"La conciencia de aquellos

que nada bueno traman secretamente,

suele acusarlos de su crimen

antes de que se les descubra"

Sófocles

El momento que estamos viviendo producto de la reacción verbal de los máximos dirigentes de la oposición, después que el gobierno apagó el incendio desatado por la INHABILITADA María Corina y su improvisto auxiliar Edmundo Urrutia, cuando pretendían convertir el país en un manicomio, los ha llevado a repetir tantas mentiras, como en el pasado reciente, pero ahora con la velocidad y desesperación del que escucha los pasos de sus acusadores, con pruebas suficientes para enjuiciarlos por la cantidad de muertos, heridos y destrozos a las propiedades públicas al servicio del interés colectivo, a pesar de la intromisión alcahueta del gobierno de los Estados Unidos, para que les dejen quietos sus títeres.

Los informes del fiscal general de la República Tarek William Saab, no dejan ninguna duda de los culpables de tan abominables hechos y eso fue apenas el comienzo de lo que, no sabemos si fue parte de una celebración de algo, que estaba muy lejos de la realidad o por el contrario era la reacción del perdedor´, después de cantar fraude, como han hecho en todos los procesos electorales realizados, desde la llegada del comandante Chávez al poder, con la particularidad, que en los momentos de salir favorecidos han aceptado los resultados para luego volver con la misma cantaleta: fraude, fraude.

Lo últimos informes no son para quedarse de brazos cruzados, por la gravedad de los hechos y los resultados: 23 muertos y 192 personas heridas, del cual 97 pertenecen a cuerpos de seguridad del Estado, pero, además dentro de esas investigaciones no aparece ninguna denuncia contra ningún cuerpo de seguridad del estado venezolano. Todos los videos analizados provienen de la misma oposición o de personas, que lograron arrastrar para utilizarlos en sus intentos criminales y, en momentos de locura pasaron a celebraciones tan ingenuas haciendo grabaciones para después enseñarlas, como trofeos, sin terminar de entender, que ellos mismos estaban presentando las pruebas de sus delitos.

¿Qué se puede esperar de los cabecillas de estos hechos? De María Corina, todo el mundo sabe de lo que es capaz, ya que, su pasado por las guarimbas con muertos y heridos la delatan, pero el imperialismo tiene los recursos de sobra para convertir estos monstruos en tiernas ovejitas y la cara la ayuda. Edmundo González Urrutia, ni la cara de viejo inofensivo lo salva de las acusaciones; con solamente revisar el prontuario sobre las imputaciones de sus andanzas en el país centroamericano: el Salvador, en complicidad con Leopoldo Castillo alías "el matacura" es suficiente para tener mucho cuidado con este personaje siniestro y de Leopoldo López, no podemos dudar ni un instante, porque ha participado en todas las guarimbas y cuando no ha estado presente, ha intervenido, desde el sitio de su auto asilo o refugio, como ha sido denunciado últimamente.

Ahora, el gancho para sostenerse y no caer definitivamente, es la palabra fraude, como si esto los exime de las responsabilidades e investigaciones llevadas a cabo por fiscal general de la República, Tarek William Saab, de manera minuciosa, pero con la celeridad del caso. Todavía no hemos visto una sola declaración de la oposición pidiendo lo sensato y lógico en estos momentos, que se investigue y se castigue a los responsables de estas guarimbas relampagueantes, pero tan criminales y peligrosas, como las del pasado y nadie puede decir lo contrario, así, pertenezca a la oposición "pacifica", ya que, la guarimbera mayor, María Corina, busca el poder a como dé lugar, como lo demostró, cuando no vio el camino expedito y, entonces desesperada salió pidiendo una invasión, la única alternativa a sus anhelos frustrados, una de las causas de su inhabilitación.

En estos momentos tenemos un bombardeo mediático, desde el exterior cantando fraude en apoyo a los inofensivos inocentes de MaryCori y el muñequito, que ni siquiera con su rostro desencajado por la vejez, puede esconder la criminalidad de la cual es acusado. Se han venido paseando por todas las excusas posibles, pero siempre con la precaución de no pisar más allá de los límites, que los comprometen. Para ellos no existen ataques cibernéticos, a pesar de todos los avances tecnológicos. Niegan la responsabilidad demostrada por CNE, por una simple razón: con sus incesantes ataques mediáticos lo desacreditan, hasta convertirlo en un simple organismo al servicio de los intereses del gobierno y, de ahí seguir cantando fraude. Menos mal, que algo de payasos tienen, porque ahora, salen con una proposición descabellada: una nueva elección, que no está en la Constitución. De dónde sacaron ese parapeto de una segunda vuelta. Será para la próxima, después de las discusiones del caso y aprobación por mayoría. Mientras tanto, seguiremos oyendo fraude, hasta el final de la INHABILITADA y sus ayudantes de turno.