo de la nación, que está registrando déficit en la balanza comercial mensual. La última vez que ocurrió fue en 1991. En mayo de este año sus exportaciones alcanzaron 125.800 millones de euros y las importaciones 126.700 para una pérdida de 1.700 millones, mala noticia para un país cuyo crecimiento depende principalmente de las exportaciones.
Por su puesto, si la "locomotora europea" se debilita, también lo hace la zona euro, cuya moneda común cayó por debajo o en paridad con el dólar, su nivel más bajo en 20 años. En esta zona ya la inflación alcanzó un récord de 9,1% cuyos componentes principales fueron, energía (38,3 %); alimentos, alcohol y tabaco (10,6 %); bienes industriales no energéticos (5 %) y servicios (3,8 %).
La compañía Gasindustrial, revelan que el precio del Gas Natural Licuado (GNL), que llega desde Estados Unidos a Europa, se paga entre 40 y 50 % más caro que el que se recibe desde Rusia y cada vez Washington se aprovecha más debido a la paralización de los dos Nord Stream..
Miles de personas marchan en Berlín y varias otras ciudades alemanas (Dresde, Dusseldorf, Fráncfort, Hannover y Stuttgart), para protestar contra el aumento de los precios de la energía.
En Rumanía, miles de personas protestan contra el precio de la energía, de los alimentos y de otros productos básicos que está sumiendo a millones de trabajadores en la pobreza.
Los ciudadanos franceses también han salido a las calles para exigir aumentos salariales acordes con la inflación. Los trabajadores ferroviarios y de transportes, maestros de secundaria y empleados de hospitales han reclamado alzas salariales y protestar por la intervención gubernamental en las huelgas de los trabajadores de refinerías que han causado escasez de gasolina.
En Praga, República Checa, los inconformes han protestado contra la gestión del gobierno ante la crisis energética.
En el Reino Unido, los empleados ferroviarios, enfermeras, trabajadores de puertos y abogados, han protagonizado una serie de paros para reclamar una subida de los sueldos que los ajuste a una inflación que alcanza su peor dato en los últimos 40 años. Allí, muchas compañías se han declarado en estado de insolvencia tras los bloqueos al gas y al petróleo ruso. Un estudio de la Oficina Nacional de Estadísticas inglesa destaca que se han registrado cifras de cierre de empresas en este año similares a las reportadas en 2009 durante la crisis financiera mundial.
En España exigen a las autoridades recalcular las pensiones, los salarios dignos y la reducción de la desigualdad de género en los pagos.
En Polonia, Francia, Alemania y otras naciones han comenzado a utilizar carbón y leña para calentar los hogares.
Manifestantes de las principales ciudades italianas protestaron contra la política de su Gobierno, exigiendo a las autoridades que abordaran los graves problemas socioeconómicos del país causado por la subida de los precios de la energía y los alimentos.
Así que la "procesión va por dentro del jardín".
El jardinero europeo está en estado vegetativo.
Europa construyó ese "jardín" a través del saqueo bárbaro de la "jungla" pero si algo debería tener claro es que la era del colonialismo terminó hace mucho tiempo. Hoy existe una lucha por mundo multipolar y la UE debería, de una vez por toda, aceptar las realidades para que no muera de mengua.
Desde los Emiratos Árabes Unidos (EAU) se dijo que el discurso de Borrell era "racista, inapropiado y discriminatorio". La portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, María Zajárova, resaltó que "el jardín" europeo se ha formado "a expensas de la actitud bárbara ante el saqueo" del resto del mundo. "Permítanme continuar la analogía: el jardinero europeo está en estado vegetativo", agregando que "el sistema más próspero de Europa tiene sus raíces en las colonias, que fueron oprimidas sin piedad".
Se ha dicho que esta lógica de la segregación y la filosofía de la superioridad eran las que sustentaban el fascismo y el nazismo.
La llegada del invierno a Europa presagia un descenso socioeconómico hacia una vorágine de oscuridad, inimaginable hace solo unos meses en el supuesto "jardín" de la humanidad, tan lejos de los estruendos de la "selva". Pues a partir de ahora la barbarie empieza desde casa. Y los europeos deberían agradecer al aliado estadounidense por ello, manipulando hábilmente a las élites temerosas y vasallas de la UE.
El primer ministro de Hungría, Víctor Orbán, dice: "ideamos un plan para cavar un hoyo para los rusos, pero caímos en él".
Una UE, desindustrializada y enredada en varias capas de guerra interna tóxica, es el escenario perfecto de EE.UU., y así convertir al país norteamericano como un destino ideal para el Capital Global, incluido el Capital Europeo.
Mensaje desde la jungla
La Jungla tiene nombre femenino, es un terreno poblado por una vegetación muy abundante, espesa y una fauna muy variada. En la jungla, hay culebras, hay mucho monte, pero también existe mucha dignidad y con voz propia les decimos a los voceros del jardín:
-Rescaten su ontología, no sigan siendo el gallinero de EEUU. Sigan el llamado del eurodiputado Mick Wallace, miembro del Parlamento Europeo (PE) por Irlanda: "Es hora de que los líderes de la UE dejen de doblegarse ante el imperialismo estadounidense".
-Dejen a la jungla, con sus montes y culebras, gente de paz, tranquila, que, desde aquí, si hago se tiene claro, es que no somos invasores de nadie, respetamos la otredad y la alteridad. Y la historia pasada y presente lo puede evidenciar.
-Así que señor Borrel, está bueno que usted, como español, sea un borrego, pero piense en los otros países y pueblos. No se olvide que también fueron jungla, que desde el antiguo imperio romano, se fraguó la conquista del mundo a cualquier precio. Hoy, el colonialismo es de otro tipo; tal vez sin espadas, sin cañones, pero con otras armas que parecieran inofensivas. Se podría establecer una comparación entre esas dos metáforas: el jardín está supeditado al "gusto' del jardinero; por el contrario, la jungla es natural y las relaciones que allí se dan son naturales y espontáneas. Solo falta que nos dejen ser.
Para finalizar, dejaría esta inquietud para la reflexión. España ¿Será parte del jardín o de la jungla? La respuesta de un francés o alemán estaría clara.