"No vemos a los demás como son, sino como somos nosotros" Immanuel Kant (1724 -1804)
DEDICATORIA:
Con profunda tristeza y dolor humano, dedico este artículo a Leoner Azuaje Urrea (†), quien fue apresado y sometido al escarnio público. Culpable o no, quizás, por ansiedad, angustia o vergüenza, decidió tomar una trágica decisión que le impidió terminar de cumplir su misión en la vida. A él, donde quiera que su espíritu y su alma se encuentre, y a todos sus familiares y amigos, con lágrimas en mis ojos, - a pesar de no haberte conocido - le ofrezco disculpas porque este proceso, del que tanto nos vanagloriamos y enorgullecemos, no supo ayudar a formarlo política, ideológica y, sobre todo, ética, moral y espiritualmente, para no tener que llegar a hacer lo que hizo.
¿TOD@S SOMOS CORRUPT@S?
Ahora parece que tod@s somos corrupt@s. L@s Chavistas y "chavistas"; los mal llamados maduristas y "maduristas". E incluso, los ramiristas e izarristas. L@s opositores de aquí y de acullá. De la IV y de la V República. Son corrupt@s. Hasta l@s indiferentes, oscilantes o abstencionistas, están involucrad@s por hacer silencio cómplice.Tod@s, sin excepción, por lo visto SOMOS CORRUPT@S. Nadie se escapa.
Un ejemplo: Tareck El Aissami denunció – con supuestas pruebas en las manos – a Rafael Ramírez Carreño (RRC) de haber sido corrupto durante buena parte de su gestión. A su vez, RRC dice que Tareck es el corrupto más peligroso y maloso que hemos tenido ¿Quién de los dos dice la verdad? ¿Será que ambos tienen razón? ¿Qué opina?
Otro ejemplo: La oposición ha acusado al gobierno de ser uno de los gobiernos más corruptos en la historia de Venezuela. Fueron capaces de acusar a Rafael Ramírez Carreño de corrupto e incluso le abrieron una investigación en la Asamblea Nacional. Mientras tanto, el presidente Chávez y el propio Nicolás Maduro, lo defendían. Ahora resulta que el gobierno acusa a RRC y a la oposición vinculada con Guaidó no sólo de haber robado en CITGO y Monómeros sino de haber robado otros bienes del Estado y haberse robado muchos de los aportes asignado por los EEUU para financiar, por ejemplo, la llamada "ayuda humanitaria". Se les ha recordado, además, que durante los 40 años de la llamada "democracia" no metieron a nadie preso. Y fomentaron la impunidad ¿Es esto así? ¿Quién tiene la razón?
PROYECCIÓN: PERSONAL, INSTITUCIONAL Y POLÍTICA
Pareciese que estuviéramos frente a lo que pudiéramos llamar una PROYECCIÓN POLÍTICA. ¿Qué vamos a entender por este término? Preguntémonos ¿Qué es y en qué consiste la proyección a nivel personal en psicología y cómo se manifiesta? Y así lo entenderemos.
¿Qué es y quién descubrió este mecanismo psicológico?
La proyección es un término del psicoanálisis, atribuido inicialmente a Sigmund Freud que luego fue ampliado y mejorado por otros autores, tales como, Carl Jung y Marie-Louise von Franz, quienes dieron un vuelco a la teoría de la proyección psicológica como mero mecanismo para proteger nuestro ego y/o personalidad. Argumentaron, en su momento, que la proyección psicológica también se usa para protegernos del miedo a lo desconocido. La proyección psicológica, a nivel personal, se define como un mecanismo que consiste en atribuir a otra(s) persona(s) lo que nos pasa a nosotr@s mism@. La proyección es una forma de funcionamiento que se observa en personas que atribuyen a otro(s) lo que le está ocurriendo a sí mismo. Normalmente, lo hace de manera inconsciente. Nos proyectamos en su espejo.
"La proyección es un comportamiento defensivo que protege nuestro "yo" canalizando hacia los demás aquellos sentimientos, motivos o impulsos que nos resultan inaceptables. Cuando creemos que determinados pensamientos, sentimientos, impulsos o comportamientos son negativos y no encajan en la imagen que tenemos de nosotros mismos – porque nos convierten en una persona poco amable, indigna, inferior o mala – negar su existencia es una manera de evitar la disonancia cognitiva y el malestar que pueden generar."
A menudo identificamos, vemos o calificamos cualidades desagradables y negativas en otr@s. Mismas que odiamos en nosotr@s mismos. A través de un mecanismo inconscientemente.
Tomemos el ejemplo clásico de Freud: un hombre que ha sido o piensa serle infiel a su esposa, pero que la acusa de engañarlo o vive pensando que ella le engaña. Cuando el infiel en pensamiento u obra es él.
