A nivel mundial la derecha viene capturando posiciones, las cuales una vez capturadas se convierten en fortines de propagación de su plan global de arrasar con cualquier propuesta desde el ámbito politico social que sitúe a la gente como protagonista y en primera fila, la otra cara de la moneda es la pérdida de la identidad de los sectores de la izquierda, se debaten en indefiniciones y claudicaciones, actitudes que se cubren con el manto de un progresismo, término impreciso, vago, débil por su indefinición y por la falta de acompañamiento al sujeto histórico que debería ser acompañado por estos sectores, sujeto histórico, que está sufriendo en carne propia los embates de los últimos años, caracterizados por las limitaciones de la pandemia y de una crisis financiera que aunque han pasado 15 años, continúan sus coletazos, crisis donde el gran capital financiero y especulador, no asumió su responsabilidad y que no termina de finalizar.
A la derecha con sus operadores políticos jerárquicos, los medios de comunicación y el poder judicial, atacan mostrando supuestas realidades que se harían presentes de ganar sectores cercanos a la izquierda, el coco del comunismo aparece de nuevo en su narrativa, una política de mostrar supuestas realidades, pero tienen la ventaja mediática, que es el que muestran pero no demuestran la veracidad de sus campañas, eventos globales como es el caso de la ola de inmigrantes en Europa y Latinoamérica, son ventanas que las venden no como consecuencia y el fracaso de la explotación imperialista en países tercer mundistas, no, esa no es la narrativa, la inmigración la reflejan como el fracaso de un modelo político por un lado y por lo tanto la inmigración apuesta por los países "exitosos" (USA y Europa) es una muestra del éxito de esos modelos económicos. El ala conservadora una vez obtenido el triunfo, y cuando los humildes que los apoyaron ven su verdadera faz, es cuando los pueblos, en una forma tardía reaccionan, caso Ecuador.
Por otro lado desde la izquierda copian elementos que pertenecen a la derecha institucional como herramientas de gobernar, debilitando su base histórica de apoyo, así es como la liberalización de la economía, ondea en banderas de izquierda y propuestas principistas de la derecha global se hacen presentes en ejecutorias políticas desde la izquierda, propuestas como la maquila, como estrategia de producción, terminan golpeando la soberanía, el bienestar social y la auto estima de los pueblos.
La izquierda para recuperar terreno, para contrarrestar el poderío mediático y judicial del bloque hegemónico histórico, debe afianzar con mucha fuerza, con propuestas, reforzar su identificacion con los sectores vulnerables de la sociedad, que son las grandes mayorías, caso contrario esa ola conservadora cabalgando sobre el poderío mediático y judicial terminará arropando al mundo en lo que resta del siglo XXI, destruyendo lo que queda del mundo y su bio diversidad.