El gobierno bolivariano de Venezuela poco tiene fuerza en la sociedad civil, esto, le preocupa a Gabriel Boric, (Chile), Manuel López Obrador, (México), Gustavo Petro, (Colombia) y, al propio Estados Unidos de Norteamérica junto a Emmanuel Macron, (Francia). Para ejercer sus funciones desde las instituciones públicas. A lo largo de todo el proceso, los planes y su realización han contado de forma crucial con el apoyo militar, no se sostiene solo, a cambio, las direcciones de Estado y gobernaciones de la sociedad civil, repito, han pasado a manos castrenses. Lo referente a lo diplomático y económico, vemos muchos desplazamientos para lograr darle una cara al cuerpo federal Estadunidense. Abogo, para que nuestro presidente tenga un mayor respaldo de sus asesores y voceros que solo obedecen a una opinión, ya debidamente articulada porque jamás han estudiado política, lo que ocasiona un desgaste mayor de nuestro presidente, que luce demacrado.
Los Acuerdos firmados entre grupos o países deben revisarse muy bien para evitar una situación colonial prolongada. La adversidad contra María Corina Machado y Leopoldo López es de vieja data, < una pelea de muchachos callejeros>, y crea una situación de dependencia tal, que el Estado venezolano debe mantenerlos en un presupuesto fiscal aparte ante una falsa realidad., al no expresar con claridad, los términos de ese diálogo, que nunca constituyó un Acuerdo.
Apenas, es necesario mencionar los acuerdos específicos, pero, acordémonos de las concesiones dadas por Clinton y Los Busch, y de Clinton con Obama. Se definen como el único plan "realista" en el Medio Oriente, y por ello, han concedido elogios que nos recuerda a Rusia, lo que pudo hacer cuando se retiró de Afganistán, o Alemania cuando fue expulsada de la Francia ocupada. Es repugnante, hacer esta referencia, hacer esta visión, una observación desde un punto de vista moral como ético. En septiembre de 1971, EE. UU aplica la Convención de los territorios, desde las ocupadas por Israel, hasta lo que sucede en Las Malvinas Argentinas, (Islas de Argenta sometidas a Inglaterra). Es una actitud pública de Los Bush y Clinton para lograr un derecho humanitario, (Carta democrática) y tomar los territorios necesarios en el mundo. De modo, que es interesante darse una lectura de La Convención de Ginebra y conocer sus términos, como la de Barbados, entre una camarilla de venezolanos guarimberos y las autoridades de La Asamblea Nacional de esta República Bolivariana. De modo, que se tiene el derecho de conquistar un territorio ocupado por un enemigo o fuerza hostil, bajo el acuse que el gobierno dictatorial o tirano pueda dañar a la población civil, no tiene derecho a defenderse porque la Comisión de Derechos Humanos a través de las ONG, acusan de violentar las normas.
Todos los acontecimientos en el mundo territorial, (geopolítico), siguen las mismas pautas y, toda invasión o injerencia es planificada. La ONU y OEA son solo intermediarios que no resuelven ningún conflicto. Son acciones fundamentalmente calculadas a costos, cada vez más altos.
Los cristianos evangélicos, nunca hablarán mal de Israel, porque es el pueblo de Jehová, históricamente. El presidente, lo hace a modo propio, y usted le pregunta a algún seguidor de la fe cristiana su relación con Israel, y tendrá una respuesta inmediata, somos parte de un Reino netamente espiritual. Las autoridades eclesiales de estos Acuerdos internos, carecen de imagen real, y solo tiene un costo fiscal a la república. Solo lo expreso como una aclaratoria, porque tengo sesenta años como miembro de La Misión Evangélica en Venezuela. Hay mucho de fábula, mito y fantasía, el presidente a cada uno le da su gótica de agua para permanecer en Miraflores.
Es un despliegue de fuerzas y dominación, se plantean bloques militares para inhibir y contener a los elementos irresponsables y radicales de motivar amenazas desde el Golfo Pérsico hasta La Cuenca del Mar Caribe, puerta de entrada al Cono Sur. La CIA, tiene su corolario lógico, desde una posición que el departamento de inteligencia norteamericano conoce como la oposición en la voz de empresarios e industriales y una élite del gobierno oficialista auspician el neoliberalismo nacionalista. El gobierno revolucionario se complace de la manzana podrida, porque busca agradar, a quien antes combatía, aquí los pobres no cuentan, hay una terminología convencional de los planificadores, comúnmente reformulada para fines políticos, como la recordada, "Teoría del dominó".
Las brumas se han levantado, es el apocalipsis que nos habla el abogado y revolucionario, Luis Brito García. El libro que aún no ha sido revelado, pero, ya se conocen sus acontecimientos: comeremos insectos en vez de leche vacuna y de soya, tendrán un costo alto, alimentos procesados que llevan a la muerte y tienen gusanos en su compuesto, virus gripales, inundaciones y deslave de terrenos, guerras cibernéticas y robots, saltamos de la 3G a la 5 y 6G, matando a las aves, y un dominio militar en todo el planeta, porque el pueblo lo permitió, no importando orígenes. El armamentismo crece al igual que las ojivas nucleares. Por lo pronto, tendremos en 2026, la entrada en su totalidad de la globalización y ya, en 2030, El Nuevo Orden Mundial entra en todo su furor. No habrá pretextos tradicionales, y los registros de documentos y documentales históricos entran en su plena vigencia.
Por otra parte, La Nueva Izquierda hunde y desaparece a la izquierda, pero el antagonismo y las contradicciones del Foro de Sao Paulo alejará y cerrará los caminos del comunismo. Es la última dispensación, el séptimo milenio de una nueva época que ya se cierra, y la sexta década de una decadencia progresiva, la disminución de ofertas de empleos es un presente por la superproducción. El capitalismo como sistema no se repondrá de una de sus fases, y el pobre que se complació en ver a una dirigencia política crecer, la misma nueva burguesía, los verá deambular por las calles y, los evangélicos y jesuitas le darán un mendrugo para comer, pagarán las consecuencias de los fabuladores, en una creencia que nunca ha existido, la militancia en una organización política.