La proyección psicológica puede ocurrir en una diversidad de contextos, ya sea como un incidente aislado o un patrón que se repite de manera regular en una relación. Generalmente este mecanismo se activa para evitar explorar los sentimientos subyacentes. Por ejemplo, una persona puede acusarnos de comportarnos de manera egoísta o de estar enfadados cuando en realidad el egoísta o enfadado es él/ella. Puede calificarnos o juzgarnos, sin prueba alguna, de ladrón, bandido o corrupto, cuando en realidad quien es ladrón, bandido o corrupto es él. O, al menos, tiene miedo de que descubran esa debilidad en él.
Si Tareck El Aissami acusa a Rafael Ramírez Carreño de actos de corrupción (con pruebas o sin ellas) y, a su vez, Rafael Ramírez Carreño acusa a Tareck El Aissami de bandido, criminal y corrupto (con pruebas o sin ellas) ¿Quién tiene la razón? ¿El que tenga las pruebas contundentes? ¿Al ojo por ciento? ¿Andamos de cacería de brujas? Lo hacemos para desquitarnos lo que nos hicieron ¿Será que ambos tienen la razón y ambos son unos bandidos y corruptos?
¿QUIÉNES SON LOS VERDADER@S CORRUPT@S?
Cuando el gobierno señala a la oposición de ser unos no sé qué y, a su vez, la oposición asegura que tales líderes políticos o funcionarios públicos son corruptos ¿Ambos tienen la razón? ¿Cómo podemos develar la verdad verdadera? ¿Cómo descubrir si el imperio estadounidense, el departamento de estado y el departamento de justicia de los EEUU tienen la razón o no? ¿Acaso no han juzgado y sentenciado casos que aquí se habían denunciado y otros se habían mantenido ocultos? ¿Por qué los EEUU han declarado como narcotraficantes y bandidos a Tareck, Diosdado, Maduro y otros? ¿Estarán haciendo proyección o tienen pruebas contundentes? Por otro lado: Quiénes seguimos confiando en líderes fundamentales de este proceso y no creemos, ni nos comemos el cuento mediático, de que ellos sean narcotraficantes o corruptos ¿Estaremos haciendo proyección de nosotros mismos? ¿Proyectamos en ellos lo que nosotros somos o cómo nos comportaríamos? ¿Será por eso que nos cuesta pensar que Maduro, Diosdado, Tareck o Freddy Bernal – por nombrar algunos en los que hemos confiado y confiamos plenamente – puedan ser o puedan llegar a ser corruptos? ¿Por eso nos ha costado tanto aceptar que Rafael Ramírez Carreño sea un bandido como lo pintan? ¿Dónde están las pruebas? ¿Por qué nos hemos tardado tanto en proceder si existen pruebas contundentes? Si Tareck es inocente y sus "amigos" o cercanos lo traicionaron ¿Qué vamos a hacer? Por el contrario: Si Tareck El Aissami es culpable ¿Qué estamos esperando para el ¡Cúmplase!? ¿Lo vamos a perdonar? ¿Por qué no perdonamos entonces a RRC? ¿Por qué no pudimos perdonar a Raúl Baduel y dejamos que muriera en la cárcel? ¿Miguel Rodríguez Torres? ¿Por qué hemos permitido que jóvenes lleguen a corromperse e incluso llenos de ansiedad y angustia, tal vez, de pena y vergüenza prefieran suicidarse?
Quisiera escribir muchas cosas más pero creo que es suficiente por hoy. Sé que me extiendo mucho en mis artículos y, seguramente, se hacen fastidiosos. Sólo que son tantas las cosas que quisiera expresar y compartir. Por ahora, sirva este artículo para aplacar mi arrechera, mi dolor, mi tristeza. Sincera. Por ver tantas cosas que me dan rabia. Repulsión. De ver a compañeros y camaradas que antes compartían los mismos sueños, esperanzas y proyecto de transformación diciéndose uno a otros que el culpable no es él sino el otro. Dandole, en el fondo, la razón al imperio y a la oposición. Que nos lo ha venido alertando desde hace años. Ha estado haciendo proyección política y personal. Dando malos ejemplos a una juventud que llegó para que les enseñáramos el camino de la redención de nuestros pueblos. Para hacerlos verdaderamente libres. Prósperos. Sensibles. Humanos. Decentes. Humildes. Decorosos. Íntegros. Honestos. Corajudos. Valientes. Buenos. Solidarios. Amorosos. Amables. Radiantes. Para que pudieran VIVIR VIVIENDO. Para morir con dignidad. No para que fueran un@s corrupt@s. Dieran un mal ejemplo social.
Hemos fallado ¿Cuándo coño vamos a aceptarlo y corregir?
Termino con este pensamiento de Herman Hesse (1919)
«Cuando odiamos a alguien, odiamos en su imagen algo que está dentro de nosotros» Quizás, cuando amamos, pudiera ocurrir lo contrario.
«…nada fácil aceptar que todos proyectamos en alguna ocasión. A veces lo hacemos sin darnos cuenta, pensamos que el defecto está ahí fuera y no en nosotros mismos»
REFERENCIAS:
Cómo detectar la proyección: ¿son sus sentimientos o los tuyos? | Psychology Today en español